Do You Love Me? (Axl Rose Y Tu). © [Primera Parte]

Capitulo 17

Narra Axl:

Ahora era un echo... ______ Era mi novia... Me consideraba el hombre MÁS afortunado del mundo. Tenía a la chica que amo, tenía amigos que me apoyaban y tenia una banda... Sin duda, era el paraíso para mi.

Después de que Popcorn nos hiciera caer al lago, maldije por lo bajo y ayude a ______ a salir. No estaba enojada, al contrario, estaba riendo como loca junto con los chicos, y yo salí a perseguir a Steven:

- ¡Maldito enano! Ven acá o estas fuera de la banda! - dije y el se escondió detrás de ______.

- ¡Ahh! ______ dile que no me saque de la banda, no Axl porfavor no me quiero ir, amo la banda y te prometo que... - no termino de decir su frase, ya que _______ lo "saco" de su escondite.

- Bien, los dos se pedirán perdón y se darán la mano... Sin golpearse, Axl - dijo ______, y claro, la obedecí, como dije antes, ella me hace cambiar.

- Steven... Perdón por decirte enano y por querer sacarte de la banda... - le di un apretón de manos, y el solo me dio una sonrisa.

- Chicos, no se ustedes... Pero _______ está sufriendo de hipotermia y nadie esta haciendo nada. - dijo Duff señalandola, camine hacia ella y estaba temblando, la tome en mis manos y los chicos me estaban siguiendo.

- Axl, tengo frió. Vamos a casa... ¡AHORA! - dijo ella con su voz mandona pero encantadora.

- Woo! _____ se puso agresiva Corramos todos! - soltó Duff y tomo a Steven en brazos, salieron corriendo y riendo como retrasados mentales.

- Amm... Linda, quieres que nos quedemos en la cabaña? Digo, está mas cerca y con todos borrachos no podremos conducir. - dije mirando a todos con gracia y decepción.

- Está bien, iré a traerlos para que... - en cuanto note su sonrojo, la tome del brazo y la atraje a mi.

- ¿Que estas... Haciendo... Axl? - dijo nerviosa e intentando safarse de mi agarre.
- Vamos nena, mírame a los ojos, se que estas sonrojada. Asi te vez mas Linda que de costumbre. - me miro a los ojos y si, estaba roja como tomate. Me encantaban sus bellos ojos.

- Axl, basta ya! - soltó una pequeña risa - Vamos a la cabaña ya, de lo contrario ellos se pondrán peor. - señaló a los chicos y estaban irreconocibles, jamás los había visto tan ebrios.

Después de tanto tiempo afuera, por fin conseguimos llevarlos a la cabaña, fue un camino largo. Vomitando donde quiera y hablando de idioteces.

_______ estuvo atendiendolos, cuidandolos y vigilando que no ingirieran una sola gota de Alcohol.
Está chica si que nos hará cambiar a todos, esa ternura y amabilidad que tiene, la hace que me enamoré cada día más. ¿Como podré compensarlo? Algunas chicas pedirían sexo, pero ella es distinta y... No se rebajaría solo a pedir sexo... Una canción... ¡Una Canción! Perfecto, ahora tengo el regalo de ______. No es lo suficiente para ella, pero la amo y... Quiero darle uno de tantos obsequios que le daré... No trato de comprarla con regalos, simplemente así le demuestro que la amo... Aunque se merezca mucho más.

Narra ______:

Nunca pensé que Axl me pediría ser su novia... Ni siquiera pensé que le llegaría a gustar.

Mientras cuidaba a los chicos ebrios, el sueño me consumía. Axl pudo notarlo, y como no? Si parecía que no dormía en días.
Me senté un momento en el sofá, al lado de Izzy, y sin mas me quedé dormida. Axl me tomo en brazos y me llevo a mi habitación, me di un baño rápido (el cual no disfrute por que Axl estaba cuidando en la puerta que no entrara nadie) Y me arrope para meterme en la cama (que no era mas que un Short pequeño y una blusa de Aerosmith), los demás no volvieron a hacer ruido, supuse que se quedaron dormidos. Y así sin mas, me quede dormida. Pero el sueño fue poco, Axl entro a la habitación, pude oírlo y no dije nada. Me asome de entre las sabanas y en cuanto abrí los ojos... ¡¡¡Axl estaba sin camisa y sin pantalones!!! Solo estaba en Boxxers... Un molesto calor subió a mis mejillas y me oculte de nuevo en la almohada. Se escucharon unos pasos al lado de la cama, y los nervios se apoderaron de mi, haciéndome temblar y tener una estúpida sonrisa en mi cara, sentí como la cama se hundía de el lado donde estaba Axl, y termino a mi lado, una risa mas que estúpida salio de mi boca y Axl se sobresalto:

- Nena... ¿Estas despierta aun? - dijo entre risas y apartando el cabello de mi cara, dejando al descubierto mi gran sonrojo.

- No Axl... Estoy muy dormida. - tome una almohada y se la lance en la cara. 

- Estas... Sonrojada? Te vez hermosa... - y justo cuando pensaba que mi sonrojo no podía volverse mas, sucedió. Y Axl soltó una carcajada.

- Deja de mirarme! - tome una almohada, se la arroje y me cubrí con las sabanas de nuevo.

- Nena lo siento es solo que... Quiero decirte tantas cosas hermosas pero... 

- Axl, solo dilo. No importa si me muero por este maldito sonrojo... Solo dilo pelirrojo, vamos. - dije y me senté en la cama, mirándolo fijamente.

- Pues yo... Parezco un idiota enamorado, y nunca me había pasado, pero se siente tan bien si es al lado de esta bellisima chica... - se acercaba mas y mas a mi, yo mire a otro lado con la cabeza al suelo. Me levanto la mirada y me beso.

Sus besos... Esos que me decían mas de lo que el no podía, me encantaban. Poco a poco iba bajando sus manos poniéndolas en mis caderas, me cargo para ponerme sobre sus piernas y lenta pero delicadamente, movía mis caderas y soltabamos pequeños gemidos. 
Me recosto sobre la cama, el estaba encima mio, y en un movimiento rápido me despojo de mi blusa y mis Shorts. Jugueteaba con el borde de mi sostén y mordía mis labios con suavidad. Movia sus caderas con mayor velocidad mientras yo plantaba pequeños besos en su cuello. De un momento a otro, nuestra ropa interior estaba al otro lado de la habitación. Axl y yo compartíamos respiraciones y el me susurró:

- Tu estas... Segura de... esto? - pregunto Axl con sus ojos clavados en los míos y con una respiración agitada.

- Yo... Aun no... - dije y lo abrace.

- No te preocupes linda... No te presionare y... Será cuando tu quieras... Te Amo. - dijo correspondiendo al abrazo y beso mi frente.

- También Te Amo, Axl...

Nos recostamos en la cama y me acurruque en su pecho, mientras el acariciaba mi cabello y me rodeaba con sus manos. Hasta que después de dos horas de platica, caímos rendidos de sueño.