Capitulo 35 La Ultima Gota

147 23 0
                                    

Levanté la cabeza con dificultad, no podía entender como es que las fuerzas no regresaban a mi, observé a Liz, observaba a Andrés intentando ayudarlo pero aún no despertaba.

Liliana corrió hacia mi y observó a Alexis, me miró a mi y alzó una ceja.

—tu plan era convertirte en humana de nuevo—afirmó y se agachó para coger-me del cuello y levantarme—cambiaste tu futuro pero no cambiarás el futuro de Andrés.

Miré hacia donde estaba Andrés, Liz sonrió y se levantó retrocediendo de el, había despertado, Ardack quien se había quedado sin acción por un muy bien tiempo fue hasta el y lo cogió por el cuello elevándolo mientras se elevaba junto con el al techo de la bodega.

—siempre te odie—dijo Lilian obligándome a mirarla.

—yo te odie mas—susurré y sonrió para arrojarme a lo lejos haciéndome caer al suelo.

Se inclinó y cogió el brazo derecho de Alexis, alzó la vista y aún estando ahí me miró.

—yo me encargue de que aquellos cazadores que los atacaron en el bosque supieran donde estaban.

—¿que?—pregunté en susurro intentando ponerme de pie pero ella lo hizo primero.

—me hice pasar por una mujer dolida que había perdido a su esposo a manos de una bestia desconocida,—llevó ambas manos a su cintura—te odiaba tanto que al ver que no se deshacían de ti invente una historia. "Perdí a mi esposo una noche anterior mientras una forma humana lo devoraba y bebía toda su sangre, no lo logre distinguir que era por la obscuridad, pero lo dejó completamente sin sangre." Me hice amiga de esos cazadores hasta que un día les dije que recordé a aquella mujer que asesino a mi marido, les dije donde estabas tu y Alexis, mis planes no eran que mataran a Alexis pero si lo hacían también estaría bien.

En ese momento muchas cosas tenían sentido, la forma en la que nos encontraron y rápidamente dispararon hacia nosotros como si supieran lo que éramos. Lilian se había encargado de delatar-nos.

Había traicionado a alguien de su misma especie.

—¿por que lo hiciste?—pregunté finalmente poniéndome de pie.

—ya te lo dije—encogió los hombros—te odiaba. Te odio y te Odiaré por siempre, así que no me importó en lo mas mínimo acabar contigo por que nunca te acepte, para mi solo eras un estorbo que afectó mis planes.

Lilian me odiaba, estaba segura de que sus planes originales no eran deshacerse de Alexis, solo de mi pero al final de cuentas no lo logró. Aunque si logró separarnos.

—eres una perra—solté sonriendo-le falsamente.

—supongo que si viene de ti es por algo—bajo los brazos dejándolos a sus costados—te vere en el infierno—hizo una pausa—oh, lo olvidaba. Yo seré eterna por siempre, solo tu te iras al infierno.

Escuché un fuerte golpe y giré la cabeza. Liz se escondió en la bodega, sus ojos estaban cerrados y su cuerpo temblaba, Ardack y Andrés se golpeaban, los árboles habían acabado, los troncos estaban por doquier al igual que las ramas, había sangre seca en la tierra, los cuerpos de aquellos vampiros sin corazón estaban secos y tirados en diferentes direcciones.

El cuerpo de Alexis seguía en el suelo, no sabía cuando reaccionaria pero esperaba que pronto para que se fuera de ahí lo mas pronto posible.

Sentí algunos pasos aproximándose y apenas llevé mi vista hacia Lilian recibí un fuerte golpe de su parte en mi pecho con una de sus piernas, caí el suelo intentando sostenerme y se abalanzó sobre mi.

AtrapadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora