Aventurera (Ponny)

Capitulo 1.

Suspiro apenas puso un pie en tierra mexicana, miro hacia los lados sonriendo, tanto tiempo sin estar en casa. Avanzo hasta la zona de equipaje para tomar su bolso, miro su telefono, habia llegado antes de lo acordado.

Ya con todo listo y un cafe en su mano se dirigio a tomar un taxi que la dejara en su departamento. Esta vez el viaje habia sido provechoso, bastante divertido, tuvo tiempo de pensar y reflexionar, debia volver a ese lugar junto con Dulce, sin dudas.

Todo fue perfecto, excepto el pequeño detalle de aquel hombre de cabello azabache y ojos verdes avellanas, su sonrisa cínica, su aire de arrogancia, su cuerpo de... Basta. Era mejor dejar los pensamientos, antes de que fueran por caminos que no eran.

El taxi estaciono frente a su hogar, y luego de pagar y sacar su maleta fue hacia la recepción a buscar su correspondencia, despues de tres meses fuera, era bastante lo que se perdio, aunque no muy importante.

Subio hacia el piso 9 y fue hacia su puerta, al abrirla silenciosamente se escuchaba la musica fuerte por todo el departamente, sonrio y dejo sus maletas en la puerta y fue sigilosamente hacia su habitacion, en el camino vio un destello pelirrojo que bailaba en la cocina, contuvo las ganas de reirse y fue a cambiarse.

En la cocina la pelirroja se asusto al escuchar ruidos en las habitaciones, dejo lo que estaba haciendo, apago la cocina y tomo una cuchara. Fue caminando lentamente hacia la sala alzando su "arma" cuando vio una maleta en la puerta, confundida bajo la cuchara y al acercarse mas reconocio la maleta, estaba a punto de girarse cuando siente un peso en la espalda y un grito.

-Dul!- grita la rubia mientras la abraza por la espalda y la pelirroja grita emocionada y se gira a abrazar a su amiga.

-Cuando llegaste maldita, no me avisaste, se supone que llegabas en tres horas- dijo ella aun abrazandola. Se separaron y Ani le quito importancia con la mano.

-Necesitaba llegar y descansar- dijo la rubia suspirando exageradamente y su amiga rio.

-Bienvenida Barbie- le dijo y ella le guiño un ojo.

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Se acomodó la corbata y volvio a mirar bastante molesto su reloj, puede que su vuelo haya llegado antes pero aviso hace 10 minutos para que lo vinieran a recoger.

El viaje estuvo pesimo, tuvo varios problemas con los inversionistas y con su capital, pero afortunadamente se habia encargado de eso y volvia a su controlada y meticulosa normalidad. Lejos de la locura...

Locura, como aquel demonio vestido de angel que habia encontrado en su viaje, no podia aun sacarse de la cabeza esos ojos azules que irradiaban vida, su cabello rubio al viento, su mirada fuerte y decidida y su cuerpo... lo segundo mas atractivo de ella, luego de sus ojos. Decidio frenar sus pensamientos antes de que le causaran problemas.

Tuvo que esperar unos diez minutos mas para que su chofer llegara disculpandose, tomo su actitud seria y lo aparto subiendo a su auto. Su cuerpo le pedia un descanso, y decidió darle ese pequeño gusto y dirigirse a su departamento en el centro de la ciudad.

En el camino reviso su correo, las acciones de la empresa y varias llamadas que habia perdido por culpa del viaje, con un suspiro de frustración vio varias llamadas perdidas de Ucker, las ignoro y bajo del auto ya aparcado para ir directamente a su hogar, si se podia llamar asi. Subio al ultimo piso del edificio y entro en su casa, fue directo a su habitación llevando consigo su maleta, la dejo a un lado y se acomodo en su cama. Solo cinco minutos, pensó.

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-Como has estado, informame- dijo Ani mientras tomaba un bocado de la carne que habia preparado Dul, la pelirroja suspiro y sonrio triste.

-Bueno, tu mamá llaamo como tres veces- la rubia hizo una mueca- Tu padre tambien- dijo y ella asintio- Termine con Ucker- susurro, la rubia dejo de comer y la miro.

-Ahora que hizo ese idiota?- pregunto enojada, cualquiera diria que era bipolar, pero no le gustaba ver a su hermana triste y mucho menos por alguien.

-Lo mismo de siempre- dijo y la mirada azul de su amiga se suavizo- Solo que ahora no quiero aguantar, ya me canse- dijo encogiendose de hombros.

-No te preocupes Dul, yo lo resuelvo- dijo la rubia con algo de maldad y la pelirroja nego con la cabeza.

-Dejalo, lo mejor es olvidarlo y seguir- la rubia asintio pero solo por apariencia, sabia que Ucker no era malo, pero ese mundo si lo era, un mundo del que trataba de escapar y que al parecer la perseguia.

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Unos golpes en la puerta lo despertaron, alejo el sueño dee su cara y se dirigió hacia la entrada refunfuñando. Quien molestaria a esta hora un sabado?.

-Hasta que al fin abres, bienvenido Alfonso- dijo Ucker mostrando una botella mientras sonreia, él trato de no rodar los ojos, como siempre Christopher Con su buen humor.

-Como estas Christopher, no avisaste que vendrias- dijo con su tono serio y decidido de oficina, el castaño lee dio una palmada en el hombro y paso al departamento directamente a la cocina.

-Oh vamos Alfonso, acabas de llegar, no tenias nada en la agenda- dijo con algo de burla, sin mas remedio tuvo que seguir al castaño. Se sento en uno de los taburetes de la isla de la cocina y Ucker le sirvio una copa.

-Como te fue?- le pregunto este mientras bebia, Alfonso hizo amago de sonreir y un esfuerzo para ocultarlo.

-Lo mismo de siempre, algunos problemas con los inversores, pero ya todo solucionado- movio su mano restandole importancia, y Ucker sonrio.

-Ninguna mujer- dijo alzando las cejas sugestivamente y Alfonso Fruncio el ceño aal recordar a la rubia, contraido por ese pensamiento nego rapidamente- A veces es mejor asi- dijo suspirando pesadamente recordando a la pelirroja, Alfonso Lo vio y con una mueca trato de recordar si el Castaño tenia novia, de tanto que hablaba no podia recordarlo.

-Paso algo con...- el pelinegro hizo un esfuerzo- Dulce- dijo mas a modo de pregunta y Ucker asintió, Alfonso Suspiro por lo bajo aliviado.

-Como que ahora si me termino- dijo con tristeza en su voz y en su mirada, Alfonso Trato de decir algo reconfortante pero no lo logro.

-Bueno asi te olvidas de una vez de esa estupidez del amor y eso- dijo restandole importancia, Ucker lo vio y nego con la cabeza sonriendo algo triste. Asi era él, no hay nada que hacer.

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Ya en su habitación Anahi se dedico a observar las fotos que habia hecho de su viaje, sonrio, ahora si estaba viviendo lo que soñaba. Conocer, explorar, divertise, soñar, amar... bueno lo ultimo no tanto pero por ahora se divertia bastante.

Su vida habia cambiado tanto desde que decidio no dejar que su madre la influenciara mas, de tomar las riendas de su vida o mas bien, de apartarse de esa vida. Miro el reloj de su mesita, la hora ya pasaba las 11, junto a el, una fotografía de ella y Dulce.

Ella la habia apoyado, y a pesar de que por ella era que empezó la pelea entre su familia, daba gracias de haber entrado en razon y seguir adelante junto a ella, ya no era solo una amiga, era su hermana. Tambien conservaba una foto de sus padres que permanecia guardada, excepto una fotografía tambien enmarcada de su papá y otra de ella era lo que adornaba su mesita. Por ultimo miro el marco sin ocupara aún.

"Para ese alguien" habia dicho Christian, el hermano de Dul, cuando se lo habia regalado y aun seguia vacio, de eso ya 6 años, se rio por su repentino pensamiento de añoranza y trato de caer en brazos de Morfeo con la imagen de unos ojos verdes avellana observandola.

N/a

Y llegue, holis. Esta historia se me ocurrio hace tiempo pero queria ya tener pensada bien la idea. Es Ponny pero tambien aparecen los demas no se preocupen que el Drama es mi fuerte.

Obviamente primero tratare de actualizar Dos mitades y luego esta, asi que plis un poquito de paciencia. Espero que les guste:3