XIII

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Vivo
||Alive||

"Baje la guardia, caí en tus brazos y ahora estoy de rodillas sólo en la oscuridad, con tu juego sentí que volví a nacer".

Harry miraba a Louis quien jugaba con Phoebe, había ido a visitarlos justo una semana después de la boda, que podía decir extrañaba al mayor.

Ha decir verdad lo había extrañado mucho, sus tonterías hacían falta cualquier día de la semana además necesitaba salir de allí, Danielle lo ahogaba con preguntas sobre Louis. Era odiosa, chillona y demasiado molesta.

Tomó más de su botella de agua que le había ofrecido Lottie minutos antes.

Felicite lo tomo de los rizos comenzando a hacerle una pequeña trenza de cada lado. Hacía muecas a cada jalón que recibía. Aveces se alegraba de ser hombre y no tener que pasar por estas cosas todos los días.

- Hey Harry -el mayor le grito desde el suelo obteniendo la atención de este- ¿Qué te parece si vamos por unas cuantas cervezas y una pizza?
- Me parece genial -Susurró levantando un pulgar.

Le ofreció una sonrisa con sus hoyuelos marcados.

- ¡Ow! ¡mira esos hoyuelos pareces sacado de revista! -exclamó Phoebe.
- ¿Donde esta la otra preciosidad?
- Dormida -El castaño contestó por su hermana.
- Muero por ver a Daisy -río el rizado.
- Yo no, es molesta cuando despierta -comentó el mayor divertido.

Harry volvió a sonreír y su sonrisa se borro muy lento, cayó en cuenta de algo.

Le gustaba su mejor amigo, trago duro mirando sus anillos en los dedos intentando descartar cualquier tipo de opción que este pegada a esa suposición de él.

No podía gustarle, es decir, él no era homosexual. Ni siquiera Louis llegaría a serlo, él quería a Perrie.

Ugh.

- Vamos Harry necesito esa cerveza -se levantó de un salto.
- De acuerdo vamos.

Louis lo jaló levantándolo del sofá, le sonrió y corrió a buscar su chaqueta de mezclilla.

El rizado lo siguió con la mirada y sonrió de lado, al sentir la mirada de una de las hermanas observó por la ventana, la cual estaba cerrada. Muy inteligente.

Louis bajo cinco minutos después riendo al ser perseguido por Daisy, quien estaba en pijama y despeinada. El ojiazul tomó la mano del menor y salieron de la casa sin dejar de reír. Uno por haberle hecho aquella maldad a su hermana, y el otro por la emoción de ser pillado por una niña de 11 años y tal vez por sentirse muy bien con el mayor.

Se detuvieron en unas calles más alejadas, se miraron y rieron fuertemente.

- Antes de que digas algo Harry ella me provocó.
- Seguro, pobre de ella estaba durmiendo -lo regaño divertido.
- Si bueno tenía que levantarse.

Comenzaron a caminar hacia una pizzeria platicando de como estuvo el camino de Harry hacia ahí e incluso lo malo que Louis había sido con sus hermanas.

- Dichoso yo entre todas las mujeres que están en mi hogar -río con fuerza.
- Muy dichoso -secundo el menor.

Entraron al local que vieron primero, Louis saludo a un señor que conocía y se sentó en una mesa apartada del resto. Harry se sentó y se acomodo sus rizos al sentarse.

- Serás el primero en tener calvicie si sigues haciendo eso Hazz.
- Le da forma a mis rizos.
- Medusa no necesita forma -murmuró divertido.
- Louis -Rió.

El castaño se encogió de hombros riendo y se callo cuando una chica le pidió su orden.

- Qué será ¿Una pizza de...?
- De pepperoni -Dijo Harry sin dejar de mirar el menú.
- ¿Algo más? -los miro la rubia.
- Unas cervezas.

La mujer asintió y se fue moviendo exageradamente sus caderas obteniendo la atención de unos hombres a unas mesas de ellos.

- De acuerdo, ¿Qué ha pasado por allá?
- Danielle te extraña demasiado.
- Vaya mierda...¿Sabes algo de Perrie? -Pregunto tímido el mayor.
- Aún no se nada, Zayn la ha alejado de todos nosotros.
- Maldito bastardo -gruñó.
- Tommo se casa en cinco meses, tal vez cuatro y medio no recuerdo con certeza.

El castaño rodó los ojos y rasco su brazo mirando hacia afuera.

- Si se casa ya no la molestare más -Susurró- Me iré de ahí y comenzaré una vida en donde sea menos allí.
El rizado sonrió.
- Me parece bien, ella no te merece.

Él mayor sonrió de lado y tomó de la cerveza en cuanto un chico menor que ellos las trajo, Harry agradeció con una sonrisa y Louis solo hizo una seña poco amable.

El chico se fue dejándolos solos por segunda vez.

- Bien y ¿dime hay alguien que te interese últimamente?
- Supongo que si. Ya sabes sólo pasa.
- Comprendo -asintió.

Harry tomó la mano de Louis y este Frunció el ceño.

- Louis tengo que decirte algo -susurro y entonces se sintió desesperado.
- ¿De qué?
- Es algo que me esta comiendo la mente desde hace unos meses.

El mayor abrió la boca para hablar pero sintió un agradable olor, la pizza estaba frente a ellos servida y recién hecha.

Ambos sonrieron y decidieron comer en silencio. Y unas cuantas miradas disimuladas de parte del rizado.

El teléfono de Louis vibró y observo el nombre de Perrie en este. El castaño dejo el pedazo de pizza aún lado y se dedicó a contestarle aquel mensaje a la rubia.

Harry se sintió fastidiado de inmediato, comió el resto de su pedazo enojado. ¿Por qué ella? En cierto modo estaba agradecido que no se haya enamorado de Danielle hubiera sido mucho peor.

Pero bueno no podía meterse o culparlo, Perrie era muy hermosa, demasiado diría él, pero vamos el no se quedaba atrás era apuesto.

Aunque había un problema, ella era mujer y él por supuesto era un hombre. Gruñó por lo bajo, la frustración que sentía podía hacerlo explotar.

Louis tecleaba con rapidez sin quitar la bella sonrisa que tenía desde que vio el nombre en el identificador.

Bloqueo su celular segundos después que término de escribir.

- Quiere que nos veamos -sonrío.
- Que sorpresa ¿Cuándo?.
- Mañana en una cafetería, dijo que vendría. ¿No es dulce?
- Si, creo que me dará diabetes -dijo con sarcasmo el rizado.

Fastidiado era poco para lo que sentía.

- Come styles no quiero que estés desnutrido.
- Ya comeré -se acercó a él disimuladamente.
- Bien -sonrío mirándolo.

Las ganas de besarlo eran demasiadas, era estúpido decir que lo deseaba. Tendría que parar o Louis terminaría odiandolo.

Maldito corazón rebelde. Es un error muy grande, pronto se olvidará de todo esto y volverá a la normalidad.

Saldrá con Kendall y asunto arreglado.

Basta de fantasear con algo imposible.

- Si espero que todo se solucione con Perrie -lo mira.
- Lo hará, se que ella me quiere. Quiero conquistarla.
- Lo lograrás sólo se tu mismo, no importa lo demás.

Louis sonrió. Venía siendo hora de enamorarla y dejar de esperar a que ella misma viniera hacia él.

Era hora de ser su hombre perfecto.

Lovers || LourrieDonde viven las historias. Descúbrelo ahora