Capítulo 30

22 4 0
                                        

|Devonne|
Seis y media de la tarde. Inútil pensaba yo que sería añadir un nuevo vestido a mi armario, pero inútil es convencer a Estefanía para que no me obligue a arreglarme.

—Vamos, es tarde muchachita —Ordena, mientras empuja mi cuerpo hacia el interior de la bañera.

—¡Tarde para qué! —Exclamo, un poco cansada ya de su actitud y secretismo.

—Tú solo dúchate y arréglate. Tienes prohibido hablar, preguntar, pensar, negarte o desobedecer.

Suspiro rindiéndome a sus ordenes y doy una ducha rápida antes de salir del baño. Lo que menos necesito es que mi amiga cumpla con su amenaza de enjabonar y enjuagar ella misma mi cuerpo.

Más que inútil es confuso pensar lo que está pasando. Me han tenido toda la mañana de una tienda a otra buscando y probando ropa que al final no hemos comprado. Han insistido una y otra vez en regalarme un vestido que pensaba no iba a usar nunca. Y ahora me encuentro saliendo de la habitación, no solo junto a Estefanía, sino también junto a Brenda. Vestida con ese hermoso y sencillo vestido de flores que ellas mismas me han regalado, siguiendo por un bonito peinado en ondas adornadas con pequeñas flores salteadas por todo el cabello y finalizando por un sencillo y natural maquillaje.

—No puedo creer que vosotros también seáis parte de esto —Murmuro sorprendida al encontrar a Ryan y Chaz en la salida del instituto.

—Vosotros ni caso —Dice Estefanía al observar las caras de confusión de ambos chicos.

—Devonne... Sube, por favor —Ryan se encoge de hombros ignorando mis palabras y abre la puerta del coche estacionado tras de él.

—No pienso subir hasta que alguien me explique a que viene todo esto —Empiezo a pensar que a mis amigos algo les ha inducido.

—No me obligues a meterte a ese coche a empujones Devonne —La voz autoritaria y el rostro serio de Estefanía me dicen que es capaz de eso y mucho más, así que obedezco y entro al coche por mi propio pie.

—¿Ellos no vienen? —Pregunto, al observar que solo Ryan sube al auto y emprendemos nuestro camino sin los demás.

—No, y yo solo voy a dejarte en un lugar.

Suspiro y cierro los ojos mientras dejo descansar mi cabeza sobre el posa cabezas del asiento del coche. Decido dejar de preguntar y el silencio nos invade al menos por unos minutos. Silencio que es interrumpido por Ryan al entregarme un papel perfectamente doblado.

—Esto es para ti.

Confundida por toda esta situación lo agarro, lo abro y empiezo a leer las líneas que en ella se dibujan.

Hola preciosa.

Estarás preguntándote a que se debe tanto secretismo. Supongo que nuestros amigos sabrán guardar el secreto y que con cada paso estarás aún más confundida.

No les culpes, todo esto lo he planeado yo porque creo es la única forma que tengo de hacerte llegar hasta mí.
Recuerdo cada momento vivido y juro que no entiendo como he podido ser tan imbécil de dejar escapar lo único bueno que he tenido en la vida.

No quiero que te sientas presionada. No quiero te asustes porque yo sería incapaz de hacerte daño. Sólo pido una oportunidad para enmendar mi error y estás en todo tu derecho de pedirle a Ryan volver al instituto.

Te espero en el lugar más hermoso que he podido encontrar junto a ti.

CON AMOR. JUSTIN

1. En el Corazón no se Manda (TERMINADA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora