Capitulo 29 El Simbolo

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Sentí la luz en mi cara, desperté y miré a Itan a mi lado durmiendo, me levanté con cuidado de no despertarlo, me coloqué su camisa la cual había quedado en el suelo, me acerqué a la ventana y contemple el pasto que había alrededor, los arboles que estaban por ahí, no había personas cerca al parecer era una área despejada.

¿Que pasara cuando enfrente al consejo? ¿que pasará con Andrés? ¿Que pasara conmigo? ¿Que pasará si ellos acaban conmigo antes que pasara cuando todo esto termine...? Si es que termina.

Flashback

Después de borrar la memoria de Andrés, algunos años pasaron, quería volver a ser la de antes, no recuperaría mi vida por que no tenía a nadie, pero quería volver a ser humana, después de investigar lo suficiente descubrí que las brujas podían responder mis dudas por lo cual busque a una de ellas hasta encontrarla.

—existe un sustituto de sangre...—hizó una pausa mirando un cristal—el dolbar y también existe la cura.

—¿y que se puede hacer para acabar con los vampiros?—pregunté.

Estaba decidida, no podía seguir con eso.

—existe un veneno que nosotras podemos fabricar, se encarga de secar a los vampiros sin dolor y de manera instantánea.

Fin del flashback

Tal vez Liz podría fabricar ese veneno. Lo único que quiero es que esto acabe.

—oye ¿por que te levantaste de la cama?—preguntó Itan y me gire a mirarlo haciendo un puchero.

—por que quise—respondí sonando fría.

—vuelve ahora mismo—ordenó como niño chiquito.

—¿y si no quiero?—pregunté alzando una ceja.

—te traeré yo mismo.

—intentalo.

Se levantó y comenzó a colocarse el bóxer lo miré y sonrió, dejo las sabanas a un lado y rápidamente me adentré al baño.

—abre la puerta—ordenó golpeándola levemente y me recargue en ella.

—no lo haré.

Llevé la vista hacia el frente negando con la cabeza y ví que había una tina de baño, sonreí separandome de la puerta para acercarme a ella, abrí la llave y esperé a que se llenará, mientras tanto Itan seguía golpeando la puerta pidiendo que le abriera.

—¿por que te abriría?—pregunté luego de unos minutos.

—por que quiero entrar—respondió con obviedad.

—de acuerdo abriré la puerta—dije al ver que la tina se había llenado.

Cerré la llave y me acerqué a la puerta para abrirla, Itan entró inmediatamente y me miró, sonreí y me quité su camisa dejándola en el suelo para después entrar a la tina.

—¿Que?—pregunté sumergiéndome al verlo cruzado de brazos.

—eso no es justo—habló molesto.

—de acuerdo..—suspiré—¿te quieres dar un baño conmigo?

El sonrió y rápidamente se quitó el bóxer para entrar a la tina conmigo.

Unió sus labios a los mios y junto mis manos con las de el entrelazando nuestros dedos. Era tan extraño hacer algo como eso.

Luego de un muy buen rato de estar ahí me salí y busque una toalla.

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