Aron se quedó en silencio, no lo presione para hablar, lo deje que ordenara sus ideas y decidiera, después de todo es su historia y no es nada sencilla de narrar.
—No sé qué decir, me mareo solo de recordar lo que he hecho.
—Hagamos algo, yo pregunto y tu respondes ¿te parece? — asintió sentándose para quedar de frente a mí. — ¿has tenido una infancia bonita? — Arrugo el ceño sin comprender mi pregunta — me refiero a abusos psicológicos o físicos por parte de algún familiar o extraños, burlas o presión excesiva, algo que te afectase y que nunca mencionaras.
— ¿Qué puedo decir? Era un niño coreano en un país extranjero, uno en el que solo existe China y en Asia solo se come arroz. Podía lidiar con ello, solo era ignorancia.
— ¿Solo eran comentarios? ¿Alguna vez fue algo más que chistes racistas?
— ¿Qué tiene que ver eso con mi estadía en NUEST?
—Mucho, estoy aquí para averiguar que los pone al límite, las razones por las que te volviste asesino no son las mismas que las de Baek pero ambos están aquí, si analizas el caso de Baek veras que fue el abuso a su prima lo que le llevo al límite, con JR fue el bullyng por ser pobre, con Minhyun los abusos de su padre y su amante malvada. Todos mataron por algo y sé que no eres la excepción.
— Si me molestaba ser asiático, de hecho no me gustaba, los europeos los identifican por su lenguaje pero a los asiáticos porque lucimos iguales.
—Todos tienen los ojos rasgados no son iguales, tenlo en cuenta.
—Para los americanos somos iguales, en primaria me molestaron mucho por eso, en secundaria cambio un poco pero nunca quise destacar académicamente, ya sabes, eso de que los asiáticos somos genios, logre encajar un poco pero nunca fui más que un nerd.
— ¿Recuerdas la primera vez que pensaste en matar a alguien?
—No, lo hacía como terapia, cuando alguien me molestaba, lo imaginaba degollado o sangrando por cualquier motivo, eso me causaba gracia y me quitaba el enfado, era como un hábito, cuando tenía un mal día imaginaba hacerle daño a otros, los videojuegos eran muy útiles para eso.
— ¿tenías pensamientos sádicos sexuales con frecuencia?
—No antes de matar. Antes solo era un chico jugando con su sexualidad.
— ¿Por qué solo chicas? ¿Qué te hizo odiar a las mujeres?
—No es a las mujeres en general, tengo hermanas y las quiero, mi odio era solo contra ellas, las que ataque.
— ¿Qué tenían ellas que las hizo diferentes?
—Una de ellas me gustaba, Raquel, se lo hice saber y me creí correspondido, luego mintió asegurando que intente abusar de ella cuando su familia nos descubrió. Ella casi hace que me expulsen del instituto por culpa de eso.
—Nso debió doler.
—No era dolor, era rabia. Cuando confronto a los directivos dijo que ella no se fijaría en el chico asiático, que no era suficiente para ella. Mi familia era pobre e inmigrante, ella no tenía mucho pero estaba mejor que mi familia. Me molesto que me tratara como poca cosa, que sus amigas la apoyaran a pesar de saber la verdad y que se lo dijeran a todos, en poco tiempo yo tenía la etiqueta de violador y no pude hacer nada para cambiarlo.
— ¿Qué hiciste después?
—No hice nada, mis padres lograron que no me expulsaran por lo que no les hice nada, ya estaba en mi último año y solo quería entrar a una universidad.
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We are killers
Fiksi PenggemarEn esta historia no se puede catalogar a los personajes como buenos y malos, eso no significa que no hay villanos y víctimas. Aquí, como en el mundo real todos son buenos y malos en proporciones distintas. Esta historia nace de la pregunta que me...