Capítulo 35

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Narra Chandler:

-¿Cuáles son las no tan buenas noticias? -pregunté apenas había alcanzado a Katelyn.

Ambos habíamos ido a caminar por los viñedos y en el camino nos encontramos con el establo del lugar, unos hermosos caballos habían llamado completamente la atención de ella, los pedí prestados. Estuvieron alrededor de una hora practicando ya que Katelyn no sabía montar a caballo, después de todo era una chica de ciudad. Solo pasaron unos minutos para que ella agarrara el ritmo y habíamos empezado a trotar sobre los caballos. Después de media hora ella resultó ser una experta en caballos, tal vez porque el caballo blanco con manchas cafés era más agradable que el caballo negro que yo tenía, o tal vez ella era mejor de lo que pensaba aprendiendo cosas nuevas.

Me permití observarla detenidamente mientras dejaba que se adelantara solo un poco. En el colegio Katelyn era muy seria, solo hablaba con dos muchachas tan comunes como ella misma, en las diferentes clases no hablaba o volteaba a ver a los demás, vivía en su propio mundo pero tal vez eso se debía al amor por su familia, tal vez, pensé, ella buscaba tranquilidad en el colegio y por eso prefería mantenerse en silencio. También había observado que ella solía no llevar alguna tarea, no era seguido pero en esas ocasiones en las que no cumplía con sus deberes ignoraba al profesor dando esa imagen de desinteresada a todos.

Una semana antes de que pensara en ella como mi cómplice para esta mentira me dedicado a observarla desde lejos y no encontré nada interesante en ella pero fue justo eso lo que me interesó.

Ahora con el tiempo que llevaban conociendo a Katelyn, ella era la chica más interesante, la conocía y la desconocía al mismo tiempo. Como en este instante, sabía que había algo malo, su rostro lucía confundido y un poco apagado.

Me había quedado tan atento observando su espalda que no me dio cuenta cuando ella empezó a acelerar el paso hasta que la empecé a ver más lejos, inmediatamente sacudí mi cabeza y la alcancé.

Katelyn había mencionado que no tenía muy buenas noticias y yo quería saberlas.

-Sé que hay algo que te preocupa -Ella solo se encogió de hombros y continúe-. ¿Es algo que no me puedes decir?

Ella nuevamente volteó a verme, su expresión seria contagió.

-Técnicamente hay muchas cosas que no te puedo decir, Chandler -volvió su mirada hacia el frente.

-¿Por qué?, Si tú y yo... -dejó sin completar la oración. No había un "Tú y yo" entre nosotros, me estaba empezando a costar trabajo recordarlo.

-Esto es solo un juego -dijo más que nada para recordárselo a ella misma, la palabra "juego" estaba por delante de todo o tal vez la palabra "mentira" pero se escuchaba mejor la primera palabra, la última era quizás muy traicionera-. Este juego puede estar en peligro ¿sabes?

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"Amor Actuado"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora