Fierce Obsession

Capitulo 34

Maratón 1/3

Comenten!

Amy

Mi cuerpo estaba rígido, junto al de ella. Mis brazos caían a cada lado mío, y mis ojos estaban puestos en ella, en la persona a la cual creía era mi familia, la hermana que siempre quise tener, mi persona a seguir, la persona que me arruino la vida.

- Amy, Amy, estas aquí, no sabes todo lo que te has perdido, tengo tanto que contarte. Dijo mientras se retiraba, quedando frente a mí. - Amiga, tenemos que empezar ya con los preparativos de ...

Plafl, se sintió en toda la habitación seguido por un silencio que inundo todo, sentía la palma de mi mano picar pero no le preste ni la las mínima atención, solo tenía la mirada fija en ella, quien estaba tan solo a unos centímetros de mí.

Veía como Angélica tenía su mano puesta en su mejilla cubriendo lo que a pocos minutos se iba volviendo color rojo, veía como su mirada estaba puesta en mí, con sus ojos recorriéndome como si yo no fuera la persona que esperaba.

Pero que era lo que estaba pensando, que después de saber todo lo que sufrí en este lugar, todo lo que viví, lo quería de nuevo como mi amiga, después de enterarme que nunca podre tener una familia porque ya tengo a mi pareja destinada.

Ella es la persona que no me ayudo cuando más lo necesitaba, quien era mi mejor amiga.

- Amy... Susurro mirándole con sus ojos fuera de órbita.

- Eres una hipócrita Angélica, vienes aquí creyéndote la buena amiga, después de todo lo que viví en este maldito lugar, me obligas a volver aquí, después de todas las humillaciones que pase, que es lo que te pasa por tu cabeza, dime! Le dije lo suficientemente fuerte como para que entendiera cada palabra que salió de mis labios.

- Yo...

- Lárgate! Vete de aquí Angélica, no quiero ver tu cara! Le grite después de ver como sus lágrimas caían, haciéndose la víctima frente a mí, cuando ella nunca sufrió ni vivió todo lo que yo viví con Ethan.

Veía como sus ojos se llenaban cada vez mas de lágrimas, como se intentaba secar con sus manos, sin tener ningún éxito, pero eso no hizo que nada cambiara, vi cómo me miro por última vez para después emprender un lento paso hasta la puerta y salir de la habitación.

Nose que fue lo que sentí cundo salió, porque no sentí nada, ni lastima, ni tristeza, ni anda que se le compare, nose si es porque no lo merece, o porque ya después de todo lo triste que viví nada más me puede llegar a causar más daño.

************************************************************************

Toc, Toc, Toc

Se sintió en toda la habitación, veía como el sol se estaba ocultando en el fondo del horizonte, mañana, solo mañana, unas cuantas horas más y estaremos cara a cara. Sin prestarle demasiada atención seguí con mi vista en esa ventana.

- Adelante. Dije.

Sentí como abrían la puerta lentamente, como unos pasos se asomaban hasta quedar a fácilmente dos metros de mí, sin tener que girarme para mirar quien era solo moví a la izquierda mi cabeza y pude ver a Alexander a atreves del espejo que había en una esquina de la habitación.

Presentí que tenía su mirada puesta en mi nuca y después de unos segundos hablo.

- Supongo que ninguna de tus visitas fueron de tu agrado, no? Pregunto para luego recorrer mirando si ningún interés toda la habitación.

- No es muy agradable volver a ver a alguien que te ha traicionado por la espalda, no crees? Le dije viendo cada movimiento que hacía.

- No lose, no fue a mí a quien le traicionaron Amy, aunque también se porque lo hiso. Me respondió aun sin mirarme.

- Nada justifica el hecho de que me allá engañado y que ni siquiera se halla preocupado en sacarme de ese lugar para que yo deje de sufrir. Le respondí rápidamente mientras me dirigía al tocador con espejo que daba directamente a él.

- No te han dicho que separar a una pareja destina puede causar la muerte de uno de los dos? Y si eso pasara el otro también seguiría el mismo destino. Dijo mirándome curioso.

- Y si es así, como fue que estuve una año separa de Ethan y nada ha pasado? Dije mirándolo desafiantemente.

- Porque muy en tu interior sabias que volverías a ver a Ethan y él siempre supo que volverías, de ambas partes había un deseo de volverse a ver entonces no pasó nada grave, aunque Ethan se ha debilitado visiblemente en este año. Termino diciendo soltando un suspiro.

- Como tú dijiste nada grave paso. Susurre mirando al espejo viéndolo a él.

- Nada te salvara de tu destino, Amy. Dijo mirándome fijamente a través del espejo.

- Que destino Alexander, el de estar con un hombre al que no quiero, o el que me esté humillando cada momento que se le antoje. Dije ya harta de la estúpida conversación.

- Sabes ayer hable con Ethan, dijo que él te dejara libre para que hagas lo que quieras, sin tener que preocuparte por nada que tenga que ver con su manada, pero él quiere algo a cambio. Dijo mientras daba varios pasos hasta estar a un centímetro de mi espalda.

- Que quiere? Susurre sin darme vuelta mirándolo por el espejo.

- Un heredero, el cachorro que siempre quiso tener, el futuro Alpha de su manada. Me susurro en el oído mientras posaba sus dos manos en mi vientre plano.

- Nunca le daría una cosa así. Dije revolviéndome de sus brazos.

- Y que harás Amy, porque dudo mucho que después de esto Ethan te deje ir. Dijo mientras retiraba sus brazos pero no su mirada.

- No lose, pero yo volveré a casa. Susurre.

- Con esto dudo mucho que lo logres. Dijo mientras alargaba su brazo y tomaba aquella cajita con el anillo dentro, que estaba arriba del tocador.

- Porque? Susurre mirando como la abría y dejaba a plena vista el hermoso anillo.

- Sabes este anillo estuvo durante mileños en la familia de Ethan y que yo recuerde desde que tu apareciste en la manada de Ethan, Estela su madre no lo ha vuelto a llevar en su mano y si él te lo dio por algo será, no crees?. Dijo mientras me miraba fijamente.

Sin tener nada que responderle solo seguí con mi mirada fija en el anillo que él tenía en sus manos.

- Antes de que me olvide, dijo Ethan que debes llevar el anillo puesto mañana. Dijo para luego dejar un castro beso en mi mejilla e irse por donde vino.

Yo volveré.

Volveré a mi vida.

Volveré.