versiculo 41: graviesferas

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Valeria gateaba por los conductos, esperaba no ser vista por las graviesferas.

Si la encontraban, las torretas serian activadas y a las torrestas si las conocía.

***

Amalia veía como Valería se metía dentro de los conductos de ventilación.

-el lado bueno de esto-comento Amalia-es que dentro de los conductos hay cámaras-dijo activándolas.

-pero, no hay manera de decirle nada-combino Max.

-bueno, si, pero eso es solo hasta que salga de los conductos-contradijo Amalia.

-¿pueden discutir en privado-se quejo Kathy que intentaba descansar.

Después de la queja de Kathy, volvieron a quedarse callados.

***

Valeria agradecía el hecho de que la ventilación no funcionase, ya que si lo hiciera estaría o fría o demasiado caliente.

No prendía la linterna para no llamar la atención, además no la necesitaba, podía ver a la perfección.

Escuchó un ruido, se acercó a una rejilla cercana y vio.

Había una graviesfera que había chocado contra algo, lo que había hecho que le cayera encima algo.

Esa era su oportunidad de salir, no había ninguna graviesfera a la vista, sin contar la averiada.

Saco la rejilla delicadamente, la coloco a un lado y salio.

Se quito la chalina que llevaba puesta y enrollo a la graviesfera con la chalina.

La dejo en un gabinete, pues la graviesfera como decía en su nombre era una esfera de cámaras y además flotaba. La misión de estas era buscar a personas no autorizadas, si las encontraba, les daba una señal a las armas destinadas a matar a los intrusos, entre ellas las torretas.

Esa era la razón por la cual andaba con tanto cuidado, no quería empeorar la situación.

Avanzo sigilosamente hasta la puerta y presiono el botón para abrirla, espero y la puerta abrió con un sonido deslizante.

Se apresuro a entrar y la cerro, estando dentro se dio cuenta que el entorno había cambiado, era un pasillo normal, pero estaba completamente cubierto de maleza.

Mientras estaba distraída, escucho un pitido detrás suyo.

Se giro y se dio cuenta de su error, había una graviesfera enfrente suyo, escapar seria inútil ya la había visto, en lugar de eso alzo su pierna y le dio un golpe con ella, el robot chillo y se descontrolo, comenzó a girar en círculos y exploto.

Ella sabia que eso no serviría de nada, la alarma había sido lanzada, ahora tenia poco tiempo para escapar, pues las torretas ya habían sido encendidas...

Primero las plantas acecinas, ahora robots acecinos.

Estoy molesto con el autor...
Esperen...
Soy yo.

Jejeje ahora enserio espero que les este gustando.

Tan Solo Un CocoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora