Difícil Promesa ⭐

Capitulo 28

Después de que salí del restaurante regrese al hotel, sabía que todos estarían en el pequeño bar, así que decidí no ir y regresar a mi habitación, necesitaba pensar que haría, además aun no estaba lista para ver a David.

Enciendo mi laptop para revisar de nuevo la dirección que encontré en el USB.

Entrada Gatlinburg, Tennesse
Desde la carretera interestatal l-40 tomar la salida n° 407 (Servierville) hasta la carretera TN-66 sur. En la intersección con Servierville, continuar derecho hacia la US 441 sur continuar por la carretera US 441 hasta Pigeon Forge.

Esa es la dirección, no se que hay en ese lugar, esta antes del parque que hay aquí en Tennesse, tengo que ir para después regresar a Maine. Cuando abro la puerta para salir me encuentro con Bastian.
- Hola. Digo timidamente
- ¿Porque no nos avisaste que ya habías llegado?. Me dice mientras entra a la habitación, porfavor Bastian, tengo cosas que hacer.
- Pues... Es que, necesitaba estar sola, para... Pensar.
- ¿Pensar?. Posiblemente Bastían pueda ayudarme a convivido algo con mi hermano, y pueda decirme que hacer.
- ¡Necesito ayuda!. Sueno con tanta exasperación, camino hacia la cama y me dejo caer boca abajo.
- ¿Te has metido en otro problema?. Pregunta asombrado y al mismo tiempo distingo que tiene miedo.
- No, bueno, si, bueno en realidad no era mi problema pero se convirtió en mio. Siento mas que veo que se sienta en la cama, yo me enderezo y me siento junto a él. - David tiene un... Gemelo, y ninguno de ellos es hijo de Damian Bratcher. Digo en un susurro. - David y Oliver son hijos de Royer Edel, mi madre se embarazó de el cuando estuvieron en la universidad, mi padre se hizo cargo de ellos menos de Oliver, se lo entrego a mi tío Franco, hoy lo conocí. Explico lo mas rápido que puedo, porque se que me pondré a llorar. Lo veo esperando que me diga algo, pero no, solo se acerca y me da un abrazo. - ¿Como les voy a decir que yo asesine a su padre?. Ya no puedo mas, así que comienzo a llorar.
- Tranquila caramelo, yo estoy aquí, Shh, todo va a estar bien. Después de que ya no me quedan mas lagrimas me separo un poco.
- Necesito que me acompañen a un lugar, según Franco ahí en contrare las respuestas que tanto busco.
- De acuerdo, voy por los demás, tu cálmate ¿si?, te prometo que encontraremos como decirle a David. Me besa la mejilla muy cerca de los labios, y con eso es suficiente para que me derrita por dentro. - Tienes una piel muy suave caramelo, me gusta.

- ¿A donde vamos exactamente Bratcher?. Pregunta Manuel estando dentro del auto en marcha.
- Oh, en tu GPS deje la dirección exacta. Nadie a parte de Bastían me ha preguntado sobre mi desayuno con Franco lo cual es bueno, no sabría que inventar y bueno David no ha intentado hablar con migo sabe que estoy molesta por la estupidez colosal que hizo.
- Creo que ya llegamos. Dice Manuel sacándome de mis pensamientos.
- No, no es verdad, aquí no hay nada. Digo porque es cierto, solo es un camino, no hay nada mas, aquí no encontrare respuestas, me bajo del coche y camino un poco, los árboles son enormes y sus hojas están de un color dorado a causa del otoño, están por caerse, el otoño es mi estación preferida. A lo lejos veo un camino de terraseria, mi curiosidad me gana comienzo a caminar hacia el.
- ¡Hey Bratcher! ¿Que haces?. Pongo los ojos en blanco.
- Solo pon en marcha el maldito auto y sígueme o quédate ahí, me da igual. Después de que he camindado un tramo escucho el motor del coche detrás de mi, Manuel y su terquedad, pienso.

Una casa enorme y vieja, con ventanas algo sucias por el paso de los años, al igual que las puertas y el techo, toda su pintura es café terracota, un lindo color, la dirección es de una casa.
- ¿Y ahora que?. Pregunta Raúl. - ¿como la abrimos?. Pienso en la llave que encontré en el cofre, la saco del bolsillo de mi pantalón y la inserto en la perilla, y la puerta se abre, esta casa era de mi madre.
- Bienvenidos a la casa de mi madre. Digo haciéndoles una señal para que todos entren, la mayoría de los hombres de Bastían volvieron ayer y también los de Manuel así que solo quedaron Marisol y Carlos que son quien nos acompañan además de Raúl.
- ¿Porque estamos aquí Kiara?. Pregunta David.
- Busquen algo... Sospechoso. Genial ahora me siento como en una película de espías. Los muebles están cubiertos con mantas blancas para protegerse del polvo, subo al segundo piso en donde hay tres recamaras y un baño pero no encuentro nada además de cosas normales así que vuelvo abajo, de lado izquierdo de la escalera hay otra sabana, no tiene sentido que este ahí, es decir, no hay ningún mueble, la quito y me encuentro con otra puerta que supongo da al sótano. Intento abrirla pero tiene llave, y para esta si no tengo la forma de abrirla, cerca hay una repisa donde se encuentran unas esculturas de tamaño considerable, tomo una y le doy un golpe a la perilla, esta se rompe y la puerta esta abierta.
- ¿Que rompiste?. Me pregunta David. - Una puerta, creo que aquí hay algo. Entro y enciendo las luces, que maravillosamente si funcionan.
- No es cierto... Concuerdo con mi hermano, si esta es casa de mi madre, ¿porque tiene un laboratorio en su sótano?. Escucho que David sube las escaleras y después de un momento bajan los demás.
- Wow Bratcher, tu familia no deja de sorprenderme, ¿porque tu madre tendria algo así en su casa?. Todos están observando lo que hay, yo me centro en un cuadro donde se encuentra el título de Química, otorgado a mi madre.
- Mi mamá era Química. No puedo evitar el tono de orgullo y a la vez de incredibilidad.

Encuentro papeles, no entiendo mucho pero algo si me quedo claro, Juliet no inventó una droga, inventó una cura para la dependencia a sustancias adictivas, ahora las preguntas que tengo son: ¿porque inventó algo así? Y ¿realmente funciona?.