Capitulo 12

13 3 0
                                    

No puedo creer lo que yo misma me hice, se supone que había venido aquí para seguir viva no para enamorarme, lo peor de todo es que no puedo estar con quien amo porque si lo hago corre el riesgo de que lo maten, no puedo ser culpable de otra muerte. Cuando llego a mi apartamento faltan 10 min para que comiencen las clases, no quiero ir, así que le envío un mensaje de texto a Dinora:
-"Oye no me odies, pero no me siento bien, creo que algo me cayó mal, ¿podrías por favor pedir un permiso para mi en servicio social?. 😷😷." Mentir es la manera fácil para salir de tus problemas, pero también te metes en otros.
-"Claro que lo haré no te preocupes 👌, ¿necesitas algo?, ¿quieres que te lleve al medico o llame a alguien de tu familia?. "
-" Gracias 😚, no estoy bien solo necesito quedarme en cama un rato". En realidad lo que necesito es hablar con alguien, estoy ahogándome, ya no puedo mas. Me voy a mi recamara y me pongo mi pijama, después voy a la cocina por galletas y Nutella, pongo música, me siento en la ventana de mi recamara y me pongo a leer uno de los libros que traje de mi casa en Wisconsin. Después de un rato mi celular suena, veo que es David, necesito ánimos así que tomo su llamada.
- Hola hermano. Trato de sonar feliz pero fallo estrepitosamente.
- Hola, por tu tono me doy cuenta que no estas bien ¿o me equivoco?. Es lo malo de vivir con el 17 años.
- No, no te equivocas.
- ¿Que te pasa?. Miente, me susurra mi conciencia.
- Es solo... Te extraño a ti, a todo, incluso a Damian. Sigo el consejo de mi conciencia.
- Yo también, y hablando de papá, creo que esta intentando dejar el alcohol, desde que te fuiste trata de estar sobrio la mitad del día. Vaya eso es una buena noticia, pero ¿cual es su razón de querer estar bien?.
- Me alegro por el, ¿sabe que me estas llamando?. Se escucha un silencio largo.
- No, no lo sabe, de hecho desde que te fuiste no habla de ti, es como... Si no existieras.
- Bien, me tengo que ir, te quiero, cuídate. Lanzo mi teléfono a mi cama muy molesta con migo y con la maldita vida que tengo, no existe una persona menos afortunada que yo en esta estúpida vida.

Como ya no quiero pensar en nada me pongo a investigar a ese tal Fernando Montés, busco en Internet y lo único que aparece es un anuncio en un periódico de hace 2 años acerca de un premio que se le dio por su alto desarrollo en informática, resulta que es un genio, pero si lo era ¿porque termino robando o siendo parte de una organizacion? No tiene sentido, después busco en redes sociales, debo encontrar algo ahí, hoy en dia todos tienen faceboock, encuentro solo una foto suya y de otro chico que conozco pero ¿de donde?, ¡claro! Fue el que no quiso hacerme daño cuando me perdí, por eso creí reconocerlo en Bagel Central, esta etiquetado, su nombre es Ismael Montés, lo busco a el e inmediatamente encuentro su dirección, primero pediré ayuda a Raúl sino tiene información que me sirva iré a buscarla personalmente.
- Idiota necesito tu ayuda. Le digo a Raúl cuando contesta mi llamada.
- Claro, dime que necesitas extraña.
- ¿Tu conoces a un tal Fernando Montés?. Se escucha un largo suspiro al otro lado de la línea. - ¿Y bien?.
- Si, solo se que trabajaba para una organización que nos vendía armas a nosotros, después de unos meses el simplemente, desapareció. ¿Que?.
- ¿Como que desapareció?. No puede ser.
- Si, el era quien hacia el reporte electronico de armas y se lo enviaba a Manuel, pero después ya no volvimos a verlo, preguntamos por el pero no quisieron decirnos nada. No creo que lo hayan matado, bueno espero que no, además ¿porque lo matarían? Si es muy bueno en informática les puede ser útil.
-¿Porque quieres saber de el? ¿Estas metida en problemas?.
- No, solo necesitaba saberlo, gracias te llamo luego. Cuelgo antes de darle oportunidad de preguntarme otra cosa, lo que me dijo me funciona pero no suficiente, tengo que visitar a su hermano Ismael, espero que no le de un infarto cuando me vea. Iré mañana después de clases, ¿quien hiba a decir que tendria mas oportunidades de encontrar al culpable en Maine que en Wisconsin?.

Estoy quedándome dormida cuando escucho que tocan mi puerta, me levanto y voy a abrir.
- Rayos, no te ofendas pero te vez fatal. ¿Como sigues?.
- Igual que como me veo. Eso si es verdad, le digo que entre y las dos nos sentamos en la sala, en el sillón en el que estuve ayer con Bastían.
- ¿Quieres que te lleve al medico?.
- No, estaré bien, de hecho no estoy enferma, bueno si, bueno algo así. Me ve extrañada, pero después su mirada se ilumina y se llena de entendimiento.
- Tu no estas enferma, tu estas... ¡Enamorada!. ¡¿Que?! ¿Tan obvia soy?, no puede ser. - ¿De quien?. Me quedo callada solo viéndola. - ¡Oh no! De Bastían MacMahon. Rayos Dinora es bruja. - ¿Y el? ¿El también te ama?.
- Eso yo... No lo se. He tomado una desicion esta chica no lleva ni una semana con migo y ya sabe como soy, lo que siento, debo confiar en ella, le diré todo de mi, compartiremos esto juntas.
- Bien, pues debes decírselo, no lo sabrás hasta que...
- Dinora. La interrumpo. - ¿Recuerdas que te dije que algún día te contaría todo de mi?. Me mira con asombro y asiente levemente.
- Bien, pues ese dia llego, pero primero necesito que me jures por lo que mas amas que no dirás nada, que serás capas de guardar mi secreto más oscuro.
- Te prometo que no diré nada, por el gran cariño que te he tomado. Veo sinceridad en su mirada, eso vale mas que su promesa.
- De acuerdo, yo vi como asesinaron a mi madre cuando tenia 14 años, la asesinaron por culpa mía, cuando murió le jure que encontraría al culpable, intente hacerlo entrando a una de las... Organizaciones de Wisconsin, el lugar de donde me transfirieron, la razón de que eso pasara fue porque evite que mataran a mi hermano pero para eso tuve que matar al jefe de una organización, ahora una organización completa esta buscándome para matarme. Trate de ahorrarle los detalles escabrosos, su mirada esta congelada, bueno de hecho toda ella esta congelada.
- ¿Que... Pasara si te... Encuentran?. Pregunta tragando saliva. Yo sonrío tristemente.
- Posiblemente me maten, pero solo hay dos personas que saben mi localización exacta y quien soy realmente, un amigo en Wisconsin y ahora tu.
- Ok, ¿no vas a matarme, cierto?.
- ¡Claro que no!, solo mataba en defensa propia, nunca lo hice por gusto, si no lo hacia me descubrirían además cuando entras en esto no tienes opción, eres tu o esa persona.
- Bien, entonces haré lo siguiente, imaginare que tu nunca me dijiste nada, para mi seguirás siendo Kiara Bratcher mi amiga frik.
- Gracias. Después de contarle eso sentí tanto alivio, compartir con alguien lo que me sucede me deja mas aliviada más tranquila.

Difícil Promesa ⭐Donde viven las historias. Descúbrelo ahora