Capítulo 49: Vergüenza Olímpica

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PoV Narrador Omnipresente

Hades nunca se imagino lo que se iba a encontrar al abrir la puerta.
No podía creer lo que veía.
La escena era simplemente incómoda
Su hijo, sin camiseta, encima de la chica rodeandola con sus brazos.
Ella, sin su camiseta de igual manera.
Gracias a el mismo que la chica traia..
¿Cómo se le llama a esa cosa que usan las mortales en los senos?
¿Pechera?
Pff
Como sea
No importa.
Ambos se besaban en la boca tan desesperadamente que incluso creía poder distinguir sus gargantas
Hades ladeo la cabeza
¿Eso se podía?
Hades no sabía como reaccionar
Si enojarse y gritar como desquisiado o simplemente darse la vuelta y salir de ahí.
Optó por ambas

Su primera reacción al entrar y verlos fue algo parecido a esto.

Soltó un chillido ahogado tan agudo y profundo que se pudo escuchar en todo el inframundo

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Soltó un chillido ahogado tan agudo y profundo que se pudo escuchar en todo el inframundo.
Comparado con los chillidos que hace la mismisima Afrodita cuando se emociona, el que hizo Hades los superó por completo.
De inmediato, Hades se tapo los ojos con la palma de su mano.
-¡Aaaaaa!
¡No vi nada!
¡Me voy!-
Dijo el señor del inframundo.
Torpemente se dio media vuelta pero como tenía los ojos tapados y no veía nada, se golpeó fuertemente con el marco de la puerta en la cabeza
Ese golpe fue tan fuerte que seguramente dejaría marca.
-¡Aggg!
¡¡¿Quien puso esta cosa del demonio aquí?!!-
Pregunto enojado, irritado, y frustrado.
Seguido de esto, Hades tomó el camino correcto que dirigía a la puerta para salir de la habitacion de su hijo.
Cerró la puerta tras el quedando confundido traumado y adolorido. Por el mismo...
¿Pero que demonios acababa de pasar?
.......

El chillido de Hades hizo que Luna se sobresaltara al oír tal cosa.
Por un momento pensó que la diosa del amor estaba ahí viéndolos en pleno momento íntimo pero a quien vio fue mucho peor
Hubiera preferido mil veces a la diosa del amor.
Al voltear la cara y ver a Hades ahi parado Luna perdió el color de toda su piel.
Se veía tan palida y blanca como un fantasma.
Sintió pavor
Nervios
Vergüenza
Dio gracias a los dioses por que Hades se tapó los ojos y se dio la vuelta aunque no pudo reprimir una risa al ver el golpazo que se dio y al oír sus quejidos de dolor.
Al salir Hades de la habitacion, ella volteó a ver a Nico quien tenía su frente recargada en el hombro de ella con un gesto en su rostro que sólo reflejaba frustración.
Lo comprendía.
No podía creer esto.
Por su cabeza rondaron miles de probabilidades.
Todas negativas
Y todas con el señor del inframundo hecho una furia.
Seguramente los odiaria despues de lo que vio
Seguramente ya no pasaría más tiempo ahí.
En su mente no podía caber otro pensamiento que no fueran esos.
Estaban muertos
.......

Nico no podía creer la mala suerte que tenía.
Siempre era lo mismo.
Interrumpirlo en sus momentos íntimos.
A no
Pero esto no se iba a quedar así.
En cuanto tuviera la oportunidad, la aprovecharia para terminar lo que ya había comenzado.
En cuanto su padre entró a su habitación, nunca lo miro ni le dio bastante importancia.
Su simple reacción fue dejar de besar a Luna y colocar su frente en el hombro de la chica.
No pudiendo creer lo que acababa de pasar.
Y odiando a su padre por no tocar la puerta
En serio
¡¿Que mierda le costaba al señor del inframundo tener un poco de modales y tocar la maldita puerta antes de entrar?!
¡Son modales carajo!
¡Hasta un dios debe de saber de ellos!
Hizo gestos de desagrado
Nico no estaba enojado
No
Estaba furioso
Pudo sentir que Luna estaba nerviosa y asustada.
No le gusta sentirla así.
Y no tenía por que estarlo.
No es tan grave
¿O si?
No quiso pensar en nada mas
Estaba bastante ocupado maldiciendose interiormente a sí mismo y a todo cuanto le rodea que le causan todas esas desgracias.
"El destino no puede ser tan cruel con una persona."
Decían muchos.
Corrección
Si puede
Y puede ser bastante cruel con el hijo de Hades.
Estaba empezando a pensar que esto era algo personal.
Que cualquier cosa que regía este universo conspiraba contra el.
Ya eran demaciadaciadas coincidencias como para ser sólo casualidad o mala suerte.
Pero que importa ya
¿Que más daba?
Al fin y al cabo ya estaba acostumbrado de que las cosas no le salieran como el quería
Al menos la mayoría de las veces así era.
En cuanto a su padre...
Ya se le hacía demaciado extraño que aun no hubiera armado un escándalo
Conociendolo, habría causado un  terremoto de 7.5 de intensidad.
O tal vez ya estaría desquitando su ira ante
O incluso estaria gritandole regañandolo y a punto de desintegrarlo, ya que Nico no se dejaría insultar tan fácilmente ni por su padre ni por nadie.
Puede ser que en eso sea lo único en lo que se parecía a su padre según el.
Ambos son sumamente temperamentales y si los provocan pueden llegar a causar grandes problemas que terminarían con alguien muerto.
Le sorprendió bastante que aun no pasara nada de eso. 
En cierta parte, Nico se alegro y se sintió aliviado.
Por lo visto, esta situación ya no podía empeorar.
Nunca debió pensar eso.
Pasaron unos 10 segundos de silencio cuando...
-¡¡NICO DI ANGELO TE QUIERO EN LA SALA DEL TRONO PERO YA!!-
Gritó su padre desde a fuera de su habitación.
Las paredes y el suelo empezaron a moverse de un lado a otro por un momento.
Después el movimiento seso.
Hades sonaba furioso.
Genial
Por lo visto si se podía poner peor.
Nico rodó los ojos arto de esta situación y de su mala racha.
-Esto no puede ser posible. -
Se quejó.
Vovio la vista hacia Luna y lo que vio realmente le preocupo.
Ella estaba pálida
Literalmente Blanca
Todo su tono rosado de piel se había desaparecido.
Estaba temblando,
Sus ojos estaban brillosos y  reflejaban pánico.
-Y...  Y ahora...
¿Q...  que haremos?-
Logró preguntar ella.
-Ir con el.
Pero antes..-
Nico se levantó de su cama dirijiendose al rincón de su cuarto.
Ahí había una pequeña mochila.
De ahí, sacó un paquete con Ambrosia.
Luna estaba mal y en verdad le preocupaba su estado y que se fuera a poner peor.
Regresó con ella y le tendió la ambrosia
Ella la tomó al instante.
Tras tres bocados, su piel comenzó a retomar su color normal.
Se veía más calmada.
Luna le dedico una mirada preocupada a Nico.
-Ay no..
Nico...
Yo...
Lo lamento..
No debí..
Nunca debí...-
Nico la calló con un tierno beso.
Se lo dio para tratar de tranquilizadora y también lo hizo para que el se tranquilizara.
-Es mi culpa.
Yo utilicé el viaje sombra.
No le puse seguro a la puerta.
Soy un imbécil.-
Dijo el hijo de Hades bajando la cabeza.
No lo hizo intencionalmente, pero al hacerlo, tuvo una vista perfecta de los hermosos senos de su amada.
Es una lástima que su padre los haya interrumpido justo antes de poder quitarle ese incómodo pero lindo sujetador.
Pero no.
No es tiempo de pensar en eso ahora y menos con lo que acaba de pasar.
Eso sería después.
Luna tomó la barbilla de Nico haciéndolo que volteara a verla a los ojos.
-No.
No lo eres
Nos descuidados y ahora hay que afrontar a tu padre.-
Dijo ella.
-No te preocupes.
Primero muerto a permitir que te haga algo.-
Luna le sonrió tiernamente a su Nico.
En verdad que lo ama.
Y Nico la ama con locura y devoción.
Pase lo que pase, el la protegeria de la furia de su padre y no permitiria que Hades le recriminara cualquier cosa a ella.
Ambos jóvenes se vistieron y al quedar presentables, salieron de la habitacion de Nico para dirigirse a la sala del trono y enfrentar aquello que les deparará y si es el caso, asumir las consecuencias.
.......

Un Amor Poco Común (Nico Di Angelo) Completa.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora