Le gustaba ese árbol es específico, tenía la vista perfecta del laboratorio... y de ella, más de ella.
-¿Qué casualidad verte por aquí Peet?- le dijo la alegre Delly en tono sarcástico sentándose a su lado. Peeta por su parte se limitó a negar y girar la cabeza a su acompañante.
-Hola Delly- sobre el hombro de la chica pudo divisar que sus demás amigos se acercaban –Te... agradecería que...- no sabía cómo decirle a su amiga su obsesión por la morena.
-Yo soy una tumba- dijo la rubia con seriedad y luego sus regordetas mejillas se volvieron a tensar en una sonrisa –Tu amor demasiado platónico y secreto está a salvo conmigo- y con un guiño, se giró para saludar al resto.
Delly era muy parlanchina y positiva siempre, la conocía de toda la vida, era como su hermana. A pesar de estar rodeado de todos esos chicos, muy pocos lo conocían de verdad. Estaban a su alrededor porque eran conocidos. Desde pequeño, se había visto arrastrado por su madre a fiestas de "Elite" como las llamaba ella; creció rodeado de gente rica y poderosa y sobre todo, sin escrúpulos; y desde corta edad, se prometió nunca ser como ellos a pesar de su posición.
Miro a todos a su alrededor de nuevo. Muchos solo estaban ahí por quien eran él y Delly. Regreso su vista a la ventana del laboratorio y encontró a Madge Underse mirándolo con una sonrisa, le sonrió de vuelta, y cuando se percató de que la amiga de esta se giraba retiro su mirada.
Además de Delly, Madge también estaba al tanto de lo loco que lo traía la chica de cabello trenzado.
Iba tarde al taller, no le gustaba hacerla esperar pero había perdido la noción del tiempo en el invernadero.
-Lo siento mucho Madge. No era mi intención- se disculpó mientras buscaba las llaves en su bolsillo.
-Tranquilo- le sonrió amablemente la chica frente a él que sostenía el kit de pinturas entre sus brazos.
Abrió la puerta y la dejo pasar mientras se hablaban mutuamente de su día y empezaban con la clase de esa tarde.
-Peeta- lo llamo desde detrás del cabestrillo –Quiero hablarte sobre Katniss-.
-Madge- le llamo la atención en tono sombrío –Ya hemos hablado de esto, y te dije que cuando estuviera listo me acercaría a ella-.
-Solo creo que debes hacerlo ya... tal vez seas perfecto para ella y tú no...- pero la interrumpió.
-Estas recargando demasiado el pincel, cuando uses acuarela intenta dar toques suaves- Peeta cambio el tema rápidamente y así dio por concluida la plática, con una Madge nada confirme.
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Spot me... [Encuéntrame]
Hayran KurguNo necesitaba encontrarla, estaba justo delante de el. No necesitaba encontrarlo, porque ahí estaba él. Simplemente necesitaban encontrar la manera de empezar. Los personajes no me pertenecen, son propiedad de Suzanne Collins.