5.

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Un mes. Un mes había logrado alejarme de ella, los métodos no eran los mejores pero me ayudaban.

La evitaba por el pasillo, trataba de no pensar en ella y cada vez que lo hacía, agarraba una lata de cerveza. Iba a las carreras con más frecuencia y las peleas se hicieron un pasatiempo. Los fines de semana iba de bar en bar y de chica en chica, eso me distraía a no ir corriendo hacia ella. Y aunque sabía que no era lo mejor, para mí, era lo máximo que podía hacer.

Sin embargo ese sentimiento de angustia no podía aparecer, de reojo a veces trataba de ver si tenía un nuevo golpe o si se quejaba al sentarse en clase. No podía ignorar el echo de que estaba sufriendo cada día cada vez más y yo me alejaba de ella sin siquiera ayudarla.

Pero no era mi batalla, era la de ella.

Esas son las palabras que me repito cada día para recordarme que debía mantenerme alejado de ella. Ella estaba en una batalla muy fuerte y debía enfrentarla sola.

Camine hasta el siguiente pasillo y la vi, vi como los libros se le caían al piso y como con esfuerzo los recogía, mientras caras de dolor aparecían en su cara.

Me aleje de allí tratando con todas mis fuerzas no acercarme ahí y ayudarla, porque una vez hubiera echo eso, no podría parar y seguiría ayudándola. Como una droga que era imposible dejarla.

-John!-me tense, pero me relaje al ver a mi amigo Tomas corriendo hacia mí con un folleto en sus manos.

-Que quieres?-le pregunte arrancándole el folleto.

-Mira el folleto-me dijo con una sonrisa.

Lo leí, era de los folletos de las carreras ilegales. Al parecer un tonto pago para decir que esta noche quien logre ganarle ganara $10 000. Era un buen premio, había tenido mejores ofertas pero $10 000 no estaba nada mal.

-Bien, cuando es?-pregunté dándole el folleto.

-Hoy, a las 9:00pm, en el Mismo lugar de siempre-me contestó.

-Vale, ahí nos vemos-le di una palmada en el hombre y me aleje por el pasillo.

***

-Pásame una-le dije a un tipo que estaba cerca de las cervezas.

Esta me la tiro y yo la atrape con facilidad por el aire. La abrí y tome un largo trago, esta paso por mi garganta normal después de haberme toda otras dos.

Tenía a una chica sentada en mi regazo en un sillón viejo, esta metía la mano por debajo de mi camisa y de vez en cuando besaba mi cuello.

Eran las 8 y la carrera era a las 9 así que aún tenía tiempo, estaba a solo dos cuadras así que tenía planeado darme un polvo rápido y de ahí ir.

Después de terminarme la tercera cerveza de la noche tome a la chica de la muñeca y me la lleve a uno de los cuartos de arriba.

Luego de echarle ese polvo vi la hora, 8:30, mejor me voy de una vez y allá me tomó otro par de cervezas.

Y así lo hice, llegue, me reuní con los demás chicos de mi grupo y me tome el par de cervezas. Para ese tiempo no cabe decir que estaba más que borracho.

Me trepé a la moto con dificultad y me dirigí a la línea de salida cuando anunciaron que la carrera iba a empezar.

Todo se veía borroso, estaba mareado y estaba a punto de vomitar. Se alzó algo verde y me di cuenta que era la vendara, luego bajo como una mancha y arranque.

Apenas veía las cosas a mi alrededor, estoy seguro que choque con un par de cajas y patee algunos tachos de basura.

Sin embargo iba a toda velocidad, no había ni tocado el freno, me balancee un poco hacia la derecha y perdí el control. La moto se fue contra el piso y yo encima de esta, me di un gran golpe en el cuerpo del lado derecho.

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