Capítulo quince

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Capítulo quince:

La oscuridad de la noche inundaba el campamento,menos por las pequeñas lamparas que colgaban encima de las puertas de las cabañas.

______ decidió visitar los lugares que nunca antes había pisado. Como el río que quedaba al borde de la barrera o como,practicamente,todo el campamento.

Comenzó a caminar,guiandose por el ruido de las pequeñas olas chocandose contra la orilla. Y cuando el olor a humedad llegó a las fosas nasales de la chica,comprendió que iva por buen camino.

Comenzó a correr ya que la idea de ver la luna refregada en el lago resultaba muy tentadora y si se daba prisa podría vela antes de que bajara y se ocultara para dar paso al Sol.

Llegó al río con la respiración agitada y se sentó en la orilla para observar lo que tanto anelaba. Era precioso. Sin duda alguna,la vida podía dejar pequeños detalles que merecieran la pena ver.

Cuando metió la mano en el agua para comprobar su temperatura,algo la agarró con fuerza haciendo que un pequeño chillido saliera de sus labios.

Del agua,una cabellera con rizos humedos salió y dejó que la luna iluminara su precioso rostro en el que estaba dibujado la sonrisa más hermosa del mundo.

Era Harry.

—¿Se puede saber que haces? ¡Casi me matas del susto!—susurró/gritó apartando su mano del agarre del chico.

Él ignoro el comentarió de la chica y depositar sus manos en la orilla para luego impulsarse y sentarse a su lado.

______ lo miró. No llevaba camiseta y lo que más la llamó la atención era la grande marca en forma de V invertida que poseía su espalda. Supuso que no estaría todos los segundos de su vida con esas grandes alas pegadas en la espalda y que podría escorderlas debajo de su piel.

—Deberías estar durmiendo.

—Te digo lo mismo—Dejo de observar su perfectamente torso para mirarle se sonrrojó al ver que él sonreía burlesco. La había visto mirandole.

—Necesitaba despejar mi mente y nadar es la forma más útil que conozco. ¿Y tú? ¿Tienes escusa?

—No podía dormir y quería ver la luna en el lago.

Harry sonrió y en un rapido movimiento se levantó y estendió la mano hasta la chica.

—Ven. Te enseñare algo que vale la pena ver.

______ tomó su mano sin importarle que esa estubiera humeda y dejó guiar por él. Los pasos de Harry eran rapidos y seguros a pesar que,con cada paso,la oscuridad se hacía más espesa. Aunque el hecho de poder chocar contra algun obstaculo del camino no era lo que verdaderamente le importaba a la morena,si no lo firme y suave que era aquella mano tan varonil.

La arena del suelo de convirtió en pequeñas piedras que crujían bajo sus pies y las violentas olas del río fueron cambiadas por unas más tranquilas y por el canto de los grillos y de los buhós.

La oscuridad era tan densa que ______ era incapaz de descubrir donde estaba. Pero por lo cerca que sonaban aquellos tranquilizantes ruidos,lo supuso.

Harry desató la unión de sus manos y en el fondo ella bufó.

—¿Estamos al borde de la barrera?

—Sí. Desde aquí se ve genial.

La chica no entendía que debería de ver,hasta que una pequeña y leve luz comenzó a revolotear por la oscuridad,y después de esa,más luzes inundaron el cielo.

—Luciérnagas—confirmo la gruesa voz de Harry.

—Valla es...precioso.

Ambos se quedaron admirando aquel hermoso espectaculo,hasta que una de las manos del rizado sujetaron la cadera de esta y su gruesa voz susurró:

—No más que tu—Ella se sonrrojo y sabía que hacía mal. Para ella,él era un estúpido mujeriego egocéntrico y no merecía nada de las chicas pero es que...era jodidamente perfecto y las mariposas que volaban en su estomago libremente la hacían perder la cabeza—. Sonrrojada estas más hermosa.

_____ decidió hacer oidos sordos ante su comentario y miró fijamente a la luciérnaga más cercana.

Estubieron unos minutos en silenció mirando fijamemte el romántico espectaculo hasta que ella decidió hablar.

—Creo que será mejor que me vaya—Retrocedió unos pasos y giró sobre sus talones,pero la mano de Harry agarrando su muñeca la detubo.

—Quería pedirte perdon por como te trate ayer.

______ sonrió. Al parecer,no era tan estupido como pensaba.

—No importa.

—Claro que importa—Frunció el ceño—. Te trate como una basura y tu lo unico que querías era ser amable. De verdad,lo lamento.

Ella quisó hacerse rogar,pero no quería sobrepasar sus límites y volver a presencíar al malumorado Harry y tambien es que al ver los ojos esmeraldas del rizado pudo ver tristeza.

—Te perdono.

Harry sonrió felizmente.

—Gracias. Te veré mañana—Y sin decir nada más,salió corriendo.

La leyenda del puente de los Dioses {H.S}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora