Capítulo 17: "Adiós Tom"

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Me costó una eternidad dormirme porqué no podía dejar de pensar y llorar. Desperté por las 4-5 de la mañana, aun no había amanecido. Abrí los ojos y vi que no estaba en el sofá donde me había dormido, sino en la habitación de Tom. Miré mi alrededor buscando a Tom pero no estaba. Me levanté y bajé al salón. Vi una sombra en el sofá, me fijé y vi que era Tom. Me había llevado hasta su cama y él había bajado a dormir al sofá. Aunque yo tuviera toda la culpa me seguía cuidando... Me sentí fatal y exploté otra vez... No quería subir porqué era YO quien debía estar en el sofá pero tampoco quería molestar a Tom. Intenté llorar en silencio pero no sirvió. Tom se despertó, levantó la cabeza y me miró. Supongo que al ver que era yo se despreocupó y se volvió a dormir. Me acerqué a él.

- Tom, vete a tu cama. Yo no voy a ir, la culpa es mía y soy yo quien va a dormir aquí - no hizo ningún gesto y yo me senté en la butaca de al lado, me hice una bola y cerré los ojos. Hacía un poco de frío y no había bajado la manta, pero ahora no subiría a buscarla y quedar mal. Peor, si se puede... 

Al poco rato escuché a Tom moverse y noté que me tapaba con su manta. Abrí los ojos y lo vi subiendo las escaleras. 

(...)

Pasaron 4 días y Tom seguía sin querer hablarme. Bill seguíamos siendo amigos pero evitábamos hablar cuando Tom estaba delante, por respeto. Cada vez que le intentaba contar algo a Tom, se iba. 

Hablé con Simone y decidimos que lo mejor sería que me fuera una temporada de esa casa. Pasó una semana más hasta que encontré un trabajo en el que me pagaban bien así que alquilé un piso pequeño en el centro de Los Angeles. La casa de los gemelos estaba a pocos minutos en coche. Finalmente, después de tres semanas viviendo con mi novio que no me hablaba y llorando cada día, me fui. 

Narra Tom


Llegué a casa desués de haber salido a pasear a mi perro. Aproveché el tiempo para pensar en mis cosas... Abrí la puerta y lo primero que vi fue a Janna con sus maletas al lado de la puerta despidiéndose de mi madre y Gordon y a Bill al lado dispuesto a salir. Janna me miró a los ojos pero enseguida bajó la mirada. Me quedé parado en frente de la puerta porqué no entendía que pasaba. Mi madre me entendió y me lo explicó.

- Janna se va a ir, cariño. Bill la llevará - miré a Janna, miré a Bill, miré a mamá, miré a Gordon, volví a mirar a Janna, miré sus maletas...

- Siento todo lo que hecho. No quiero causarte más problemas, por eso me voy.- dijo Janna sin ni siquiera mirarme a la cara. 

Hacía días que no le dirigía la palabra a Janna. Estaba relamente enfadado, aunque al fin y al cabo la seguía amando y se lo demostrba con pequños detalles. Después de casi una semana sin decirle nada, a parte de lárgate y eso, le hablé y eso pareció sorprenderla.

- Como que te vas? Donde? - no quería parecer demasiado preocupado y creo que lo hice bien. Janna levantó la cabeza y con cara de sorprendida me contestó.

- No muy lejos, al centro de Los Angeles. Quizás en un tiempo vuelva a España. No lo sé.. - cogió parte de sus cosas y se acercó a mi - Adiós Tom... - vi que se le escapaba una lágrima.

- Adiós. - es lo único que pude decir yo y lo dije con voz seria, como si no me importara.  

Dejé que se fueran sin decir nada. Me dirigí a la cocina para hacerme algo de comer, estaba hambriento. Fui a abrir la nevera pero... Había una foto de mi y Janna dándonos un beso con el cartel de HOLLYWOOD detrás pegada con un imán en forma de corazón. "Qué cursi ese imñan, Janna"  recuerdo haberle dicho mil veces. "Pues como tú cuando te pones romanticón" me contestaba ella siempre. Estuvo ahí durante toda la semana pero no me había fijado. Bajé los ojos y había otra donde salía ella con Scotty. "Deja a mi perro y hazme un poco de caso no?" le solía regañar. Seguí bajando y vi otra donde salíamos mamá, Gordon, Janna y yo todos riendo. "Sácanos una foto con nuestra yerna favorita" recuerdo a mamá diciendo eso ese día. Ellas dos se llevaban muy bien. Con ninguna de mis antiguas novias había estado tan contenta... Quizás debía dejar que se explicase... Entonces volví a mirar y vi una foto en la que salían Bill y ella solos abrazados. Me dio un ataque de rabia, la cogí y la rompí en miles de pedacitos. Se me pasó el hambre. 

Recuerdo el momento en que me confesó lo que pasó. No podía creer lo que estaba oyendo y tenía la esperanza de que en cualquier momento me dijera: "Es broma rastitas, yo te amo solo a ti". Pero al parecer no era así. Bill... máldito bastardo hijo de mi madre. Me sentía solo. Mi hermano y mi novia, las dos únicas personas en el mundo que pensé que nuna me fallarían lo hicieron. No tenía a nadie, solo a mamá y a Gordon, pero era diferente. Como he dicho, estaba solo. Empecé a llorar. Estaba solo, que más daba, nadie me vería. Amaba a Janna y la echaba mucho de menos. Quería perdonarla pero mi orgullo me lo inpedía. Me había repetido miles de veces que ella me quería, que no quería haberme herido... pero ninga vez le hice caso y acababa llorando. 

Escuché las llaves en el paño de la puerta. Era Bill que había vuelto de llevar a Janna. Cerró la puerta de un portazo y empezó a gritar.

- MIRA TOM, AHORA ME VAS A ESCUCHAR - le miré - Y NO VOY A DEJAR QUE TE VAYAS -

- Está bien - dije yo

- Bien, no quería llegar a la fuerza - se flipó un poco. Se puso cómodo en el sofá donde yo estaba sentado y empezó a hablar.

Let's make a pact tonight 2a Temp.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora