Never Enough

Capitulo 20

-¿Como está?- le pregunto a mi madre cuando sale de la habitación donde se encuentra mi padre.

-Esta bien, esta consciente y no deja de preguntar por vosotras- un alivio me recorre todo el cuerpo y no puedo evitar sacar el móvil para decírselo a Harry.

<<!Mi padre se ha despertado¡ :D >>

-Mami, vamos a ver al abuelo- dice Rachel tirando de mi mano hacia la habitación.

Entramos en la habitación y vemos a mi padre sentado en la cama con una sonrisa, hablando con el medico.

-!Abuelo¡- grita Rachel- !Te has despertado¡

Ella empieza a correr hacia su cama, y el doctor la ayuda a subirse hasta mi padre para que pueda abrazarle.

-Hola mi niña- le dice mi padre con cariño- Estas preciosa, cariño.

Ella no le contesta, simplemente le sonríe y le da un beso en la mejilla.

-¿Sabes que abuelo? Ya ha nacido Dan

-¿Enserio? ¿Y yo me lo he perdido?

-Pues sí, estabas dormido.

Él se rie y posa su mirada en mí.

-Hola cielo.

-Hola dormilón- bromeo acercándome a su cama- ¿Cómo te encuentras?

-Asombrosamente bien. ¿Y tú?

-Bien- suspiro- Ya estoy bien.

Él me sonríe y yo me acerco a darle un abrazo.

-No vuelvas a asustarme asi por favor- le susurro al oído mientras las lágrimas me abandonan.

-Ya no llores, Ellie- me acaricia el pelo- No volveré a subirme a una silla, te lo juro.

Es increíble como incluso después de pasar un coma, mi padre sigue teniendo ese sentido del humor. Le beso en la mejilla mientras me rio y me aparto de él.

-!Dios mio¡- dicen desde la puerta.

MIro, y veo a Nathan correr hacia mi padre y tirándose literalmente encima de él.

-!Ey chaval¡- le golpea la espalda con cariño.

Aparto la mirada de esa escena que me trae demasiados recuerdos y cojo mi móvil que acaba de sonar. Es Harry.

<< Me alegro, amor. Yo estoy empezando a recoger ya las cosas de Dan, le toca comer. En unos diez minutos estoy en el hospital. Te quiero ;) >>

Le contesto con un okey, ahora nos vemos. Yo también te quiero y miro a Rachel que está chillando.

-!Me estas aplastando la muñeca tio¡

-Perdona princesa- le contesta cogiéndola en brazos.

Ella se rie y abraza a su tio del cuello para darle un beso en la mejilla.

-¿Vosotros dos no pensáis saludaros?- dice mi padre de repente.

-Hola Ellie- dice mi hermano seco sin mirarme.

-Hola Nathan- le contesto igual.

-Daros un abrazo- dice Rachel.

Yo no hablo, al igual que mi hermano. Nos dedicamos a mirarnos el uno al otro sin saber que decir, ni que hacer. Veo como suelta a mi hija en la cama con mi padre y se acerca a mi poco a poco. Cuando esta a menos de un metro de mi, se detiene y abre sus brazos. Yo me acerco poco a poco a él y mis brazos se rodean en su torso. Noto su respiración en mi cuello y de repente me siento muy relajada. Los abrazos siempre me calmaban, me apretaba fuerte contra él y me susurra que todo iba a salir bien, que confiara en él.