Desconfianza:

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Me gire bruscamente, mire a Debrah. Había cambiado tanto que casi ni la reconocí. Llevaba ropa demasiado provocativa, unos vaqueros rasgados y botas. Deseando no haberla visto fingí un rostro lleno de asombro y alegría. 

-Madre mía tía, hace años que no te veo- dijo de forma suelta

-Que va, no exageres- respondí franca. -Maldita sea...-murmuré

El simple hecho de ver en rostro de Debrah, por un lado me alegraba pero por otra parte muy importante no. Me invadía la confusión, el rencor. 

-Tía tenemos que hablar de muchas cosas...- soltó de la nada. -Pensé que tal vez podríamos ir de tiendas y cotillear, muchas cosas han pasado -Y no sabes cuantas, pensé -¡Jilin te extrañe mazo!- me abrazó casi asfixiandome. 

 -Pues comienza ya, iremos ahora mismo de tiendas- dije arrastrándola del brazo hasta la parada del autobús. Durante el trayecto charlamos de que haríamos allí, básicamente hablar, hablar y hablar.

Una vez llegado nos adentramos en el centro comercial. Propuse ir a la tienda de videojuegos, ya que quería uno nuevo, por lo general ahogo mis penas con dinero y alcohol. Siempre es una buena idea el centro comercial para gastar dinero. 

 -No me vengas con tus tonterías eh, que ya las veo venir, pero tengo que decir que estas mucho mas guapa desde que te mudaste- Sonreí. -Era hora de dejar esas horrorosas gafas junto con la ropa de tu abuela, ¿no es así, Leylipu?- dijo mientras sobaba mis mejillas. Mi sangre comenzó a calentarse. 

 -Gracias- respondí fríamente. -Oye, ¿cómo es que me encontraste?-

 -Me lo dijo Vanessa, por cierto ¿te encuentras bien luego lo que ocurrió con Will?-

Asentí segura pero entristecida por dentro. -Bueno, ya cuenta, cuenta- dije emocionada.

-Bueno tía, es que todo ha pasado demasiado rápido, conocí a un pelirrojo muy guapo... y me enrolle con el, sabes, es guitarrista- dijo entusiasmada, no pude evitar hacer una mueca de desprecio. Asentí al saber que era cierto lo que habia visto con mis propio ojos; Castiel estaba enrollado con mi mejor amiga.

Luego de una larga charla de chicas, más bien de una larga charla de una mentirosa volví a mi casa, donde me desplome por completo en mi habitación. Así que Castiel no tardó nada, nunca le interese, me siento tan estupida... Mire el techo de mi habitación pensando en mi pasado. Ben habia hecho exactamente lo mismo.

Cogí de mi guardarropas un top rojo, una minifalda negra, tacones y medias, para vestirme (no, para doblarlos y volverlos a guardar, porque así me divierto :'v). Se podría decir que estoy vestida de puta, pero es lo único que se me ocurre hacer en esto momentos. Salí de mi casa directo a la discoteca más cercana donde pedí demasiado alcohol. Una vez lo suficientemente ebria me metí en medio de la pista a bailar. Un tío cachas se me acercó tomándome por la cintura.

 -Hola preciosa, ¿no eres de por aquí cierto?- dijo el moreno. A decir verdad era guapísimo.  Solo me di la vuelta y con mi dedo índice toque sus labios obligándolo a callarse.

 -Llévame a un lugar...- Susurre en su oído la ultima palabra seductivamente- Mejor- Me condujo a la zona de los sofás donde había otro tío esperándonos.  Me sentó en el medio de ambos y a la vez me comenzarona masajear y besarme por todas partes. No lograba pensar en nada, solo me dejaba llevar. Pero un lado mi conciencia no paraba de gritarme basta, pero no poía para en este momento De pronto escuche como comenzaron a tocar música, tenia intención de ver el espectaculo pero el moreno me tomo por la cintura sin dejar que me vaya, luego me obligo a tomar algo, y ese algo me dejó dormida completamente. Genial, ahora seré violada.

"Tu Y Yo Por Siempre"  [Castiel&Tu] C.d.m |Editando|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora