Tōshirō se encontraba caminando junto a la muchacha de cabello azabache con un semblante serio que se evidenciaba aún más en su mirada oscura y ceño fruncido. En esa tarde calurosa, con el sol brillante y el cielo despejado, Karin trataba de levantar el ánimo de la conversación al intentar distraerlo con distintas historias. Eventualmente, mientras esperaban a cruzar una calle, Tōshirō levantó la vista del suelo y la clavó en ella al preguntar:
- ¿Por qué tengo que hacer esto?
- Porque le prometiste a Kyōraku sensei que irías a visitarlos pronto. Han pasado meses y todavía no lo has hecho.
- Él no está esperándome en realidad, sabe que mentí al decir que lo haría.
- Pues entonces será una sorpresa.
Él le tomó una mano para detenerla y acercarla a su pecho.
- No entiendo cómo es que sigo haciendo lo que me dices.
- Porque sabes que tengo razón.
- ¿Y ni siquiera yo consigo vacaciones de tus órdenes en el verano?
- Hai.
Karin paseó un dedo por su pecho mientras se mordía el labio inferior.
- ¿Tendré una recompensa al menos? – indagó él, colocando una mano en su barbilla para obligarla a verlo.
- ¿Qué te gustaría, Tōshirō?
- Que me digas que sí.
- ¿A qué? – La muchacha se vio confundida. – No estás proponiéndome matrimonio, ¿verdad?
- Īe – negó, sonriéndole a medias -. Hace unas semanas que he estado pensando en algo que podamos hacer juntos, sólo tú y yo.
- Hacemos muchas cosas juntos.
- Algo lejos de esta ciudad, sólo por un tiempo.
- ¿Cómo qué?
- Un viaje. – Notó cómo Karin abría los ojos de par en par al escucharlo. – Llevo años ahorrando dinero y he decidido que quiero gastarlo contigo.
- Tōshirō...
- Sé que no te gusta que haga eso, pero déjame malcriarte sólo un poco, ¿ne?
La muchacha miró en otra dirección con una expresión dubitativa.
- ¿Por qué quieres hacer esto?
- ¿A qué te refieres con "por qué"? – Él se separó unos centímetros para poder verla. - ¿No es normal que quiera pasar más tiempo contigo?
- No es eso, es que... ¿por qué ahora? ¿Has estado pensando demasiado de nuevo? Por mi familia o Shūhei...
- ¿Acaso no puedo simplemente pedirte que viajes conmigo sin que pienses que es porque estoy preocupado por algo?
- Īe, sólo que es extraño. Gomen, no quiero hacerte pensar que no quiero ir, sabes que me encantaría. Pero es demasiado repentino, quizás si lo hubiéramos planeado un poco...
- Planeémoslo ahora – sugirió Tōshirō de repente.
La joven soltó un suspiro mientras negaba con la cabeza para decir:
- Sigues siendo muy despreocupado por cosas que son importantes.
- No es que sea despreocupado, es que estoy demasiado feliz por tenerte de vuelta que no me interesa lo demás.
- Actúas como si tuvieras miedo que pudiera desaparecer en cualquier momento – bromeó ella dándole un golpe en el hombro, jugando.
- Lo estoy.
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El Dragón de Hielo [HitsuKarin]
Fanfiction"- Yo me vengaré por lo que le hicieron a Karin. Yo y sólo yo tengo que hacerlo. - ¿Estás demente, Tōshirō? ¿Acaso no recuerdas cómo terminaron la última vez? - Lo recuerdo bien, pero esto es algo que debo hacer. Tengo que hacerlo. Por Karin y por...