Eres tu, Solo tu -Zacky V.- [Adaptacion]

2/3 Capitulo 29

Estuve toda la noche muy distraída, por lo que Jimmy decidió que era hora de irnos. Él no dejaba de hablar sobre cómo debían ser las cosas entre Zachary y yo, dijo que estaba orgulloso de mí por comprender el problema de Zacky y que lo mejor era dejar que las cosas tomaran su propio curso.

El sábado me la pasé haciendo deberes. Mi padre me preguntó si volvería a trabajar y le dije que sí, que seguiría siendo la secretaria de Baker. Él se emocionó porque dice que a Zachary le encanta mi trabajo, que soy súper eficiente y que nos llevamos bien. Yo solo sonreí, era mejor omitir cualquier tipo de comentario.

El domingo a eso de las tres de la tarde, mientras veía televisión recibí un mensaje.

"¿Podemos vernos hoy? Es importante. - Zachary"

Miré ceñuda el mensaje. ¿Cómo sabía mi número?
Tardé unos minutos en responder porque me quedé bastante rato analizando todo. Sí, quería verlo. Pero estaba muy nerviosa.

"Bien, ¿dónde? ¿Y cómo conseguiste mi número? - Sam"

A los dos minutos respondió.

"En el rancho, quiero presentarte a alguien, y fue James quien me lo dio - Zachary"

Sonreí, era obvio a quién me presentaría. Comencé a arreglarme, algo cómodo era lo mejor.
Le respondí mientras cepillaba mi cabello.

"¿A qué hora?"

"A eso de las cinco..."

Salí camino al racho, iba algo nerviosa, porque no era correcto seguir viéndolo, pero me causaba curiosidad y nadie saldría dañado. O eso esperaba.
El portón de metal se abrió para dejarme entrar el carro. Conduje una vez más por aquel camino rodeado de árboles frondosos. Apagué el motor justo frente a la casa.
Suspiré.
Toqué la puerta...
Reí al comprobar que lo que me esperaba era un niño pequeño. Escuché pasitos apresurados hacia la puerta. Ésta se abrió esta atrás y bajé la vista. Ante mí, un niño rubio, extremadamente adorable y bastante confundido me miraba. Me puse en cuclillas.

- Hola - sonreí. Él ladeó la cabeza y miró a sus espaldas. zachary venía caminando en dirección a nosotros.
- Papá - apuntó a Zacky, yo reí.
- Llegaste - sonrió Zachary, me puse de pie.
- ¿Creíste que no vendría? - pregunté. Él negó con la cabeza y tomó en brazos a su hijo.
- Este es Joaco- el nene sonrió y me apuntó con la mano.
- Hola Joaco- sonreí. No sé por qué, pero empecé a sonreír mucho.
- Saluda a Sam, Joaquin, dale la mano -
- Es un gusto - tomé la manita del pequeño y la sacudí un poquito. Él balbuceó algo que sinceramente no comprendí y Zacky lo bajó - es adorable...
- Se parece a mí - se encogió de hombros.
- ¿Y quién ha dicho que tú eres adorable? - reí.
- Tú, lo piensas, lo sé - sonrió también.
- ¿Me invitarás a pasar o...?
- Oh, lo siento - dio unos pasos atrás y me dejó entrar. Todo estaba igual, a excepción del niño y la música - ¿Quieres algo de beber?
- ¿Piensas embriagarme otra vez? - reí sentándome en una de las sillas de la cocina.
- Hoy no - guiñó un ojo y me dio una lata de Coca-Cola - ¿por qué no vas a ver a Jey? - apuntó con la cabeza hacia los establos. Me sentí extraña, parecíamos... amigos.
- Claro - me puse de pie.
- Lleva a Joaquin- dijo mientras se apoyaba de brazos cruzados en la mesa.
- ¿Tramas algo?
- Solo quiero que lo conozcas... a Joaquin- se encogió de hombros - es importante para mí.
- Bien, iré por el niño - solté una risa y fui con Joaco.

Estaba jugando en la alfombra con unos autitos. Me senté a su lado para convencerlo de salir al patio.

- Joaco - él me miró al pronunciar su nombre.
- Sam - dijo a la perfección. Sonreí otra vez.
- ¿Quieres ir a ver los caballos? - pregunté.
- ¿Caballo? - ladeó la cabeza. Adorable.
- Sí, caballos, ¿Vamos afuera?
- Vamos - se puso de pie. Tomé su manita y salimos al patio trasero.