Una Tate |Teen wolf| #TWAwards

Dead chimeras

Al llegar al sitio en cuestión el siente escalofríos. Puede que sea por la mañana y el sol brille en el cielo, a lo mejor simplemente es la sensación de que algo malo puede pasar.

Después de volver a ver viva a una de sus mejores amigas ya nada tiene sentido, aún menos que antes. Además no tiene ninguna chica dispuesta a escuchar sus problemas; Kira sigue sin aparecer, Malia no sale de su casa y Lydia...Lydia ya es otra cosa diferente.

La señora Martin, la madre de Lydia, ha dejado que se la lleven. A su hija. ¡A Eichen House! Esa mujer está loca, ahora Lydia está en peligro dentro de ese manicomio. Está lleno de bichos raros, y eso lo piensa una mujer coyote.

En estos momentos el cerebro de Mel debe guardar un pequeño cachito más donde almacena preocupación por liberar a Lydia. Mas los otros como pasar tiempo con su hermana, hablar con Hayden, ver a Liam y preocuparse por qué hace en una central eléctrica a las afueras de Beacon.

Jordan Parrish, el policía de ojos verdosos y perro del infierno en sus tiempos libres está frente a ellos dos. Le entrega a Scott un teléfono móvil y le da al play para ver el vídeo.

La imagen es oscura, no cabe duda de que es de noche. En el mismo sitio en el que se encuentran, justo de la puerta que se ve enfrente sale un monstruo negro y difuminado. No se consigue ver bien, pero horroriza de solo intentar imaginárselo de cerca.

--- Es la cámara de seguridad de la estación--- les informa el agente.

--- Parecía grande--- murmura Mel, recordando verlo rompiendo la puerta de acero.

--- Y muy rápido para que nadie pueda verlo bien--- acota Parrish, luego se gira y mira e Scott---¿Pero ya sabes lo que es no?

--- La última quimera--- declara con un aire pensativo y preocupante. Como casi todo el tiempo.

Entran los tres en el gran edificio. Dentro pasan por miles de túneles con tuberías mugrientas. El olor es horrible, plástico quemado y agua estancada.

Al final llegan hasta una sala, llena de cables cortados que es mejor no acercarse a comprobar si electrifican; todo está completamente destruido. Las paredes rotas, agrietadas, una oscuridad siniestra y que no falte el olor a sangre.

Una placa amarilla con un uno negro indica una zona cubierta de sangre. Parrish explica que la criatura misteriosa mató anoche al guardia de seguridad de la central. La policía ya se encargó del cuerpo, arañado hasta desangrarse.

--- ¿Tienes una luz ultravioleta?--- pregunta Scott mirando hacia Parrish.

El policía busca en sus bolsillos y por suerte consigue sacar una linternita. Se la lanza a Scott y éste ilumina una esquina manchada de sangre. Sale una bruma negra en la zona y se ven manchas plateadas en el suelo.

--- El mercurio significa quimera--- dice el alfa.

Mel no es capaz de hablar. Está nerviosa, otra cosa más por la que preocuparse. Y no sólo eso, si no que en este sitio ella no se siente nada segura. Se abraza a sí misma y no para de mirar hacia atrás.

--- ¿Pero que estaba haciendo aquí?--- pregunta ahora ella---¿Por qué venir aquí y matar aleatoriamente a un técnico?

Los chicos empiezan a andar, esa pregunta es la que ronda en la cabeza de todos.

--- A lo mejor solo quiere matar, tal vez es lo que hace--- opina Scott.

--- Eso es aterrador--- dice Parrish. Justo lo que Mel diría.

Un silencio se instala en la sala. Scott se acerca a una pared y la observa. Cuando Mel se disponía a acercarse a él, Scott se da la vuelta asustándola. Por poco se cae al duro y frío suelo de cemento.