Capitulo 5

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  Fuimos a la Disquera esa tarde. Como era obvio Sullivan condujo el carro.
Llegamos allá y lo primero que hizo fue saludar con Voony y entablar una conversación con ella.
- Jimmy, ya vamos – lo jalé de brazo.
- Te llamaré – le dijo James a Voony mientras yo presionaba el botón del ascensor.
- No seas un baboso – le dije  cuando las puertas se habían cerrado.
- Estás celosa porque tú no tienes con quien llamarte – me dijo él.
- Como sea –

Las puertas se abrieron y me encontré otra vez en medio del pasillo frente a la oficina de papá, para mi sorpresa Zachary estaba sentado es su silla. Es un sinvergüenza... ¿Qué se cree? Yo soy la única que puede ocupar esa silla.

- ¿Qué haces ahí? – le dije a Zachary entrando a la oficina de papá.
- Estoy a cargo – dijo mientras revisaba unos papeles.
- Bien, pero no puedes sentarte ahí...yo heredaré esa silla y no me sentaré en ella sabiendo que tu trasero la tocó – le reclamé. Jimmy se largó a reír pero Zachary no lo hizo. Se puso de pie,
- Ya déjate de jueguitos tontos, compórtate, ¿quieres? – gruñó.
- Oh... ¿Cómo te atreves? – le dije.
- Soy tu jefe –
- No, yo soy tu jefa... y estás despedido – le grité. Él me miró muy sereno.
- No tienes el poder de despedirme Samantha, yo mando y punto. Ahora ve a traerme un café y saca a tu novio de aquí, este es tu trabajo – me dijo
- Él no es mi novio, y yo traigo a quien quiero acá... - dije entre dientes – y no pienso traerte un café – grité
- Entonces estás despedida – me dijo muy tranquilo. Miré a Jimmy que estaba igual de asombrado que yo...
- No debiste decir eso Zachary... - masculló Liam.
- Sí, no debiste... - me acerqué al escritorio y le sostuve la mirada – esto que vez aquí Baker, es mío – modulé – y tú, eres un insecto a mi lado, no tienes el poder de despedirme de mi empresa... ¿Comprendes?... yo hago lo que se me pega la maldita gana porque ni mi padre me ordena qué hacer, menos tú – él me miraba sin siquiera inmutarse.
- Entonces ve y encuentra algo que hacer... pero hasta que tu padre vuelva yo estoy a cargo, y no me importan tus berrinches de diva, yo soy profesional y una niñita no me da órdenes – sentenció volviendo a lo suyo.

Me quedé de una pieza, fue una buena jugada, lo acepto. Me volteé y tomé a Jimmy de un brazo para sacarlo de ahí. Fui directo al escritorio de Nicholas. Ya que no tenía dónde más sentarme.

- fuiste muy ruda con él – me reprochó Jimmy.
- No seas tonto Sullivan – le dije – él lo merece, es un gruñón –
- Esto me suena a amor – rió él.
- ¿Qué? ¿Cómo dices eso Sullivan? ¿Estás loco? – gruñí.
- Será una linda historia de amor – me dijo.
- No, ni loca, es un viejo desquiciado y mandón – dije muy alterada. Él movió la cabeza, negando.
- Acepta que te gusta – me dijo
- No –
- Te gusta –
- Que no –
- Ay Sami, vamos, ¿Cómo encuentras sus ojos? – preguntó.
- Son... verdes – me encogí de hombros.
- ¿Y su sonrisa? – preguntó JImmy.
- Tiene dientes... -
- Eres tan terca, te encanta Zachary, yo te conozco –
- No me conoces para nada entonces, no me gusta ese engreído y estúpido ogro – me quejé. Bueno, era un ogro lindo, pero un terco.
- ¿Qué vas a hacer entonces? – me preguntó
- ¿De qué hablas?
- No dejarás que sea un ogro contigo por siempre... tú lo provocas, ahora ve y discúlpate, te prometo que se disculpará también...- me animó mi amigo. Yo negué rotundamente.
- No me humillo – aseguré.

Mas tarde Jimmy se fue y me quedé haciendo los encargos de Zachary.
Era un gruñón muy malhumorado. Como pude pensar que era lindo si es un ogro.

Ya eran casi las ocho y estábamos solos él y yo. Más el guardia de turno, obvio.

- Ya me voy – le dije cortante.
- ¿Quieres que te lleve? – me preguntó. Me sorprendí, bien sabía que yo poseía un carro nuevo.
- ¿Qué no recuerdas que estoy acá para pagar mi AUTO? – le dije. Él sonrió.
- Pues tu AUTO, se lo llevó tu novio –
- ¿Qué? – me acerqué a la ventana. Y claro, no estaba ahí. – Estúpido Sullivan – gruñí.
- ¿Te llevo entonces? – repitió. Yo, resignada accedí. No tenía ganas de pagar un taxi.


Pero era obvio que mataría a Jimmy más tarde. ¿Por qué se llevó mi carro el genio ese?.
Es un aprovechador, yo siempre le doy de todo, lo invito a comer, lo llevo conmigo de vacaciones... lo dejo conducir mi carro y ¿Qué hace él?... secuestra a mi bebé...

Me subí al lujoso Jeep de Zachary en silencio. Admirando cada centímetro de los asientos de cuero negros.

- ¿Te gusta? – rió abrochando su cinturón. Me sonrojé por que me atrapó mirando su jeep como una tonta.
- Está... está lindo – dije casi inaudible. Él me miraba de una manera que me incomodaba mucho. Sentía su mirada clavada en mí. Y si no estoy loca, juraría que él estaba sonriendo al mirarme.


Nos quedamos callados hasta que llegó a mi casa. Él sabía dónde vivía yo... supongo, porque de lo cohibida que estaba con su mirada yo me dediqué a cerrar la boca.
- Gracias – articulé cuando se detuvo frente a mi gran casa. Él apagó el motor.
- No hay de qué... cuando quieras puedo traerte- me dijo con un tono muy amable. Lo miré algo ruborizada, él no dejaba de mirarme, me intimidaba mucho. Aunque debo admitir que eso lo hacía sexy.
- No, no... James ya no se llevará mi auto y no necesitaré que me traigas más... pero gracias de todos modos- me desabroché el cinturón y el pasó su mano por mi cabello. Me estremecí y lo miré rápidamente....
- Tenías... una hoja en el cabello – me dijo mostrándome la hojita verde musgo que sacó de mi pelo.
- Ah... bien, adiós Zachary, gracias- abrí la puerta.
- Dime Zacky – sugirió.
- Sí, Zacky... nos vemos mañana – le dije saliendo del auto. 



:D

Eres tu, Solo tu -Zacky V.- [Adaptacion]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora