Limite 26 - El extraño

1.9K 183 36
                                    

-Baja Sehun. Paso por ti en la noche para llevarte a cenar –Luhan le da un leve apretón a mi mano que no ha soltado desde que subió al coche y tomamos camino.

-Si –digo.

-Espera –me detiene y yo le hago caso-. No estés nervioso ni apagado. No dejes que me vaya preocupado al trabajo, o peor, que cancele todo lo de hoy y me quede contigo –niego. No quiero que detenga un día más sus cosas.

-Estaré bien, es solo que, no es fácil Lu. Esto es raro y diferente para mí. Aun no puedo asimilar que cargo vida en mi vientre. Todo ha sido tan... rápido –pierdo mi vista en nuestras manos aun unidas.

Pasan varios segundos hasta que siento los dedos de Luhan tomar mi mentón con esa delicadeza que me hace escandalizar como colegiala.

-Lo sé, esto es difícil y ha pasado a la velocidad de la luz. Yo, en mi caso, no me imaginaba con un hombre y menos, en una relación y nunca paso por mi mente premiarte. Sin embargo, si hoy llegase alguien y me dice que me concederá regresar el tiempo a tras donde no te conociera como un deseo, lo rechazaría de inmediato. Eres lo mejor que pudo haberme pasado –ambas miradas se conectan. Me tiene hechizado-. El día que te vi, tenía un plan en mente que no elabore bien pero tenía la idea; hacerte mi compañero de juegos. Nunca te dije el significado de esto. Pero pronto lo sabrás. Sehun, de verdad que eres una persona que se ha atrevido a muchas cosas contra mí que nunca nadie había hecho, ni si quiera Rainie. Aceptaste conocerme cuando te di una y mil razones para pensar que era un bastardo de idol engreído. Has podido sobre llevar mi temperamento de mierda y se, que has estado a punto de rendirte, pero no lo haces. No te merezco pero soy muy egoísta para dejarte ir –se inclina hacia mi e inconscientemente cierro mis ojos, pero el beso que supuse me daría, no llega y los vuelvo abrir para encontrarme con mi hombre impredecible a escasos dos centímetros de mi sonriendo ladinamente, con esa sonrisa coqueta llena de su ser engreído. Hago un mohín y viro los ojos.

-Me caes gordo –le suelto y me giro hacia el frente (ya que estoy ladeado). Él ríe. Su risa es melodía para mí.

-Y yo te amo –sin esperarlo, me rodea la espalda con un brazos y con su mano libre me acaricia la mejilla mientras sus labios besan los míos con delicadeza sin perder su toque intenso-. ¿Sabes? Amo que seas berrinchudo como un niño, es más, eso no es lo único de infante que se te da –suelto una risa para luego golpear su hombro.

-¿Puedes comprarme gomas de panda cuando vengas por mí? –pregunto y Luhan de inmediato borra la sonrisa.

-Sehun –me riñe-. No comerás eso. Mis hijos serán cosas regordetas si comes chucherías.

-¡No es cierto! Yo era regordete de niño y era la cosa preferida de mis tías y primos para entretenerse –suelto inconscientemente.

-Vaya confesión. Mi hombrecito era regordetamente adorable –bajo la mirada al instante escucho su comentario. Mis mejillas se encienden-. Ay Sehun, ¿Qué haré contigo? ¿Comerte, devorarte o comerte lentamente con mucha gula?

-Por favor, deja de hacer ese tipo de comentarios –pido en un musito.

-No. Me gusta verte en todas tus facetas y esta, es una de las que coronan mi lista. Me encanta que tus sonrojos sean completamente míos. Deberías ir acostumbrándosete. El día que seas Xiao Sehun, que es igual a "Propiedad de Luhan" serás una cosa roja que podrá confundirse a simple vista con un regordete tomate –se burla de mí. Este hombre puede hacerme enfadar. Lo odio pero lo amo tanto.

-¡Te detesto!. Me voy. Espero que traigas mis gomitas o estaré muy, muy enojado –sentencio. Me giro para poder bajar del auto, pero su agarre en mi muñeca me lo impide. Me gira y de inmediato conectamos miradas. Él esta serio, me mira con esos ojos intensos y abrumadores. Espero a que se disculpe, pero parece que tardara más de lo que suele tardarse.

Sin Limites [HanHun/HunHan]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora