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1.8

"Mienteles"

LUKE

 —No tienes idea,Hemmings—negó Ashton. 

Yo negué con un nuevo cigarrillo entre mis dedos.

—No, tu ni tienes idea Irwin. Siempre lo haces, siempre logras arrebatármelo todo. Pero yo no quiero en mi vida a alguien como tú—dije. 

—Ni como tú—miré a Lydia. 

Ella me miro sorprendida, con los ojos bien abiertos y dos lágrimas salieron de ellos. Una parte de mi, aún sentía dolor por verla sufrir, pero la otra parte, esa disfrutaba cada momento herirla, y gozaba cada una de sus lágrimas.

—No, yo no soy como tú. yo jamás te engañe ni te mentí. Yo jamás te he hecho daño. O me acosté con alguien más—reprochó. 

—Tu no mereces ser feliz, no mereces ser amado, ni si quiera por ella—dijo y señalo a Ashley. Mi corazón se encogió al escuchar eso. 

—Tu padre no era tan malo después de todo, al menos él no mintió cuando dijo que me estaba metiendo con las más grande porquería del mundo—escupió. Esa fue como una puñalada en el pecho. 

—No sabes la manera en que te odio... Te odio Luke, te odio—gritó. Y fue entonces cuando me recordó mi temor más profundo. No hice caso ni por un segundo a las lágrimas que galopaban en mis ojos.

Ella salió de ahí, a grandes pasos. 

—¡Espera!—grito Ashton y solo camino unos pasos. Luego regresó su mirada a mi como si quisiera matarme con solo hacerlo. 

—Decirte idiota que queda corto—habló. 

—Y yo fui el estúpido que la trajo aquí—dijo como un reclamo propio.

—Lárgate—escupí. 

—No, me toca a mi hacerte sufrir. Debería estar feliz, porque tu vida sigue estando hundida y yo no tuve que hacer nada para empeorarla. Fuiste un imbécil natural—continuó. 

—¿Jugar conmigo y acostarte con ella es nada para ti?—cuestioné.

—¿Piensas que ella es como tú?—entrecerró los ojos. 

—La jodiste, en grande. Y no hay que nada que puedas decir o hacer que pueda arreglar todas las palabras que dijiste. Ella jamás te engaño a pesar de todas las veces en que yo sé lo rogué—continuó

—¿Y piensas que voy creerte?—pregunté. 

—No necesito que me creas. Ella te amaba, y si lo único que quieres es salvar tu maldito culo, y no quedar como la maldita persona de mierda que eres. Dile a todo el mundo que ella te engañó conmigo, diles que ella es una zorra, que ella fue la maldita puta que te rompió el corazón. Miénteles, como toda la vida lo has hecho.—grito furioso, con una vena resaltado a cada lado de su cuello. 

Hundió la mano en su bolsillo, y saco un verde y arrugado papel. Lo tiro en el suelo. 

—Y si no te es suficiente, anda, ve. Comprueba todas las cosas que ella iba a hacer por ti. Sólo pensó en ti y en la manera de hacerte feliz, en una fiesta para hacerla feliz, y ¿tu se lo pagas haciéndola llorar?.—habló. 

—Si querías destruirla, puedes comenzar a festejar—termino. Después salió de ahí y lo perdí de vista. 

—Vete de una vez—ordené a Ashley. Tome el papel del suelo, y lo arrugue aún más entre mis dedos.

Y después de darme dos segundos de valor, lo abrí. 

—Sé que tal vez esto te parezca extraño o inusual, pero sólo tu sabes la manera en la que te amo. Quise hacer esto por ti, y por todos esos cumpleaños en los que tal vez pasaste solo o nadie se tomó la molestia en celebrar. Y puedo entenderlo, porque desde años, no ha habido uno bueno para mi. Pero sé que este año mi suerte va a cambiar porque te tengo conmigo.
Es gracioso como Ashton acepto ayudarme con esta sorpresa, a pesar de saber la relación que hay entre los dos. Por eso le pedí a él que fuera la persona que te diera esto.
Te amo.