Eres tu, Solo tu -Zacky V.- [Adaptacion]

Capitulo 12

  Llegué a las tres de la madrugada a mi casa. Ni mi padre ni mi nana se dieron cuenta de mi llegada por lo que me dirigí a la cocina y me preparé un café bien cargado. No quería dormirme, tenía mucho en qué pensar.
En primer lugar, ya tenía bastante claras las intenciones de Zachary, y yo no era una niña estúpida como él quizá creía. Jimmy tenía razón, yo era la reina de la diversión y nadie me iba a quitar eso, menos un hombre (sexy y maduro) que cree saberlo todo y cree que me tendrá a sus pies. Pues se equivoca si es que eso es lo que piensa.

Con el café entre las manos me senté en mi cama y analicé lo sucedido después de irnos del parque.
Número uno:
Zachary acarició mi mejilla, luego tomó mi mano.
Número dos:
Me solté de su mano.
Número tres.
Me miró ceñudo y le planté un beso loco en la boca.
Número cuatro y última:
No le dije nada más y me fui.

Y así es como dejas a un hombre loco y pensando en ti por horas.

El sábado mi padre intentó por todos los medios hablar conmigo. Pero yo todavía estaba muy enojada como para dirigirle la palabra. Sé que él me da todo y se preocupa por mi seguridad. Pero poco le importa si no me gusta lo que hace o si lo extraño cuando se va. Porque es cierto lo extraño cuando se va; claramente él no ve eso y sigue creyendo luego de años de hacer lo mismo, que puede comprar mi compresión y mi cariño a través de ropa y cosas que aunque me gustan, no me llenan.

En la tarde Jimmy y yo nos fuimos a comer pizza al centro comercial. Obviamente él maneja el carro, porque cree que es poco varonil y vergonzoso que lo vean de copiloto.

- Veo que eres muy inteligente – rió Jimmy luego de mencionarle el plan que se me ocurrió a través de sus propias palabras – después de todo si escuchas lo que digo, te felicito –
- Verás Jimmy... me aburrí de tener miedo a las relaciones y eso, así que ahora voy divertirme un poco con Zachary, hubieras visto la cara que puso cuando lo besé y me fui sin decir nada – reí mientras nos sentábamos en una de las mesas de la pizzería. Sullivan movió la cabeza con una sonrisa en los labios.
- Eres malvada –
- No, solo soy... estratégica – me encogí de hombros y tomé el menú.
- No sé para qué lees la carta, si siempre pedimos lo mismo – me quitó el menú de las manos. Se acercó la mesera.
- Una familiar de queso triple y salchichón – dijimos al unísono. Nos miramos y reímos, la mesera anotó el pedido con una sonrisa.
- ¿Algo de beber?
- Un par de latas de Pepsi – pidió Jimmy.
- Ya vuelvo –
- ¿Y qué pasó anoche cuando nos fuimos de la fiesta? – le pregunté a Jimmy.
- Nada interesante –dijo relajado – Kim se besó con ese chico con el que conversaba, Val terminó borracha como siempre y bueno, yo las llevé a casa a ambas –
- Ellas son unas malagradecidas, siempre las llevas a casa y pagas el taxi, y ellas son muy malas contigo –
- Pues... no me importa que sean malas conmigo, un día de estos necesitaré un favor grande y les refregaré todas las veces que las he sacado de aprietos – sonrió – no podrán decir que no.
- Gran plan – dije.
- Ya ahora, dime qué es lo que piensas hacer con Zakeri – sonrió – con detalles, quiero estar al tanto de la situación...
- Pues... el lunes, mi papá va a volver a la oficina, entonces Zachary tendrá que volver a la suya y compartirla conmigo, voy a seducirlo, es todo, quiero saber cómo reacciona con mi padre en el edificio. Ya sabes, un par de besos locos, toqueteos, y ya... dejarlo pidiendo más – guiñé un ojo. Era más divertido así.
- Eres mala – rió él.
- ¿Mala? ¿Yo?... ¿Quién es el que arriesga diez años de cárcel por querer abusar de mi inocencia? – dije ofendida – él, no yo.
- ¿Inocencia? – rió Liam - ¿Tú? ¿Tú Samantha Jefferson? ¿Inocente?... – reía a carcajadas.
- Ríe lo que quieras Sullivan, yo no he llegado nunca tan lejos como tú – me crucé de brazos.
- Hey – me miró ofendido – eso no hay que mencionarlo.

Reí. Él tenía secretos que solo yo conocía. Y eso era que él no era virgen ni por si acaso. El año pasado había pasado por más chicas de las que había en la escuela, pero cuando se dio cuenta de que no era correcto era tarde porque ya había perdido dos cosa, la virginidad y la dignidad, entonces se salió de eso y llevaba tiempo si tener alguna noche loca.
Las únicas que nos salvamos del salvaje de Liam fuimos, Val, Kim y yo.

El lunes llegó más rápido de lo que me hubiese gustado y la escuela fue más corta de lo que pensé. Nunca creí que me quejaría de que nos acortaran la última hora de la clase de lenguas, pero recordé que tenía un plan y eso me puso nerviosa.

- ¿Dónde quedó la Sami que quería divertirse un poco con Zacky? – se burló Jimmy mientras caminábamos a mi coche.
- Se quedó escondida bajo la cama esta mañana – resoplé. Él me empujó al auto y me quitó las llaves de la mano para conducir.
- Súbase señorita, la llevaré a su trabajo y luego secuestraré su auto para salir con Voony - sonrió de oreja a oreja. Me subí al carro con pocas ganas pero sonriendo. Las cosas entre Jimmy y Voony avanzaban muy bien y eso era increíble.
- No sé si lo logre James - hice una mueca mientras el viento arremolinaba mi cabello en la costanera.
- Solo hazlo – dijo sin despejar su vista de enfrente. Paramos en un semáforo – eres Samantha Jefferson, lo dejaste con la boca abierta el viernes por la noche, puedes hacer lo mismo ahora...
- Mi padre no estaba presente el viernes – objeté. Él soltó una risa.
- Y no estará presente en la oficina de Zachary –
- Tienes razón
- Además mírate, parece que te vestiste de secretaria sexy – rió.

Me dejó fuera del edificio y saludé a Voony que iba saliendo a su cita con Sullivan mientras la relevaban en el escritorio. Subí hasta el quinceavo piso, intentando serenarme.   

Sam es toda una loquilla