DAMNED

Capítulo 21

Llegamos a casa de Sauli.

Y estaba todo envuelto en papel no había nada.

-Sauli que pasa? - dije un poco asustada yendo hacía él

-Dahlia! Me alegro de que por fin te hayas despertado estábamos muy preocupados

Nos abrazamos

-Si, todo gracias a Adam

Lo miré y me regaló un abrazo y sonrisa.

-Pero eso ahora no importa, Sauli que hace toda tu casa así?

-Verás...me mudo, me voy a Finlandia una temporada...Quiero olvidarme de todo lo que ha pasado estos días, lo del accidente, de lo que has sufrido, ver a Adam sufriendo por ti...A mí.

Quiero estar un tiempo solo para así también pensar en el trabajo y distraerme de todo esto.

Me quedé sin aliento.

-Co-como que te vas? No puedes irte Sauli...

-Lo siento Dahlia pero después de el susto y todo lo que ha pasado necesito un cambio de aires.

Os voy a escribir a diario.

Nos miró

-Adiós chicos

Nos abrazó, nos dio dos besos y el camión se fue rato después.

Salimos de casa de Sauli.

***

Miré a Adam

-Como es que no has dicho nada?

Me miró, no sabía que decirme

-Lo sabías Adam?

Me separé de él mirándolo ojo a ojo

Él no me dijo nada simplemente me miraba y luego miraba al suelo

-Porque no me lo has dicho Adam? Pensaba que la sinceridad era base de toda relación

-Dahlia cariño te acabas de despertar del coma, necesitas estar tranquila. No me parecía oportuna la ocasión nada más. Y si lo tenías que saber no era por mí sino por Sauli.

No sabía que hacer o decir.

Creí perder a el amor de mi vida, a Adam, en una realidad distorsionada, en un mundo que no era real. Y ahora a mi mejor amigo...

Me despierto de una pesadilla y empieza otra.

Pero esta se que es de verdad.

***

No evité derramar lagrimas.

Adam simplemente me abrazó muy fuerte en sus brazos.

-Te prometo que nunca me voy a ir de tu lado. Voy a estar contigo para siempre Dahlia.

Se ha ido Sauli, pero me tienes a mi. Y esta vez para siempre. Te quiero mucho Dahlia.

Lo miré a los ojos.

-Mucho - me repitió acariciándome la cara

Su mirada azul impregnada en la mía.

Esbocé una sonrisa que iba a compás con la suya.

En repentinos momentos mis labios tocaron los suyos.

De repente sus dientes mordieron mi labio inferior tirándolo hacía él con suavidad.

Sabía perfectamente, que eso... me encantaba.

Nuestras mordidas en los labios,

nuestras risas, nuestros besos.

Todo en un momento.

Todo en un sentimiento.

En un instante.

En sus labios y en los míos.

Sus dientes impregnados en mi labio.

Mis labios, sellados por él.

Sellados por los suyos,

sellados por sus dientes, por sus mordidas.

Sellados por él.

***

"Desearía que ese momento fuese eterno,

para así no volver a alejarme de la persona que más amaba en esta vida.

Nunca perdió la confianza de volver a tenerme con él, él ha sido el único que no me abandonado.

Él que me ha demostrado su amor hasta en otro mundo.

Él que se adentro dentro de ese mundo para salvarme, para no perderme.

Casi lo pierdo, pero esta vez nada nos volverá a separar.

Porque nuestro amor es lo más fuerte que existe.

Lo que me hace fuerte, lo único que me motiva cada día a levantarme.

Él es todo lo que siempre he necesitado. Él es toda mi vida."

***

Nos separamos lentamente uno del otro, no me soltó el labio de sus dientes.

Nuestras narices chocaron las unas con las otras,

mientras nuestras bocas reían.

Nuestros ojos se cerraban y se volvían abrir mirándose unos con otros.

Y mis dientes mordían ahora sus labios.

Haciendo que cerrará sus ojos, como los míos.

Que se sumergiera en un mar de placer.

***