Por Un Accidente

Capítulo 9

-¿T-Tú?, ¿otra vez?  No puede ser...- era él... ésto es imposible.

-Ammm... hola.- me dijo serio.

Era él, el chico que me había hecho caer aquel día en el parque. ¿Por qué? ¿Por qué tenía que pasarme ésto a mí?

-No puede ser. ¿Estudias aquí?- en el fondo quería gritar a los cuatro vientos que era el peor día de mi vida.

-Claro que sí. ¿Por qué tendría otra razón para estaría aquí?-

-No lo sé.- dije desafiante. Hubo un breve silencio cuando me aventuré a hablar. –pero ni creas que se me ha olvidado el incidente en el parque el cual TÚ ocasionaste.-

-¡¿YO?! Más bien fuiste TÚ la que provocó todo eso.- me dijo enfadado.

-Sí, claro. Dime algo lógico... ¿por qué iba a querer arruinar el baile?- en ese momento estaba más que enfada.

-Bueno... como te dije ese día, no me quedare a discutir con niñas tontas e inmaduras como tú.

Dio media vuelta y se fue. "Idiota", susurré, aunque me hubiera gustado gritárselo en la cara.

Finalmente encontré el salón. Tenía la esperanza de no encontrarme con el "chico del parque", porque no lo iba a soportar. Sin embargo, cuando entré no estaba, sentí un alivio al ver que en una de mis clases no se encontraba. Vi sentados a Alex y Bryan, no me sorprendían que estuvieran juntos, después encontré a Emma y Charlotte sentadas en una mesa en medio del salón.

-¿Por qué no me avisaron que ya habían encontrado el salón?- les reclamé.

-Si quieres una respuesta sincera... olvidamos decirte.- hicieron unas sonrisas falsas en sus rostros.

-Mmm... bien.- las destrozaba con la mirada, estaba realmente furiosa. Vi entrar a Louis por la puerta, rápidamente me vio sentada; camino hacia mí y me saludó.

-¡Hola!- me dijo con una gran sonrisa.

-Hola...- estaba muy molesta como para saludarlo tan alegre.

-¿Qué te pasa?, ¿por qué estas molesta?- se veía preocupado, su cara me mostró mucha confianza y sentía que en él podría estar segura.

-No, no es nada... si quieres luego te cuento, en el descanso, ¿de acuerdo?- lo miré con cara de súplica.

-Sí.- realmente se veía preocupado. No soportaba verlo así, y penas nos conocíamos.

La clase de química pasó rápido y más porque fue para presentarnos. Luego de tres clases más y que al igual a la de química se trataba de presentación, la campana de descanso sonó, eso significaba que tenía que explicarle a Louis por qué estaba molesta. La verdad no me daba mucha emoción, pero no quería que Louis se siguiera preocupando por mí.

Llegué a una mesa que estaba en los jardines de la escuela, eran lindos pero... no quería estar con personas es ese momento. De repente Louis me encontró y se sentó enfrente de mí.

-De acuerdo... ¿ahora si me dirás que es lo que te pasa?- me dijo con una sonrisita que se formaba en sus labios.

-Mmm... desearía no hablar del tema- le supliqué.

-Vamos... dime, te prometo que te ayudaré.- me hizo sentir mucha confianza y le dije.

-Bien... para empezar mis amigas me dejaron perdida en el campus cuando no encontraba el salón, y alguien a quien quiero evitar por cualquier cosa del mundo estudia aquí.- empezó a reír e hice una pequeña sonrisa en mi cara.

-Ay... ____, creo que tienes un poco de mala suerte.- ambos reímos.

-Estoy empezando a creer eso.- sonreí al igual que él.

Sonó la campana, hice una cara de frustración, no quería entrar a clases. Louis vio mi gesto y me "arrastro" al salón. Le suplicaba para que no me llevara pero era inútil.

Me sujetaba de los hombros para que entrara, estábamos cerca de las mesas cuando vi algo que me empeoro el día.

-Oh- por- dios.- dije sorprendida. –No, no, no, no... ¿por qué dios mío?- estaba muriendo en el interior.