Fierce Obsession

-Fierce Obsession: Capitulo extra 3-

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Dos años después...

Amy

- Amy.- Di un asentimiento ante el saludo de Erick, observe su gran cuerpo desaparecer al doblar en el pasillo.

Volqué mí mirada a mi reciente y nuevo prometido, su cabello brillaba por su reciente lavado, sus ojos grises me observaban con curiosidad, puede que tal vez nunca me canse de observar a Ethan.

- Iré a bañarme.- Anuncie mientras me acercaba a su escritorio, hasta quedar frente a frente.- Mira a los niños.

- Decirme eso es como proponerme ir a bañarme contigo.- Reí ante su sarcasmo.- Deja que llame a Romina y vemos que hacemos.

- Que sea tu día libre, no significa que debas aprovechar mi cuerpo cada vez que puedas.- Recordé la mañana.- Solo aceptare porque hoy estoy generosa.

- Pues cariño, has que esa generosidad tuya dure todo el día.- Rio tomando su celular.

[...]

Gemí mientras apoyaba mis manos a la altura de mi cabeza contra las baldosas blanca del baño, los besos y lenguazos de Ethan lentamente iban recorriendo toda mi espalda, hombros y cadera.

Me sentía tan húmeda y caliente, pero sabía perfectamente que eso no era por el agua tibia que caía. Mi cuerpo un poco mas no salto de emoción cuando sentí como Ethan se posaba detrás de mí y tomaba mis muslos.

- Estoy planteándome seriamente esto de tener otro hijo.- Su gruñido me hizo estremecer.- Ya ha pasado tiempo.

- ¡No jodas Ethan! – Chille sintiendo como sus manos se movían y sus dedos iban acariciándome lentamente.- No es momento para eso.- Gruñí.

- ¿Y para que es momento? Jadee al instante que terminó su pregunta, justo en el momento que unos de sus dedos entro por completo en mí.

J-O-D-E-R

[...]

- ¡¡MAAA!! El grito de Ayten me hizo mirarla rápidamente, hice una mueca al ver cubierta una de sus mejillas con chocolate.

A mi hija no le gusta para nada estar sucia.

- ¿Qué sucedió cariño? Murmure con una sonrisa mientras tomaba un paño húmedo y me acercaba a limpiarla.

- ¡Aden! Exclamo como si fuera lo más evidente del mundo.

- Creo que será mejor que le digamos a papi que regañe un poquito a tu hermano.- Mordí mi labio viendo como parte de su camisa se había manchado.