"Amor Actuado"

Capítulo 4

Chandler se levantó con el pie izquierdo a la siguiente mañana. La noche anterior había cambiado su alarma para poder levantarse más temprano y estar listo para pasar por katelyn a su casa y tener una charla con sus padres pero eso no pudo ser ya que su alarma no sonó. Entró a ducharse pero el shampoo le entró en los ojos irritándoselos y dejándoselos mortalmente rojos.

Cuando bajó a desayunar completamente cambiado con el uniforme del colegio se le derramaron unas gotas de café sobre su camisa blanca por lo cual tuvo que volver a subir y cambiarse, por suerte siempre tenía un repuesto limpio en caso de ese tipo de accidentes.

Cuando ya había subido al auto, revisó su mochila tipo maletín y se dio cuenta de que no llevaba el reporte de Ciencias Sociales que debía entregar ese día por lo que tuvo que regresar a su habitación y buscarlo.

Narra Chandler:

Por fin ya iba en camino hacia la casa de Katelyn y deseaba que la plática con sus padres fuera mejor de lo que había sido su mañana de 45 minutos.

El chofer se estacionó frente a la casa pequeña de dos plantas en donde vivía mi "novia" y después de un largo suspiro salí del auto para encaminarme a la puerta de la casa. Agradecí que este lugar no estuviera lleno de cámaras fotográficas, si bien era solo un modelo las cámaras amaban seguirme como si se tratara de una estrella pop o algo parecido.

Llegué a la puerta y busqué el botón del comunicador pero no solo vi un pequeño botón blanco sin cámara de vídeo ni
micrófono apreté el botón dejando escuchar un extraño sonido de campanillas en el interior de la casa,me impresioné al escuchar un grito proveniente de la casa. ¿Qué no podían usar el comunicador para avisar que abrirían la puerta? Además ¿Cómo sabían que era él quien había presionado el botón blanco?

La puerta se abrió solo un poco dejando ver una parte del interior de la casa y luego el rostro de una adolescente se dejó ver de atrás de la puerta.

-¿Diga? -habló la pequeña mujercita que tenía un gran parecido a Katelyn, era casi como una copia de ella solo que con un par de años menos. Sentí un golpe en mi cabeza.

-No, Jacob -dijo la muchacha tomando en sus brazos a un pequeño de aproximadamente 4 años que tenía un avioncito de plástico en sus manos y señalaba al carrito que anteriormente había impactado en mi cabeza -. Lo siento -se disculpó la chica mientras se inclinaba para tomar el carrito-. Perdone, ¿A quien busca?

-¿Vive aquí Katelyn Nacon? -pregunté dudando completamente de que la chica que iba a pretender a ser mi novia viviera realmente en esa casa-. Sabes, creo que me he...

-No, está bien, ella vive aquí -abrió la puerta aun más-, pasa -cambió al niño de un brazo a otro y se movió de la puerta para dejarlo entrar-. Está en nuestra habitación, ahora le llamó.

Narra Katelyn:

-¡Hermana! -gritaron-. ¡Un muchacho guapo te busca! - Dile que ya voy!!

Supongo que ese muchacho es Chandler, bueno no tengo nada de que preocuparme es un buen chico, eso creo. Espero mis papás no le hagan muchas preguntas. Esperen, mis papás no saben de nada aún. Mejor me apresuro en bajar

Narradora:

-¿Un muchacho? -preguntaron en coro un par de voces masculina que salió del lado derecho Chandler.

El modelo volteó y vio a dos hombres caminando hacia él, un hombre mayor que
seguramente pasaba de los 40 años y a un joven que seguramente estaba entre los 20 años, ambos caminaban hacia él imponentes y con ceños fruncidos.

Chandler creyó que aun estaba dormido y estaba teniendo una pesadilla en donde una familia muy grande vivía en una casa tan pequeña y todos parecían ser una especie de gemelos sólo que de diferentes edades. Eran exageradamente parecidos, cabello castaños, tez blanca y ojos azules.

-¿Se te perdió algo? -la mirada del confundido modelo fue hacia su derecha para ver que el joven que estaba al lado del hombre mayor le hablaba esperando una respuesta impaciente.

-¿Quién es? -preguntó otro niño de voz un poco gruesa para la edad que aparentaba.

Narra Chandler:

-Yo... -empecé a hablar pero un grito chillón proveniente de su lado derecho captó su atención.

Una pequeña de aparentemente 10 años se cubría la boca emocionada y lanzándole miradas eufóricas.

-¡Eres Chandler Riggs! -exclamó la pequeña dando saltitos sin cruzar la línea imaginaria que ella había trazado a un par de metros de él.

-¿Quién? -preguntó otra voz masculina. ¡Dios! ¿Cuántos eran en esa casa?

-Es Riggs, el modelo -dijo la pequeña apuntándolo y ladeando su cabeza para ver al chico que había aparecido a un lado de ella y que el sí que era idéntico a la chica que lo había recibido en la puerta.

Ya estaba mareado, nunca había visto a tantas personas juntas en un espacio tan
comprimido y sentía que me empezaba a faltar el aire. No había tenido ataques de asma desde los 7 años pero en este momento no dudaba en que me fuera a dar uno.

-¡Voy! -gritó una voz que en seguida reconocí y me hizo suspirar aliviado. Unos pasos a toda prisa se escucharon por el piso superior de madera y en un dos por tres apareció Katelyn bajando las escaleras de dos en dos.

Narra Katelyn:

Iba bajando las escaleras, cuando de pronto levanto la mirada y veo a Chandler con mis hermanos y mi mamá, y al final de la escalera pisé mal el siguiente escalón y me desequilibré.

Y en un abrir y cerrar de ojos ya estaba en los brazos de Chandler, evitando un duro golpe contra el suelo.

Todo se congeló a nuestro alrededor, cada uno de mis familiares presentes en el lugar se quedaron en suspenso mientras todo esto pasaba.

-¿Qué pasa? ¿Por qué no hay ruido? -preguntó mi mamá saliendo de la cocina.

Todos, absolutamente todos, lanzaron suspiros.

-¿Quién es él? -preguntó observando al muchacho que me tenía sujetada.