-El módulo de la base de la nave está totalmente destruido, no tenemos nada de torque, todos los propulsores han fallado y dejado de funcionar por completo, todo debido al paro de emergencia qué ocurriría en caso de un desastre, la parte frontal que dirigía la nave quedó totalmente irreconocible y nosotros, concretamente varios de mis compañeros han fallecido, nos encontrábamos solos en el extenso espacio negro como la boca de un lobo, después de un buen tiempo sin poder comunicarme con nada ni nadie, los compañeros caídos empezaron alejarse, sus cadáveres se fueron sin rumbo a dar un paseo que nunca terminará, yo comienzo a sentir un profundo miedo, ya que aunque no estaba herido, no sobreviviría mucho tiempo, qué haría con el hambre que sufriría, la sed, y la intoxicación por dióxido de carbono que emana de mis exhalaciones.
Lo que es preocuparse y aquí arriba, dentro de un traje encapsulado por un casco de astronauta, en un lugar frío, donde no se propaga ni siquiera el sonido, así que gritar no sería una opción. Estaba totalmente solo, escuchar dentro de mi cabeza -Mi destino va a hacer morir de una de las formas más solitarias posibles en un infinito manto de oscuridad- flotando sin poder estabilizarme, me encuentro girando lentamente donde me estoy moviendo hacia arriba, al infinito, cuando llegaba a ver hacia los lados no veía más que los cuerpos de mis compañeros siniestrados yéndose hacia las profundidades del negro oscuro del espacio, puedo ver el módulo en la nave que está totalmente destruido, lo que puedo hacer no es nada más que resignarme y así me quedé flotando en el vasto universo, viendo la tierra, mi casa, grande e imponente, y la luna, que acompañaría mi muerte...-.
