Una Tate |Teen wolf| #TWAwards

Safe

Los ojos de la chica se abren lentamente, cuando sus pupilas funcionan correctamente y deja de ver borroso recuerda todo. Los Doctores se la han llevando junto a su amiga para a saber qué. Sigue sin fuerzas para moverse, y mucho menos después de ver el interior de su guarida.

Todo huele a una mezcla de moho y productos químicos, hay muchas cosas viejas y gastadas por todos lados. No solo instrumentos extraños que se camuflan con la oscuridad del lugar, también contiene cápsulas extrañas con bichos inmundos dentro, paredes húmedas y muchas estanterías vacías y polvorientas.

Sorprendentemente, Mel no se preocupa en los detalles decorativos si no en la camilla que se encuentra a pocos metros de ella. Hayden está tumbada boca a bajo con el pelo y la ropa empapados de sudor y medio adormilada. Dos Doctores la observan y ella los mira de reojo muy asustada.

Como buena amiga Mel se intenta incorporar con las fuerzas que le quedan, pero algo la detiene. Gira la cabeza lentamente y localiza una especie de armadura metálica que le cubre el antebrazo entero. No solo está atornillada al suelo, también tiene un tubo metido en la parte interna de su codo.

Ese tubo, no muy fino, inyecta una especie de líquido negro que no parece tener buena pinta. Pero por suerte Mel no puede sentir el dolor o en todo caso la herida se curará en un futuro próximo. Ventajas de ser medio coyote.

Igualmente intenta tirar olvidando eso, poco tarda en recibir una patada imprevista de el tercer Doctor por el costado. La chica cae al suelo y ve como la figura avanza a por su amiga.

--- ¡No! Por favor, dejadla en paz--- suplica Mel mientras que ve como sacan aparatos extraños acercándose a Hayden--- ¡Parad!¡Hayden no!

Sin quererlo una lágrima baja por su mejilla derecha. Esto no es justo, ella no quiso ser eso; como ya había oído anteriormente, ser algo sobre natural se escoge u ocurre por alguna situación de vida o muerte. A veces por accidente pero nunca por creación malévola.

Mel no tiene mucho más tiempo para pensar ya que una patada en toda su nariz le hace estallar de dolor y caer atontada al suelo. Nota el famoso líquido rojo caer hacia su boca y todo a su alrededor parece oscurecerse. Y otra vez más su vista se vuelve negra, totalmente negra.

***

Despierta como antes, en el mismo sitio y mirando hacia el mismo lado. Pero esta vez la camilla del fondo está vacía, Hayden no esta siendo torturada y los gritos que Mel escuchó estando desfallecida no se escuchan.

--- Mel...--- oye que la llaman a sus espaldas como si fuera un quejido.

Cuando se da la vuelta la tensión y el miedo desaparecen casi al completo, Hayden está ahí sana y salva. Bueno, casi del todo porque se agarra a su cadera izquierda como si su vida dependiera de ello. Está retorcida de dolor, junta sus cejas y aprieta la mandíbula y labios con fuerza.

--- ¿Qué...te ocurre?--- cada vez le es más complicado hablar a Mel.

Tarda en contestar, pero cuando lo hace ni siquiera se molesta en hablar; saca sus manos de la zona dolorida y muestra una herida profunda que está recubierta de sangre negra. No es muy agradable de ver pero a Mel le gustaría inspeccionarla, en cuanto va a tocarla algo la detiene.

Otra vez la maldita armadura de metal atornillada al suelo la sujeta y tira de ella mediante el tubo de líquido negro que está bajo su piel. Los dos líquidos de las chicas son muy similares y eso da que pensar a Mel. Poco puede discurrir si los quejidos de Hayden la interrumpen.