Perdido En Ti [COMPLETA]

Capitulo 3

POV MATT

Que chica, ¿Cuál era su nombre?, rápidamente busqué entre las carpetas. Samantha, joder, al verla salir de mi despacho de tal manera hizo que se me pusiera dura en segundos.

Tenía una silueta perfecta, sus piernas bien trabajadas, su cadera era un poco ancha, con un trasero y pechos de infarto, su delgada cintura, sus delicados brazos, su altura 1.75 más o menos, esos ojazos cafés, su cabello negro como la noche, su piel blanca como la nieve, era la mujer perfecta.

¿Al menos podría decirme si me llamará?

La pregunta me ofendía en el fondo. Por supuesto que la llamaría, a fin de cuentas ahora es mi empleada.

Cuando conoces bien a las personas es fácil manipularlas, y a ella no la conocía, lo que si sabía era que su carácter es fuerte, es parte de las pocas personas que no apartan la mirada cuando las observo detenidamente, fue admirable, y algo me dice que lo que ella quiere lo consigue.

Cuando exhalé me di cuenta de que deje de respirar por un momento.

Hice unos cuantos movimientos con mis empleados, la próxima semana haría una evaluación a fondo con ellos, quería que todo fuera como yo quería y así todo fluyera bien. Despedir a personal que no estaba cumpliendo con las normas o su trabajo no fuera gustoso.

Para cuando terminé, metí lo necesario al maletín para hacer papeleo en mí casa, de repente sonó mi teléfono informándome que me había llegado un mensaje.

De: John

Matt, pasare por ti más tarde, prepárate para ser vencido;)

Si claro, sólo con saber de qué van los tiros estoy preparado para lo que venga. No me quedaría de brazos cruzados, respondí.

Para: John

En cuanto empiece veremos quién será el perdedor, Suerte.

Guardé el teléfono en mi saco y me fui directo a casa.

Por el camino me gusta escuchar música, así que no dure mucho hasta que coloque el álbum "Wipe Out!" de The Neighbourhood.

De vuelta en mi lugar de descanso, todo estaba limpio pero yo estaba hambriento, busqué los ingredientes para prepararme un emparedado.

En los minutos que quedaban para la llegada de mi amigo me senté en el sofá y me dispuse a ver televisión.

Seis quin... Antes de pronunciar el último número, sonó mi teléfono para indicarme que John ya estaba abajo esperándome. Así que sin más demora bajé por el elevador, ya que de momento no quería empezar a calentar bajando diecinueve pisos abajo.

Y al salir ahí estaba su auto delante de la entrada.

—Vas a tragar mi asfalto —Mostró una sonrisa de satisfacción.

— ¿Así que ya has perdido suficiente para acumular asfalto he? —Ja.

—Sabes a qué me refiero.

Y conducimos hasta un lugar en donde había muchos árboles y colinas, todo esto rodeado de un alambrado. Era una buena vista. No estaba tan retirado del centro de la ciudad como creía.

Fuimos recibidos por un señor de unos cuarenta años y su hijo el cual se me hacía conocido, viéndolos de primeras parecían amistosos por que el narcisista era conocido por aquí.

—Joe, jugaremos 3 rondas—Así se llamaba el hombre de cuarenta.

—Me parece bien y dime quien es tu amigo—dijo sosteniendo las municiones que teníamos que comprar.