We are killers

CAPÍTULO 36

El fin de semana decidí salir a una discoteca, Jong In al fin tenía un tiempo libre y casualmente era de noche, me invito a salir con sus amigos, él y sus compañeros tuvieron una buena semana y están más que ansiosos por celebrar.

Al inicio estuve en una mesa jugando y charlando con todos sobre música y demás cosas triviales hasta que Jong In me invito a bailar.

Estuvimos tratando de hacer pasos de música electrónica en pareja y por un rato de bailar rock, en ocasiones nos sincronizamos a la perfección otras... lo intentamos, igual fue más divertido cuando fallábamos que cuando lo hacíamos bien. En algún momento la música tuvo un cambio drástico y se escuchó "We were in love" de T-ara con Davichi.

El me abrazo para bailar y torpemente le correspondí al abrazo, respire hondo, aún estaba agitada por el anterior ritmo que hasta podía sentir los latidos de mi corazón, en cambio Jong In, él está perfectamente, aquí es donde se nota la diferencia entre ser sedentaria y solo hacer yoga ocasionalmente a hacer ejercicio diariamente, yo estoy por buscar un tanque de oxígeno y mi atlético novio esta con la anergia para seguir bailando toda la noche.

— ¿cansada? — Me pregunto con un toque de burla. No respondí porque quería disfrutar de su cercanía, tenerlo así me hacía sentir que no necesitaba nada más en el mundo que a él y por momentos así es que seguía con él, a pesar de no verlo con frecuencia o que últimamente pensara más en él como un amigo que como mi pareja — podríamos tomar algo — propuso apretándome un poco para luego deshacer el abrazo.

Asentí y me dirigí a la mesa donde están los demás, el me detuvo tomándome de la mano.

—Por allá — guiño al tiempo que movió la cabeza en dirección a la barra. Sonreí dejándome llevar.

Pedimos dos bebidas ligeras y nos quedamos hablando sobre nuestras mascotas, del hecho de que ya no parecen nuestras sino de su hermana e ideamos un plan para rescatarlas. En medio de nuestra animada charla me tomo de la mano y con la otra mano me acomodo el pelo detrás de la oreja, nuestro plan quedo en el olvido, me centre en nuestras manos unidas y él en mi rostro.

—Planeaba terminar contigo — sentí como la temperatura de mi cuerpo se reducía súbitamente, está esperando que lo mire a los ojos pero no me siento capaz de hacerlo — últimamente, las cosas han sido diferentes.

He pensado en tantas ocasiones que nuestro amor se acabó y que solo estamos juntos por el hábito de estar juntos, sin embargo, ahora que él lo dice en voz alta me duele, siento que no es cierto, no quiero dejarlo porque estoy enamorada de él.

— Lo has dicho en pasado — comente tras analizar sus palabras — ¿Qué te ha hecho cambiar de opinión?

Jong In me tomo del mentón haciéndome levantar la cabeza sin soltar mi mano y me atreví a mirarlo a los ojos.

—había pensado en dejarte por que creí que ya no te amaba, pero no es así, hemos estado distantes últimamente, cambiamos y también esto que sentimos, ya no es el amor pasional y desinhibido de un principio, ahora es algo tan simple y significativo como darnos los buenos días o cenar juntos.

—Hablas como si tuviéramos treinta años de casados —solté sin pensar arruinando con la seriedad del momento.

—Puede que no, pero me encantaría saber lo que es estar casado contigo por más de treinta años — no supe cómo responder a eso, solo sonreí como una tonta.

Considere besar a Jong In y estuvimos a punto de hacerlo si una silla no hubiera caído del palco VIP rompiéndose con algunos trozos de plástico cayendo a nuestros pies.