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17.

Narra John

-Acaso eres niña? Pégale más duro!-gritó el entrenador mientras le golpeaba al saco.

Había venido para descargar mi ira, de vez en cuando venía aquí y hacia un poco de box, me relajaba.

Le pegue más duro al saco, llevaba aquí una hora y estaba agotado.

-Eso es todo por hoy-suspiro y se pasó la mano por la cara-. Estás muy distraído, no sueles ser así-dijo frustrado.

-Cierra la boca-le tire los guantes al piso y me fui a los vestuarios.

Me di una rápida ducha entre gruñidos. Salí y me vestí lo más rápido que pude. Tome mi moto y fui a toda velocidad. Trepe por la ventana y entre a su cuarto, ella estaba en la cama con los ojos entrecerrados viéndome.

Me acerqué a ella y bese sus labios, estaba frustrado y ella era la única forma de sacarme esto. Sin embargo ella no me siguió el beso, como casi siempre y eso me frustraba más por qué estaba acostumbrado a que lo hagan.

-Que tienes?-le pregunté al separarme de ella. Normalmente cuando yo llega ella se paraba pero esta vez estaba en la cama acostada.

-No se-su voz estaba tan ronca que sonaban como gallitos.

-Te duele la garganta?-pregunté sentándome en el colchón.

-Si, desde ayer estoy así y...-

-No hables, así nunca te vas a curar-la regañe. Ella me miro claramente sonrojada y se tapo un poco con la sabana-. Te duele la cabeza?-toque su frente y enseguida la mire preocupado-.Dakota, estás hirviendo joder-la mire sorprendido.

-No es solo que hace mucho calor-dijo y no pude evitar reírme un poco gracias a su voz.

-Estas enferma-negué con la cabeza y me levante para ir a su baño, saque el botiquín ya casi vacío y volví a sentarme en el colchón.

-No me siento muy mal-dijo arrugando la nariz.

-Has vomitado?-le pregunte levantando una ceja y la mire fijamente a los ojos, ella apartó la mirada y jugó con el filo de la colcha.

-No-negó con la cabeza mientras seguía jugando con la sabana.

-Eres una mentirosa-la acuse.

-No miento, es solo que...so..solo fue un...un poco-dijo nerviosa al ver mi cara.

Saque un jarabe para la fiebre,  trate de buscar si tenía alguna pastilla o algo para la garganta pero no tenía nada.

-Has comido algo?-pregunté mientras servía el remedio en el pequeño vasito que venía.

-No quiero-la mire mal.

-Como que no quieres?-pregunté enojado.

-Y..y si vuelvo a vomitar-me miro preocupada. Hice que se tomará el remedio y luego me acosté junto a ella.

-Es mejor, siempre después de vomitar te sientes mejor-le asegure.

Dakota se quedo callada y se tapo más con la sabana. Le toque la frente y seguía igual, no iba a bajar tan rápido.

Narra Dakota

La garganta me ardía, la cabeza me explotaba y el vomito estaba listo para salir disparad de mi garganta en cualquier momento. De cualquier forma trataba de evitarlo lo más tiempo posible, no quería que me viera en esta situación.

John se acomodó más a mi lado hasta dejar mi cabeza en su pecho, y aunque me doliera todo, esta sensación de tenerlo aquí me hacía sentir mejor.