Capítulo 19

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Tres días habían pasado y era jueves. Era jueves en la mañana y Lita le había pedido el favor a una de sus meseras que se encargara del restaurante y de la caja porque quería ir al hospital en donde se encontraba uno de sus mejores clientes internado.

Estaba terminando de cerrar la bolsa de galletas con chispas de chocolate que tanto le gustaba a Taiki para llevárselas como regalo antes de ir con ellos.

Desarrugando su lindo vestido floreado y yendo con Andrew que estaba con Seiya esperándola, llegó y les dijo que ya estaba lista.

— Listo. Ya estoy lista muchachos.

— Bueno, —se levantó Andrew de la silla mientras Seiya hacia lo mismo—ya era hora. Tu café y tus panecillos son deliciosos pero si me hubiera comido uno más, estaría en graves problemas.

— Ay si tú, ya dijiste.

Se burló Seiya mientras ponía algunos billetes sobre la mesa para pagar la cuenta.

— Bien que te gusta andar comiendo todo lo que hace la belleza de Lita. ¿No Lita, mi amor?

— Bueno, bueno, bueno, cuidadito Seiya con estar viendo de a mucho a mi chef porque ella es mía. ¿De acuerdo?

— Andrew, —sonrió sonrojada y una apenada Lita que era abrazada por él—no digas eso.

— Más bien vámonos que, ¿Qué casualidad? Justo te podemos llevar al hospital donde trabaja tu amiga porque tenemos que ir a ver a un paciente que internaron hace tres días allá.

— Oigan, ¿Cómo? ¿Y ustedes por qué tienen que ir a ver a un paciente a ese hospital? Uno a los enfermos los visita para llevarles algo, para saber cómo están; no para interrogarlos.

— No cuando ese paciente ha sido herido de bala Lita. —Dijo Seiya mientras subía al auto patrulla y se preparaba para encenderlo—A eso vamos. Vamos a ir a hacerle unas preguntas a ese tipo porque el director del hospital nos pidió que fuéramos. Dice que las condiciones en las que llegó no fueron las mejores y tiene sus sospechas.

— Bueno, ustedes son los policías. Ustedes saben lo que hacen.

Inocente de a quien se encontraría cuando entrara a aquella habitación a interrogar al "paciente" que el director del hospital les había pedido ir a ver, arrancó el auto patrulla mientras Lita y Andrew no hacían más que tomarse de las manos y darse el uno al otro miradas muy coquetas, muy románticas. Seiya la verdad sentía envidia por todo al que veía feliz porque él desde lo de Haruka, no había vuelto a salir con nadie; o al menos no de manera formal y seria. Había cerrado su corazón y se había dedicado a eso. A salir con una que otra mujer para tratar de olvidarla. Para tratar de matar o al menos enterrar, el amor que aun sentía por ella.

Manejando hacia el hospital y subiéndole un poco al estéreo para darles algo de "privacidad" sonreía al verlos platicar.

Unos cuantos minutos antes de que Lita, Andrew y Seiya llegaran al hospital, (y más específicamente a la habitación en donde se encontraba Taiki recuperándose) Amy y Taiki estaban en lo de siempre desde que él había despertado, en un idilio.

— Anda Taiki, no seas bebe mi amor. Come que si no comes bien no te vas a poder recuperar y no te voy a poder dar de alta.

— No mi reina, no mi amor, —dijo con cara de fastidio mientras apartaba la comida—tú sabes que yo amo la comida de Lita y esto, esta disque "comida", no le llega ni a los tobillos a la de ella. ¡Ya quiero irme de aquí!

— Taiki, mi amor.

Le retiró la bandeja de comida y se sentó a la orilla.

— No te pongas así. Lo que pasó fue muy grave y antes agradece. De otro haber sido el caso....

El caballeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora