Un Instituto inmenso. Tan grande que dan la impresión de perderse fácilmente. Al entrar me topé con la directora del lugar, una mujer canosa de unos 70 u 80 años, vestida con una bata rosada, zapatos negros y su cabello recogido en un intrépido rodete.
-Bienvenida al Instituto Sweet Amoris- saluda con una voz chillona. -Puedo suponer que usted es la alumna nueva, ¿no es cierto?-pregunta deslumbrante.
-La misma- dije estrechándole mi mano.
-Le sugiero que vaya a ver a Nathaniel, el delegado principal, así termina de completar su inscripción-
Asiento, pero no tengo ninguna intención de ir a ver al tal "Nathaniel" de momento. Primero me apetece visitar el instituto. Me dirigí la derecha donde se encontraba una puerta en el que marca Aula A. Entré y una chica de cabellos naranjas saluda gentilmente.
-¡Hey, debes de ser la nueva! Iris, un gusto- me sonrío alegre.
-Leyla - Sonreí.
En ese instante una linda chica de cabellos plateados entró a la habitación.
-Oh... Hola, nunca antes te había visto por el Insti, ¿eres la alumna de intercambio?- Iris rió detrás de mi
-No realmente- respondí con una tímida sonrisa -Soy nueva-
-Ya, tu cara lo decía todo. Soy Rosa por cierto, Rosalya- Sonrió mostrando sus perfectos dientes.
-Leyla...- Miré fijamente a sus ojos. -Oye, perdona si soy algo entrometida pero... ¿Esos son tus ojos o son lentillas?- Rosalya soltó una carcajada junto con Iris.
-No, son mis ojos.- Dijo aun riendo -Aun que la proxima vez que conozcas a alguien no le preguntes algo así de antemano-
-L-lo siento... no queria moles...-
-¡No, no! en absoluto, me gustan mis ojos ámbar, es un buen tema para hablar cuando no tienes mas ideas ¿verdad Iris?- Iris río vergonzosamente -Lo sentimos, tenemos clase de Historia contemporánea, pero ven en el primer break con nosotras al patio. Adiós- se despidieron ambas saliendo del aula.
-Pues no me fue tan mal como podría haber esperado...- pensé. Me dirigí en dirección al patio. El olor a humo invadía mis fosas nasales... Me gusta. ¡No! debo dejarlo. Sin embargo me mis pies se dirigieron al patio.
Un chico pelirrojo posado contra la pared, fumaba un cigarro. Preferí no molestarle. Estos eran la clase de chicos que me atraían, pero no me hacían bien. Así que decidí dar la media vuelta hacia la bendita sala de delegados. Abrí repentinamente la puerta
-Lo siento, ¿eres... Nathaniel?-
-Si, imagino que debes de ser la nueva.- Me miro unos segundos y me dió un apretón de manos. - Lo siento, he leído tu expediente. Quiero que sepas que estaré aquí para ti, y que si necesitas a alguien no dudes en venir a hablar conmigo.- Mi sangre hervía
-¡¿Que has hecho que?!- Me estremecí, el pareció avergonzarse por lo cual me contuve las ganas de golpear al imbécil de Nathaniel. -Para el futuro, no metas las narices en donde no te llaman.- No podía lograr pronunciar palabra alguna -Dime que falta para terminar mi inscripción.-
-20 Euros y una foto carné.- Tartamudeo confundido.
-¿Y donde se supone que conseguiré eso?-
-En el bazar, esta a 5 manzanas del Instituto. Y... a-algo mas, toma tus horarios.- Le agradecí exasperada.
Salí de la sala dando un portazo. ¿Que nadie puede dejar de decir estupideces sobre mi?
-¿Problemas con el delegado?- Levanto mi cabeza, el pelirrojo.
-¿Tu también?- respondí irónica
-En efecto.- Sonrió. -Castiel, si quieres ajustar cuentas no dudes en pedírmelo.- Sonrio ¿Me esta vacilando? Rodé los ojos ignorandolo.
De camino al bazar sentí como una mano me tomaba por la muñeca.
-¿Ly?- gire mi cabeza -¿No me recuerdas?- Pensé por unos segundos pero luego acabe rindiéndome al tiempo que negaba con mi cabeza. -Soy Ken, ¿que ya te has olvidado de mi?-
Mis ojos se abrieron como platos, no podía creerlo. Ken, el mismo Ken que me perseguía en mi antiguo instituto. Sigo sin creerlo. Lo abracé.
-¡Madre mia!, esto es increíble... Estas mucho mas guapo de lo que recordaba- Sonreí.
-Esto... gracias- dijo rascando su nuca- ¿Que haces aqui? Pense que te quedarias en el antiguo instituto con Laeti- dijo con cierta melancolía.
-Ken lo sien...-
-Nada de Ken, no mas Ken. Desde ahora, Kentin.- Puse mis ojos en blanco.
-De acuerdo Kentin - pronuncie más fuerte su nombre- ahora mismo estoy muy ocupada. Tengo que hacer unas cosas para mi inscripción en el Sweet Amoris, pero te prometo que ya quedaremos para tomar un café, ¿vale?- Asintió, intercambiamos nuestros WhatsApps y se fue.
Si no me apresuro no llegaré para las siguientes horas de clase. Llegue al bazar, me tomé la foto carné y luego salí rumbo al Instituto.
Por el pasillo en dirección a la sala de delegados alguien me piso haciendo que cayera de pleno al suelo.
-¿Pero quién te crees que eres?- Exclamé enfadada.
Al levantarme me encuentré con una rubia teñida y sus dos lagartijas detrás suyo.
-Mira a quien tenemos aquí, debe de ser la nueva pringada del Insti- comenta graciosa mientras ríe de forma tan estúpida.
-¿Quien te crees que eres "Barbie", para hacerme esto?- pregunto elevando mi tono de voz.
-Cálmate, si empiezas una pelea lo único que obtendrás es un castigo niñita.- rió con su voz chillona. Típica de Barbie.
-No sabia que habia zorras en este instituto... Sobre todo rubias teñidas con extensiones falsas.-sonrío con aire victorioso.
-¿Como te atreves?- mostró su cara de indignación poco creíble. -Espero que estés segura de lo que haces, ten cuidado zorra.- Me tomó por el pelo y lo jaló.
-¡Zorra tu abuela!- le grité, pero la estúpida no se percató.
Al girarme pude ver al pelirrojo en una esquina partiéndose le culo de la risa, mientras me miraba de la misma manera que Ben solía hacer.
-¡Se termino el espectáculo!- Grité para luego irme, pero sentí una mano tomarme del brazo y jalarme, era Castiel.
-Sh...- posó su dedo índice en mis labios.
Me acerqué muy lentamente a el con una sonrisa sarcástica- Si me tocas un pelo, te enteras- sonrió sin emitir una sola palabra. Me soltó. -Por cierto-Castiel se giró. -Soy Leyla.
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"Tu Y Yo Por Siempre" [Castiel&Tu] C.d.m |Editando|
FanfictionAveces ocurre que lo que empieza como una locura se convierte en lo mejor de tu vida... Segunda temporada "No me Abandones"