Ghost Hunt #WOWAwards

capitulo 57

AL FINNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNNN LUEGO DE TANTA ESPERA Y TANTO BLOQUEO MENTAL PARECE EL CAPITULO 57, SEÑORAS Y SEÑORES CON USTEDES ... AY YA QUE LES DEJO EL CAPITULO DISFRUTEN, COMENTEN POR FAVOR 

Capitulo 57

EN EL PASADO.

-hija- grita la madre –Hija el almuerzo ya está listo ¿Dónde estas?-

-ya voy- grita la niña de cuatro años desde su habitación.

La madre preocupada sube en busca de su hija, encontrándola en su habitación rodeada de peluches, hojas y crayones. Sentada en el medio de la habitación dibujando dándole la espalda a la puerta

-Santo Dios- exclamo la madre –Mai Taniyama espero que tengas una buena explicación sobre esto- pero la niña no le contesta estaba totalmente concentrada en sus dibujos -¿que haces?- la mujer se acerca y por el encima del hombro espía la obra de arte de la niña.

-Hey no espíes- la madre hizo caso quedándose atrás de ella observando como la niña sin cambiar la dirección de su mirada tomaba crayones y descartaba otros sin ver donde estos caían. Esta demasiado concentrada y la madre temía por la salud de su hija, ella nunca se concentraba de esa manera, es mas ni ella lo hacía. Los niños tocados nunca lo hacen, a ellos les sale natural hacer las cosas, razón que estaba preocupada, si un niño tocado se concentraba es que algo había. Ella lo sabia, le había pasado y como resultado sus padres habían muerto.

Era irónico, pensarlo. La secta donde se crio la trataba como una princesa, cuando en realidad ella no lo era, era un monstruo. Ella y toda su familia, no había nada que no la diferensiase de los Wendigos, Banshee, demonios de la noche, Hadas, Duendes. Nada había algo que los relacionaba a todos que todos tenían algo sobrenatural en ellos. en el mundo normal ellos eran los anormales.

-he Mai me enseñarías lo que tienes ahí- dijo mirando los demás dibujos que había en el suelo. La niña solo usaba un color el cual se repetía una y otra vez. El rojo.

-a eta- dijo la pequeña levantándose tomando el dibujo y volteándose hacia su mama con un sonrisa dibujada de oreja a oreja y el papel sobre el pecho sostenido con ambas manos.

La madre observa el papel. En la parte superior había demasiado celeste, a un costado en la parte de arriba de la hoja mas precisamente a la derecha se encontraba un gran círculo amarillo, a lo que ella comprendió de que era el cielo y el sol. en la parte inferior el verde, simulando el pasto. En el centro del dibujo tres formas acompañadas de un gran garabato rosado, un garabato que ella conocía muy bien ya que a esa edad también lo dibujaba de esa manera. El símbolo de su familia, la flor rosada, una flor de cinco pétalos rosada, esa era la insignia de su familia. Algo que si recordaba con exactitud el primer emperador le había otorgado a su familia hasta el gran monarca y el primero en esa tierra los respetaba. No, no los respetaba les temía.

-Qué bonito hija ¿Quiénes son ellos?- pregunta la mujer concentrando la mirada en los tres dibujos en el medio de la hoja, los cuales eran pequeños trazos asemejándose a personas. Uno completamente vestido de negro, otro con colores y otro sonriente

-on is amigos y yo- dice la niña sonriente -on hemano-

-¿y por que ese viste de negro?- señala la madre

-e gusta- se encoje de hombros –on iguales- eso fue lo que hizo que la madre se tensara. Su hija había dibujado a los gemelos.

-Mai ¿los conoces?- le pregunta pero la niña niega con la cabeza

-papi quere e o onozca-

-¿te hablo de ellos?- la niña vuelve a negar con la cabeza

- vamos a comer y luego arreglamos este desastre- la niña asiente, deja caer el papel al suelo y abraza a su madre.