1. En el Corazón no se Manda (TERMINADA)

Capítulo 24

Antes de empezar a leer el capítulo he de comentar que toda la información que en él aparece ha sido buscada y estudiada, pero que quizás no sea real, porque la he escrito con fragmentos e ideas que he ido cogiendo de cada información y la he ordenado y clasificado a mi gusto, de tal forma que la información que en este capítulo se da ha quedado tal cual, sea o no cierta.

|Narrador omnisciente|

Nadie puede controlar los pensamientos y sentimientos que van creciendo poco a poco en el interior de cada ser humano. Estos llegan cuando menos los esperas e incluso se agarran muy en el interior de nuestro ser.

El amor es un pequeño sentimiento que crea el corazón, un gran órgano indispensable en nuestro organismo al que es imposible dar órdenes o decir a quién sí o a quién no se puede amar. Cuando este se enciende, ya no hay marcha atrás.

El amor, es indispensable. Gracias a él, puedes verte capaz de enfrentar cualquier adversidad. Y a pesar de los obstáculos, cuando hay amor, nada a tu alrededor importa.

No sabemos si es por amor que Justin es capaz de enfrentar un diagnóstico crucial, que ha pesar de sus nervios y la poca esperanza, tiene ánimos y deseos de poner remedio a su enfermedad.

Pensar en Devonne, y en ese maravilloso día juntos, le hace ver la vida con más claridad. Por ella quiere sacar esperanzas de donde sea para que este proceso sea menos doloroso.

—Desgraciadamente no traigo buenas noticias —Comienza el doctor, ante la atenta mirada de aquellas personas que frente a él se encuentran —Esperaba un diagnóstico diferente al que me he encontrado y ver el estado del tumor me ha tomado por sorpresa.

—Sabía que esto no era una buena idea —Murmura Justin, más para sí mismo que para los demás allí presentes.

—He podido observar—, Continúa Salazar, haciendo oídos sordos ante el comentario de su paciente -el tipo de tratamiento que se ha llevado a cabo en dicha enfermedad, un tratamiento que a simple vista puede resultar eficaz. Tras leer detalladamente el historial del paciente, puedo asegurar que en su momento era el adecuado. El tumor no presentaba dificultad y era innecesaria la presencia de quimioterapia o cualquier otro método más fuerte y doloroso. El problema... —Salazar calla por breves segundos, observa a todas las personas allí presentes y se asegura de pensar las siguientes palabras antes de soltarlas —El problema es que el tumor a crecido y se ha desplazado a un lugar del cerebro un tanto complicado. Podemos destacar un factor positivo en todo esto, un factor que aún no sabemos con certeza y que debemos analizar, y es que el tumor a pesar de ser maligno, cosa que ya sabíais, es también primario, lo que quiere decir que no está todo perdido.

—¿Podrías explicar eso? —Ruega Pattie, desesperada y asustada por el estado de su hijo.

—Para que sea un poco menos complicado... Los tumores cerebrales pueden ser de dos tipos. Metastásicos, lo que quiere decir que el tumor se originó en otra parte del cuerpo, y este se ha ido desplazando hasta llegar al cerebro. O en el caso de Justin, primarios. A su vez, los tumores primarios pueden llegar a ser malignos o benignos.

—De todas formas, ya se ha comprobado que mi tumor es maligno, ¿qué esperanzas puede haber en este caso? —La desesperación de Justin es demasiado evidente, se siente amenazado, asustado... Y eso lo lleva a perder todo tipo de esperanzas, a creer que nada de lo que se está intentando merece la pena.

—La esperanza es lo último que se pierde chico, y aún no me has dejado terminar —continúa Salazar —Un tumor maligno puede clasificarse según el grado y evolución de este. La diferencia entre ambos es; un tumor metastásico es siempre maligno y peligroso, mientras que un tumor maligno en sector primario se clasifican desde menos a más malignos. Hay que examinar detalladamente el tipo de tumor, su crecimiento y el lugar donde se encuentra situado para averiguar su estado. Si este llega a ser de los menos malignos es fácil encontrar un buen tratamiento sin llegar ha realizar una cirugía.