*Pov Lauren*
Camila corrió a abrazar uno de mis autos deportivos. Tenía un Ford Mustang negro un modelo nuevo, pero no tan nuevo
-Regalo de mí madre hace ya casi un año. - le dije antes de que preguntara, me gusta la inocencia que tiene esta niña
-Estoy haciendo el ridículo, verdad?- Dijo riéndose arrugando la nariz mientras aún abrazaba el auto.
Sí un poco - le dije lo más sería que pude, pero apenas ella abrió los ojos y se sonrojo ya no podía contener mi risa.
-He tenido sueños con este carro. - se mordió el labio y yo por instinto tenía la mirada pegada a su boca.
-Algún día te dejaré montar en el .- me Voltee hacia el otro auto.
¿por que no hoy? Yo desearía montarlo.- dijo haciendo un pequeño puchero.
- Sí, y yo desearía ser megan fox.- Respondí rodando los ojos.
-Eres más guapa que Megan Fox- dijo y se puso muy colorada, haciéndome causar ternura. -Bueno. Quiero decir tienen cierto parecido ... Y además bueno .. Eres linda y lo que quiero decir es.... - se quedó en silencio.
-Deja de ser mentirosa.- dije acercándome a ella que estaba sentada en el capó del carro. Entonces te parezco linda?
Ella trago pesadamente mientras me miraba directamente a los ojos - Seguro escuchaste mal. Dijo dificultosamente
-Ves que sigues con tus mentiras? Soy buena escuchando - le dije cerca de su cara
se quedó en silencio unos segundos para luego meter un grito que casi me dejó sorda. -Tienes un Mini Cooper. - me empujó y fue hacia el ya mencionado auto.-Y tu tienes un lindo trasero. - susurré para mí, mientras ella daba brinquitos
-Yo quiero uno de estos - dijo con una sonrisa boba.
-Yo quiero que dejes de babear mis autos - dije para que de alejara ya que manchaba con sus manos los vidrios de cada uno de ellos.
-Puedo quedarme aquí todo un día - casi grito emocionada - También tienes una moto? - corrió hacia ella y se monto -wow lolo -
-Segura que te quedarías acá todo el día - dije cansada de estar la mirando mientras ensuciaba mis cosas.
-Totalmente. - ella estaba en el fondo del garaje. Yo lentamente me aleje caminado hacia la puerta, pero aún con la vista en ella.
-Bien. Cuando te aburras me dices - y de un portazo cerré la puerta mientras salía corriendo..
Al entrar a mi casa lo primero que encontré fue a verónica caminando por todo el living en ropa interior.
-¿Qué se supone que haces? - Mi amiga tenía un excelente cuerpo. No puedo negarlo pero ¿andar desnuda en mi casa?
-¿Dónde dejaste a tu amiguita bonita? - Preguntó mirando detrás de mí.
-Para qué la necesitas?- me cruce de brazos.
-Sólo quería hablar con ella, Laur. -
-En ropa interior. Verónica? - Levante una ceja y la mire de una forma no muy agradable.
-Oh no, ya le echaste el ojo a la del lindo culito?- retrocedió unos pasos pero soltando una risita