Eres tu, Solo tu -Zacky V.- [Adaptacion]

Capitulo 4

  - Cuando termines, me dices y veré que otro trabajo darte – guiñó un ojo para retirarse.
- No te creas mucho el asunto de estar a cargo – le gruñí. Él se devolvió.
- Tu padre me puso a cargo, ahora no eres su hijita consentida Samantha, eres una más del personal – aclaró con seriedad. Era un irrespetuoso. Me puse roja de ira.
- Bien – dije entre dientes – eso lo veremos – seguí – cuando yo sea la dueña de todo esto –
- Falta tiempo para eso, ahora apresúrate – me dijo.

Tomé una gran bocanada de aire, iba a ser difícil.
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Estuve alrededor de media hora ordenando unos doscientos papeles de pedidos. Ya cansada me dirigí a Nicholas le entregué todo en una carpeta archivadora.
- Terminé – dije. Él abrió la carpeta. La analizó y luego me miró.
- Ve a la bodega y déjala en la sección de pedidos, esos son del mes pasado, el estante está vació, dice "Abril" – me entregó la carpeta. Yo resignada me di la vuelta y tomé el ascensor para bajar al segundo piso de las bodegas.

Era un lugar muy feo, estaba oscuro y lleno de pasillos con estantes. Había poca gente ahí, tomando carpetas, dejando cajas... dejé mi carpeta en su lugar y volví a las oficinas.
Mi padre iba saliendo de su oficina.
- Papá...- le dije...
- Zacky, encárgate, volveré en unas horas – se dirigió a Zachary, él asintió y a mi ni me miró. Pasó de largo como si yo no fuese su hija.

Me quedé ahí plantada y muy ofendida. Ni siquiera notó mi presencia.
- ¿Por qué esa cara?- me dijo Zachary. Lo fulminé con la mirada.
- No te incumbe – gruñí.
- Hey – me sostuvo del brazo sin dejarme ir. Sentí una corriente eléctrica... - lo siento, debe estar molesto con los de Golden, le quitaron un contrato millonario – me dijo. Yo asentí.. pero no era mi culpa que los de Golden le robaran algo. No era justo.
- No es mi culpa... no debería tratarme así – admití con una voz queda.
- Debe ser el estrés – se encogió de hombros – que no se te contagie, porque no es agradable trabajar así –
- Como sea – revoleé los ojos.
- ¿Quieres un café? - me preguntó con una sonrisa. Lo miré fijo. Tenía lindos ojos y tenía los dientes parejos y blancos... asentí casi muda. - ¿Capuccino? – asentí otra vez.

No me había detenido a mirarlo.
Él sonrió y salió de ahí en dirección al ascensor, yo me senté en la silla de papá. Zachary llegó unos diez minutos después mientras yo estaba muy cómoda viendo a mi banda favorita A7x en Youtube.

- Aquí está tu café – me dijo sentándose frente a mí. Lo recibí.
- Gracias – bebí un sorbo.
- No deberías ver vídeos mientras se supone que trabajas – rió. Yo sacudí la cabeza.
- Ya dije que yo mando acá cuando papá no está – gruñí.
- No, yo mando... ya lo oíste, terminas eso y tengo más trabajo para ti – guiñó un ojo.

Terminé mi café y salí en busca de Zachary. No sabía cuanto iba a soportar siendo su "asistente"
- ________ por acá – me dijo a lo lejos. Caminé hasta él.
- Dime –
- Necesito que lleves esto al piso de arriba, déjaselo a Russel – me pasó unas cuatro carpetas archivadoras gigantes. Casi me caigo del peso.
- Pesan mucho – me quejé. – ¿por qué no las llevas tú? –
- Tengo asistente... supongo que para eso estás acá – me gruñó. Yo revoleé los ojos frustrada.

Esa tarde Zachary me mandó a hacer miles de cosas, estaba exhausta. Ya a las ocho nos quedamos él, mi padre y yo. Todos habían ido a sus casas.
Yo estaba ordenando una de las salas de grabación. Cuando una mano se posó en mi hombro y me estremecí completamente. Me volteé era Zachary.

- Me asustaste – dije.
- Ya es hora de cerrar, tu padre se fue hace cinco minutos – aseguró.

Se había ido sin mi... me sentí muy decepcionada.

- ah... está bien – musité con un temblor en la voz.
- ¿Estás bien? – me preguntó. Yo asentí y salí de ahí.
- Hasta mañana – mascullé y me fui corriendo.

Me subí a mi carro. No podía creer que mi padre se había ido como si nada y me había dejado sola en el peor de mis días.
Llegué a casa y me encerré en mi cuarto. Mi padre parecía estar muy ocupado en su oficina en el piso de abajo.
Odiaba que no pudiera estar sin trabajar nunca que hasta en la casa tenía su rincón de trabajo.

El día siguiente me despertó mi nana, me dijo que papá había viajado en la madrugada a resolver algo importante y que no tuvo tiempo de despedirse.
No me sorprendía para nada, suele irse como si yo no existiera. Vuelve a los días después siempre muy contento.

Fui a la escuela. Las chicas me obligaron a contarles cada detalle de mi día de trabajo. Ambas estaban interrogándome cuando Jimmy llegó a mi rescate.
Almorcé con mi amigo. Él estaba contentísimo por que el viernes por la noche saldría con Voony.
- Es una maldita pervertida – reí mientras bebía de mi jugo de naranja.
- Oye, basta es muy sexy – se quejó. - ¿Cómo te fue con tu amigo Zakeri? – rió Jimmy
- Se llama Zachary – dije yo.
- Ah, eso quiere decir que aprendiste su nombre y que sí son amigos – se burló.
- No, claro que no... mi padre lo puso a cargo hasta que vuelva de su viaje y encima Zachary es como mi "jefe"... - bufé – me tiene agotada con todo que me hizo hacer ayer – gruñí. Jimmy se largó a reír.
- ¿Y qué te hizo hacer? – me molestó moviendo las cejas.
- No seas un mal pensado Sullivan – gruñí.
- Lo siento, pero tranquila, ya se llevarán mejor... quizás sin la presencia de tu padre Zachary se ponga más amable –
- No creo... será más odioso. ¿Me acompañas hoy al trabajo? - ,le supliqué
- ¿Acompañarte? – rió incrédulo.
- Por favor...-
- Está bien... ahora que no está tu padre será menos horrible entrar ahí.
- Gracias James te adoro – lo abracé.  

Jimmy lindo :)

 Esta aburrido pero ya se va a poner mas caliente la cosa(?