"Amor Actuado"

Capítulo 7

Katelyn observaba todo a su alrededor, nunca había visto un espacio tan grande siendo
desperdiciado pero no podía negar el hecho de que el salón en el que estaba era muy hermoso y elegante, todo tenía un color café de madera aparente, en las paredes había unos ventanales
enormes y hermosos, las cortinas eran tan largas que iban desde el techo hasta el suelo y de algún tono rojizo, en el techo colgaban unas lámparas de cristal y al fondo del salón en la parte frontal
había una pequeña plataforma no muy alta realmente pero para Katelyn lucía como un cuento infantil de princesas.

Narra Chandler:

-Aquí es el salón de baile en donde siempre se organizan todas las fiestas de nuestra
familia. Ahí en frente es donde tocan los músicos.

Katelyn parpadeó y volteó hacia mi que estaba justo detrás de ella.

-¿Y por qué hemos venido? -me preguntó.

-Porque aquí será donde te presentaré y también porque quiero que aprendas a caminar con las zapatillas de tacón...

-No tengo zapatillas -dijo ella rápidamente, de seguro no le aterraba la idea de usarlas pero si le aterraba la idea de comprar un par ya que solían ser bastante caras.

-Ahora ya tienes unas -caminé hacia un lado del salón y tomé una pequeña caja que Katelyn había pasado desapercibida mientras había estudiado el salón.

Me acerqué a ella y le extendí la caja-. Tómala -le animé al ver como ella dudaba.

Finalmente tomó la caja y al abrirla se encontró con unas lindas zapatillas negras con
adornos brillosos y unas correas que se ataban a los tobillos.

-Por el momento practicarás con esas. La próxima semana ya tendrás otras más de acuerdo a la ocasión...

-¿Dices que estás no son para una fiesta? -preguntó incrédula.

-Bueno, eso es lo que pienso -dudé al verla, esas habían sido demasiado muy sencillas, cuando las compré la tarde anterior la joven que me atendió me había dicho que esas eran perfectas para una ocasión casual y tambien me había enseñado otras zapatillas para fiestas y eventos y definitivamente eran más hermosas que esas-. La mujer que me vendió ese par me dijo que esas solo eran casuales.

-Sí, bueno yo soy una chica normal y este tipo de zapatillas para nosotras son lo mejor que buscamos.

Narra Katelyn:

-Tu espalda -dijo Chandler enderezando con una de sus manos mi espalda.

Me acomodé más recta y el muchacho me levantó la cabeza para que viera hacia el frente.

-Camina -dijo y empecé a caminar tratando de mantener la postura en la que
él me había dejado, ciertamente era difícil sobre todo porque no estaba acostumbrada a tener mis
pies tan alejados del suelo además que solía estar todo el tiempo con la cabeza ligeramente inclinada y el tener que adaptarme a caminar de esa manera me estaba costando más de lo que imaginé.

Me detuve, moví ligeramente el cuello y continué caminando manteniendo la
postura anterior.

-Trata de seguir la línea del piso -sugirió Chandler acercándose a mi.

-No puedo seguir una línea que no puedo ver si mi cabeza no está inclinada para poder
tener una buena vista -dije lanzando un suspiro al finalizar.

-Tranquila, no te sientas presionada - y colocó sus manos en mis hombros para empezar a masajearlos, rápidamente me tranquilizó.

-Está bien.

[...]

Durante casi toda la tarde siguieron trabajando con la postura de Katelyn. En ocasiones ella
se molestaba cuando tropezaba al dar las vueltas y Chandler trataba de alentarla, para finalizar la tarde y al llevarla a su casa el muchacho la sostuvo en sus brazos para llevarla al auto y aunque ella renegó y le dio un par de golpes en su pecho pero él no la dejó en el suelo.

Ella se estaba tomando todo muy enserio y Chandler no quería que saliera lastimada de ninguna forma y esos tacones que había usado durante toda la tarde le habían dejado marcas rojas en los pies, se veían dolorosas, por lo que intentó ayudarla, aunque fuera solo un poco porque a diferencia ella lo estaba dando todo para mantener esa mentira que él había iniciado.