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AXEL

Me siento rápidamente y jadeo.

Ni sé cómo empezar a explicar lo que está pasando por mi cabeza en este momento.

Sólo sé que nunca me había sentido más ligero en mi vida, como si me hubieran quitado un peso enorme de encima.

Me toma un segundo mirar a mi alrededor.

Drake está frente a mí, de pie, con cara estupefacta, mis padres están inmóviles, viéndome con la boca abierta, Tamara está parada junto a Jan, ambos callados y mirándome raro.

Volteo mi cabeza a un lado y veo a Blake inconsciente.

-Eh...-comienzo a decir, pero al segundo mi madre está encima de mí.

Empieza a darme besos y a decirme cuánto me ama, al igual que mi padre.

Hago una mueca y río.

-Hola, amigo- dice Pak en mi cabeza y sonrío.

-Pak- veo a mi lobo recostarse, relajado, moviendo la cola.

Por encima de la cabeza de mamá logro ver a Drake.

Está acercándose lentamente y llorando.

-Gordo- sonrío.

- ¡Ay, por la luna! – exclama. Se deja caer frente a mí y se escabulle entre mis padres para abrazarme- te extrañé mucho.

-Yo más, Drake- sonrío de lado y veo sus ojos verdes.

Desvía la mirada a un lado y lentamente se separa de mí.

Mi mamá sigue abrazándome y mi padre está ahora de pie, mirándome con una sonrisa.

Drake va gateando hacia el pelinegro y toca su mejilla.

- ¿Blake? -susurra y luego ve hacia Jan- ¿qué tiene? -le pregunta asustado.

-No, Drake, ven- le digo, preocupado de que despierte y lo ataque. Intento acercarme a él, pero mi madre no me suelta.

-Él... él acaba de...-balbucea Jan.

-Él acaba de hacer un gran y complicado hechizo. Por esa razón cayó inconsciente, por lo débil que lo dejó. Este hechizo absorbe mucho poder. Le dio vida a Axel sacrificando una de las suyas- interviene Tamara.

- ¿Qué? -susurro mirando al Winchy.

- ¿Una de las suyas? -pregunta Drake- ¿acaso tiene más de una?

-Bueno, técnicamente, su demonio era una especie de vida habitando en su cuerpo. No era parte de él. Por lo que, sacrificó al demonio, dándole una oportunidad de vida a Axel.

- ¿Le pasó su demonio? -preguntó un guerrero rubio a lo que Tamara rio.

-No, muchacho. Sólo le dio su vida- dice y luego se va hacia la casa.

Blake despierta lentamente y mi amigo lo abraza al instante.

La cara del tipo queda mirando hacia mí. Sus ojos azules conectan con los míos.

Abraza fuertemente a Drake y asiente hacia mí.

Sonrío un poco y asiento devuelta.

-Esto fue mejor que unas rosas y chocolates para el día de San Valentín- se oye la voz de Abby y las risas de Jan- ¿Traer a su mejor amigo a la vida? Hombre, ya ganaste. Drake, ábrele las piernas al mesías, tienes mi permiso.

Blake sonríe soltando algunas risas y Drake se separa, dejando a la vista su cara sonrojada.

-Ay, cállate, bruja- se tapa el rostro y sonrío.

MI SALVACIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora