Mr.Bowman

10. Fiesta de Miranda

Así transcurrió mi semana, pensando en quien será el "anónimo". Ximena cumplió con su promesa de ir, sin embargo no consiguió mucha información, le explicaron que la floreria es de una mujer, mas no mencionaron nombres, la mujer no se encontraba allí, estaba de viaje, igual intento conseguir información sobre los arreglos pero es " Confidencial".

Llego el día de la fiesta, sinceramente estaba muy estresada, era una fiesta muy importante, quería que Miranda se sintiera feliz, esa jovencita me robó el corazón. Fui al club donde seria la gran fiesta, termine de dar instrucciones, era realmente hermoso, ella quiso que todo fuera de antifaz, y que todo invitado portara traje de color negro con su antifaz, todo quedo perfecto, la decoración negro combinada de colores neutros, las mesas perfectamente hermosas, con cristales lo más hermoso, sus cubiertos, sus copas, también instalamos un espacio para sus amigos, la mesa familiar, todo perfecto. Al terminar me fui directamente a mi departamento, necesitaba descansar, dormir, esta noche iba a ser estresante definitivamente.

-¡Samantha! ¡Samantha! -Ximena me mueve.

-¿Qué? -le digo adormilada.

-Tienes que alistarte Sam, son las 6 con 30, levanta tu trasero ya -me pega una nalgada.

-No, quiero dormir, ve tú ¿Si?

-Sam te tienes que presentar tú, después de aquí ya tendrás tus vacaciones, levanta tu trasero Sam ¡por favor!

-Va, esta bien, esta bien - le digo.

Me siento en la cama, no tardare mucho en alistarme, ya tengo mi ropa lista, así que solo es maquillaje.
Me doy una ducha, Me seco el cabello y me hago unas ondas, para ser sincera mi cabello se esta portando muy bien, me pongo un vestido negro de encaje un poco mas abajo de las rodillas muy ajustado con la espalda descubierta, me maquilló los ojos color ahumado con dorado y un labial color rojo, me encanta como resalta, unas zapatillas color vino, me coloco un collar que convine con las zapatillas, un poco de perfume y listo.

-Xime, ya me voy por favor, si sales llámame para alcanzarlas si puedo, ya sabes que no me gusta estar sola en casa -le digo

-Por dios Samantha te vez hermosa -Me ve de pies a cabeza.

-Gracias amiga, ¿en verdad te gusta?

-Claro que si, como quisiera tener ese trasero, te envidio -Sonríe.

-Espero y sea envidia de la buena guapa -Me río -Me voy te quiero, marcame por favor.

Salgo de el departamento, y me dirijo hacia la fiesta de Miranda Bowman. Tomo los caminos mas rápidos, ya que tengo que estar un poco más temprano para verificar que todo este muy bien, llego y me pongo mi antifaz, para ser sincera es muy sencillo, no me gusta llamar la atención, es algo delicado, negro con un poco de dorado, fue lo único que encontré a ultima hora.

-Samantha, todo esta listo, los invitados no tardan en llegar -Me dice Tom, uno de los hombres que trabaja para la empresa.

-Muy bien, ¿La música? ¿Falta algo? ¿Los meseros? -le preguntó.

-No, sam ya no falta nada, no te preocupes, todo esta muy bien, solo espera a la Señorita Bowman, ella nos dirá que es lo que va a necesitar.

-Esta bien, muchas gracias, es solo que estoy muy estresada, después de aquí ya tengo mis vacaciones -Le sonrió.

-Me alegro, te hacen falta. -me dice.

Pasaron 20 minutos y los invitados comenzaban a llegar, yo solo me dedicaba a verificar que los pasaran a la mesa correcta y que no pasara alguien más, despues de una hora todos los invitados se pararon de sus asientos aplaudiendo, Miranda lucía hermosa, con un vestido negro largo, con una pequeña cola arrastrando, su caballo suelto lacio, no podía ver su rostro por el antifaz, pero ella es hermosa, su padre el señor Bowman, dio un pequeño discurso agradeciendo a todos los presentes por acompañarlos en la gran fiesta de su hija más pequeña y a Miranda unas cuantas palabras de amor. La fiesta comenzó todos bailaban, sin duda una fiesta muy hermosa.