Capitulo 97 ♥

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Capitulo 97

Justin: No te muevas. (Susurró a un lado de mi rostro, lo tenía sobre mí prácticamente) – Listo. No sabía que le tenías tanto miedo a los cangrejos. (Se rió)

Al principio no entendí, pero cuando giré vi que un enorme cangrejo naranja se encontraba a medio metro intentando recobrar su posición. Él lo había empujado con una mano pero aún estaba en el mismo lugar, con sus dos manos apoyados sobre la arena a los costados de mi cuerpo… ¡No sigas torturando mis nervios!

Tu: ¡Qué rico perfume! (“¡_________(tn)! ¿Qué dices?”)

Justin: (Sonrió y comenzó a separarse de mí) – Gracias. Fue un regalo de Kate.

Tu: Ah. (Dije desanimada)

Lo tomé como una señal de que debería dejar de pensar lo que estaba pensando de Justin, era algo que me recordó que él no estaba disponible para esa clase de cosas que me estaba imaginando…

Volvimos al silencio… tranquilo silencio que sólo era interrumpido por el sonido de las olas rompiendo contra las piedras a unos metros de nosotros. La temperatura comenzaba a bajar y lo estaba notando, sobre todo en mis manos ya que había tenido la maravillosa idea de ponerme una campera sin bolsillos.

Justin: Creo que tenemos que volver… está haciendo frío. (Me miró)

Tu: Jeje, creo que sí. (La verdad era que me temblaban las manos del puro frío)

Él se levantó y se colocó de pie frente a mí para tenderme una mano y ayudarme a levantar, tenía las manos calientes a diferencia de las mías.

Justin: ¡_____(ta)! ¡Estás muerta! (Dijo al tiempo que unía mis manos entre las suyas tratando de darles un poco de calor) – Recordame no volver a traerte por acá a estas horas… (Ahora lanzaba su aliento en un pequeño espacio dentro de sus manos alcanzando así a las mías)

Puedo decir que prácticamente morí ante tanta ternura, tenía miedo de derretirme por completo en ese preciso momento… levantó su mirada en un momento y me sonrió, ¡Estaba más acelerada de lo que pensé! Y lo peor de todo esto es que parecía que todo lo hacía adrede, pero sabía que era sólo yo la que le buscaba el sentido romántico a todo lo que él hacía.

Justin: Listo. (Detuvo su tratamiento aliento-mano)

Tu: Gracias. (Le sonreí al tiempo que cruzaba los brazos sobre mi pecho para mantener el calor)

Volvimos a casa, riéndonos de cuanto chiste se nos cruzaba por la cabeza, la mayoría eran chistes malos, pero nos reíamos de lo mal que los contábamos.

Justin: A ver si éste te lo sabes… ¿Por qué la gallina cruzó la calle? (Lo pensé un segundo mientras llegábamos al porche de mi casa) - ¡Para cruzar al otro lado! (Estalló en carcajadas y yo entrecerré los ojos, ¡No podía contar un chiste tan malo! Su risa continuó hasta que se dio cuenta de que yo no reía) – Ok, es malísimo, lo acepto. (Eso sí me causa gracia y se unió a mi risa casi automáticamente)

***: ¡¡______(ta)!! (Gritó la aguda voz de una mujer)

Era Kate que en ese momento estaba estacionando a “Fabulous” frente a la casa de Justin, se bajó seria… No creo que haya pensado mal de mí, ella no sería capaz de desconfiar de mí, de su mejor amiga… ¿o sí?

Kate: ¡¿Qué hacés con MI novio?! (Gritó aferrándose del brazo de él, sé que mi expresión era de completo terror ante su actitud) - ¡¿Eh?! (Presionó)

Tu: Eeehh… (No sabía qué decir)

Kate: ¡¡Es una broma _____(ta)!! ¡Por Dios! Jamás desconfiaría de ti. (¡Uf! Respiré aliviada en ese momento) - ¿Cómo estás chuchi?

Justin: Ahora más que bien amor. (Le contestó con una sonrisa)

Ambos se enfrentaron y se besaron… hacía tanto tiempo que no veía una escena así entre mi amiga y Justin que me había olvidado lo mal que me hacía presenciarla. Me crucé de brazos como abrazando a mi corazón que gritaba que se detengan y preferí mirar a otro lado, quizás a la casa de los Thompson justo enfrente… ¿Por qué tan largo el beso? ¡Dios! Esta tortura parecía no terminar nunca…

Kate: Me tienes loca Bieber con esos besos… (La escuché diciéndole casi en un susurro a su novio)

Justin: ¿Y eso es bueno? (Su voz seductora hacía retorcerme del dolor, aún así seguía mirando un punto fijo en la casa de mis vecinos)

Kate: ¡Pero claro que sí! ¡Es buenísimo! (“¡¡Ya basta!!”)

Justin: Ok… ¿_____(ta)? (Me llamó, giré mirada) – Nosotros nos vamos… ya sabes, tengo que hablar con esta chica.

Tu: Ok, diviértanse. (Traté de sonar sincera, no sé si lo logré)

Kate: ¡Ah obvio que nos vamos a divertir! (Lo miró insinuante) – Con Justin siempre nos divertimos… (Quizás había un toque de doble sentido en sus palabras)

Justin: No ventiles intimidades amor… (Le dio un pequeño beso en los labios)

Kate: Pero es ______(ta)… podemos hablar de eso con ella… no tiene siete años… (Definitivamente sus palabras habían tenido doble sentido)

Justin: Mejor nos vamos ¿sí amor? Tenemos cosas que hablar…

Kate: ¿Hablar? ¿Qué cosas? (Su expresión se descompuso como si fuera algo malo) – ¿Es grave?

Justin: No amor, no te preocupes… nos vemos después ______(ta). (Me despidió con una mano arriba y yo hice lo mismo)

La pareja se alejó lo más melosa posible hasta la casa de Justin, entraron y todo lo que me había hecho bien durante el día se caía a pedazos en tan solo un segundo, con la aparición de una sola persona…

Suspiré sonoramente al tiempo que miraba al cielo como si las estrellas pudieran mandarme una solución a todo esto… claramente no cayó nada y lo mejor que podía hacer entonces era entrar, bañarme, cenar y dormir… de ser posible en completo piloto automático para no dar vueltas a un asunto que me haría sentir mal finalmente y una vez más como si ya no hubiera sido suficiente…

Me quedé en la bañera un buen rato, disfrutando del agua tibia… era increíble la manera tan sencilla que logré tranquilizarme, mi mente en blanco ayudaba mucho…

La cena estaba riquísima, una de las cosas que había extrañado en mi estadía en Nueva York, con esto no quería decir que Caitlin no sabía cocinar ni mucho menos, sino que siempre se extraña la comida hecha por mamá cuando nos encontramos lejos de ella.

Tanto mamá como Brooke me sometieron a un interrogatorio acerca de qué había hecho toda la tarde ya que prácticamente me había desaparecido desde que salí para ir al aeropuerto.

Les conté a grandes rasgos lo que querían saber, la verdad era que no estaba de ánimos como para tener una conversación que tuviera más de cuatro palabras por frase… no sé si quedaron del todo convencidas con mis explicaciones pero tampoco me quedaría contando cada detalle siendo que necesitaba dormir y recuperar las horas de sueño que había perdido desde la fiesta de Justin.

Subí pesadamente las escaleras y de la misma forma me calcé mi pijama, me acerqué a la ventana para cerrarla y vi que una luz reflejaba desde el balcón de mi vecino, había vuelto a abrir las persianas. Sólo pude escuchar que él y Kate hablaban pero no pude rescatar palabra alguna… en fin, no tenía oído supersónico y lo mejor ahora era dormir.

Cerré la ventana y me zambullí entre mis sábanas frías para quedarme dormida automáticamente… habían sido demasiadas emociones para un día.

~Mi irreparable corazon~♥ (Justin Bieber y tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora