Un Amor Poco Común (Nico Di Angelo) Completa.

Extra 6: Solsticio de Primavera.

PoV Narrador Omnipresente

....8 meses después....

El aire era frío y el ambiente gélido tal y como el mes de diciembre lo exigía.
Solo era cuestión de horas para que el solsticio de invierno llegará.
La nieve comenzaba a pintar de blanco las calles y en el pequeño departamento, dos jóvenes empacaban para tomar rumbos diferentes.
Uno se iría esa misma noche, el otro en dos días.

-¿En verdad tienes que irte?-
Pregunto el con esperanza a escuchar una negativa.
-Ya te lo dije.
No puedo desaprovechar esta oportunidad.
Sólo serán unas semanas.-
Respondió ella mientras empacaba ropa interior.
El exhalo.

-Y eso incluye no poder ir al inframundo juntos.-
-Lo se... pero tienes ese pacto con tu padre
No puedes romperlo.-
-Ya se.
Maldigo el momento en que me comi esa granada.-
-Te salvó la vida.-
-A cambio de esto..
Y tu no puedes cancelarle a tu padre ¿Verdad?-
-No..
Lo planeamos por meses y será crucial para mi carrera.-

El silencio se hizo presente entre ambos.
Nico se aclaró la garganta y miro a Luna mientras ella seguía empacando.

-Dos semanas en Rusia
Podrán pasar muchas cosas.-
-Más que me de una hipotermia por el frío no creo.-
-No me refiero a eso y lo sabes.-
-¿Estas celoso?-
-Hay personas atractivas aya.-
-Y yo soy una mujer casada con el amor de mi vida.
Iré con mi padre y no tengo ni la más mínima intención de coquetear con los rusos.-
-Ya se pero ellos..-
-Yo se cuidarme y defenderme.
Si alguien me falta al respeto ten por seguro que le harán falta dientes.-

Ese comentario provocó en ambos risas lo que ayudó a aliviar el momento tan tenzo.
Luna sonreía y Nico estaba más que satisfecho de verla sonreir.
Ambos se sentían nostálgicos.
No pasarían las fiestas juntos ni se verían en varios meses.
El hijo de Hades se acercó a su esposa sorprendiendola al abrazarla por la espalda y rodeando su pequeña cintura con sus brazos.
Luna se sentía segura y protegida cuando Nico hacia eso.
Además, lo necesitaba.
Estaría un largo tiempo sin ese contacto.
Luna suspiro pesadamente antes de hablar.

-¿Entonces tres meses no?-
-Si... tres meses.-
-Dile a Persefone que me disculpe por esta ocasión.
Y si es necesario explicale las razones.-
-No se si me crea.-
-Lo hará. Te lo aseguro.-

Pasaron unos minutos en silencio en los cuales lo único que hacían era mirarse.
El sonido de las campanas del reloj indicando las 7:00 pm los interrumpieron.
Nico apretó aun más fuerte la cintura de su esposa dándole a entender que no quería separarse de ella.

-Ya me tengo que ir.-
Declaró el rey de los fantasmas.
Luna apretó los labios y asintió levemente.
Le dolía dejarlo pero era realmente necesario.
Ella se volteo rápidamente para abrazarlo y esconder su cara en el cuello de Nico.

-Te voy a extralar mucho.-
Le susurró al oído con voz quebrada.
-Yo aun más.-
Le contestó.

Ambos se miraron por una última vez y como imanes no pidieron evitar que sus labios se atrajeran y chocaran provocando una explosión de sentimientos y emociones.
Se rozaban en gran frenesí y desesperación, no queriendo separarse el uno del otro.
Juntaron sus frentes y mezclaron sus respiraciones.

-Cuando vuelva no te salvaras de mi lujuria.-
Declaró el mientras apretaba el cuerpo de ella contra el suyo.
Luna se sonrojo y río.
-Lo se y no me molesta.
Pero no creas que eres el único con deseos salvajes.
Te tendré preparado algo muy especial.-
-Estoy ansioso por probarlo.-

Los labios de Nico atacaron sin piedad el hombro desnudo de su esposa besandolo, mordiendo y succionandolo dejandole en claro que quería poseerla con desesperación
Luna reprimia quejidos de dolor y placer mezclados.
Nico se separó y observó con orgullo la gran marca que había dejando.
Ahora estaba rojo pero pronto se pondría morado y estaría hinchado