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0.8

  "Enamorado de ella" 

LYDIA

 Nuevamente había pasado la tarde y parte de la noche del domingo con Allison, en su pequeña reunión para celebrar el cumpleaños de su madre.
La única desventaja que había conllevado esto. Fue que Luke no asistiera a la reunión.
Allison paso por todas las fases bipolares, primero estaba furiosa de lo irresponsable y falta de amor que había sido él por no aparecer en el cumpleaños de su propia madre. Luego su reacción fue completamente feliz y positiva. Decía que está vez Luke no lo arruinaría con sus borracheras y escenas vergonzosas. Y por último comenzó a llorar, porque esté el primer cumpleaños en su historia en la que un integrante de la familia Hemmings no estuvo presente.
Yo observaba y consolaba a Allison cuando podía hacerlo. Los otros momentos estuve alejándome de los cotejos de los primos de Luke.
Cuando regrese a casa,Karen estaba sacudiendo el polvo de la lámpara de mi habitación, ella se frío y me sonrió cariñosa. 

Me tire en la cama, con los pies a doloridos. 

—Hola—salude respondiendo su sonrisa.

Ella se giró a verme con una reacción completamente sería. 

—Tu padre vino aquí—aviso. 

—¿Dónde esta él?—cuestioné al ver su cara de terror. 

—Se ha ido—continuó. 

Baje la mirada, decepcionada.

—Pero te dejo algo, que—prosiguió a medias

—Bueno, dámelo—pedí y me levanté de la cama con la mano extendida. 

Ella saco de su delantal una invitación del todo elegante, completamente blanca con letras y decoraciones color oro. 

Cuando la abrí, toda la hermosura de eso se esfumó. Había un letrero grande con "Nuestra Boda" y los nombres de mi padre y Natalie escritos.

La fecha avisaba que la boda sería dentro de una semana. 

Cuando mire a Karen, ella tenía la misma cara de pánico. Con los ojos pidiendo disculpas.
Sentí mi pecho apretar. 

Tome toda la fuerza que podía y rompí esa estúpida invitación en todos los pedazos que pude cortar.
Aún no podía creer como mi padre pensaba en otra esposa, con otra familia. Como me dolía saber que mi padre había olvidado todo lo bueno que había pasado con mamá. 

—Está bien—me recordó, dándome consuelo. 

—Nada va a cambiar—aseguró. Una promesa vacía. 

Negué varias veces con la vista en el suelo. 

—Estoy bien, solo necesito estar sola—pedí. 

Ella negó, creo que Karen me conocía mejor que cualquier persona en el mundo. Ella sabía que si me quedaba sola, comenzarían esos arrebatos contra mi misma. 

—Por favor—rogué. 

Le supliqué aún más con mis ojos. Y después de un rato, ella salió por fin. 

Pero ahora tampoco tenía la necesidad de llorar, solo me recosté y mire la estructura del techo, cada figura y cada molde. 

Necesitaba tiempo, y asimilar que mi madre saldría de una buena vez de la vida de mi padre. Lo único que yo quería, era que mamá supiera lo mucho que la amo y que jamás me voy a olvidar de ella. 

LUKE

Sonreí viendo el sufrimiento de Calum en los ojos. 

—Dámelas de una puta vez—avise amenazándolo.