Narra Dylan
Sentí una palmada en mi culo,me dí vuelta encarando a un hombre de unos 30 años que reía junto a sus amigos.
-¡¿Que mierda te pasa idiota?!-le grité.
-Cállate puta tráeme una cerveza-dijo con su voz temblando.
-Idiota-murmuré caminando hacia la mesada.Una patada en mi pierna me hizo caer tirando todo lo que llevaba.
Los tipos reían divertidos,Mila me miró desde la barra y me hizo una seña para que me levantara.
Como pude me levanté y alcanzé las cosas a la basura,tomé una cerveza y se la llevé al tipo que enseguida me sonrió.
-Eres lindo putita ¿que haces aquí?-dijo otro de los hombres.
-No les importa-dije a la defensiva.
Se paró y tiró de mi cabeza hacia la mesa,mi boca dio de lleno en ella partiendo mi labio.
-Escúcha inútil compórtate o te llevaré al callejón y te follaré tan duro que no podrás caminar-rieron los hombres.
-Váyanse o llamaré a la policía-Mila llevaba un bate de béisbol mientras miraba a los hombres,uno de ellos aún me sostenía contra la mesa haciéndo doler mi cabeza.
-Esta bien-bufó uno-Volveré putita-finalmente me soltó y salieron riendo.
-¿Estas bien?- me preguntó Mila.
-Si muchas gracias-le sonrei.
-Denada,puedes irte ten cuidado-me despedí de ella y salí del local,no sin antes ver si los tipos del bar se habían ido.
Mierda como me dolía el tobillo,caminé como pude hacia casa y abrí la puerta que estaba sin llave,de seguro Max ya habia llegado.
-Max-lo llamé.No hubo respuesta.
-¿Max?-entré a su cuarto nadie se hallaba ahí.
Busqué por toda la casa hasta ver la puerta del baño entreabierta.
La abrí lentamente,mi corazón se detuvo al verlo tirado pálido con un frasco de pastillas en su mano derecha y atrás de su cabeza un gran charco de sangre.
-¡Max!-tomé su cabeza moviéndola.
Tomé una toalla desesperado y la puse en su cabeza.
-¡Max no me dejes Max!-sollozé juntando mi frente con la fría de mi hermano.
Por suerte su corazón aún latía.
Corrí hasta el teléfono y llamé a emergencias.
-¿Hola?-preguntaron del otro lado.
-Hola..necesito una ambulancia mi hermano tuvo una sobredosis y...y necesito ayuda-sollozé desesperado.
-Tranquilo señor en un minuto llegaran los paramédicos tranquilo-corté.
-¡Max,no me dejes otra vez,no me dejes!-lo abrazé muy fuerte.No,él no podía dejarme otra vez.
-¿Que hiciste Max?-acaricié su cabello.
Las sirenas se escuchaban desde la calle,dos hombres entraron por la puerta empujandome lejos de mi hermano.
-¿Hace cuanto está asi?-pregunto uno de ellos.
-No..no lo sé llegué del trabajo y estaba así-dije nervioso.
Lo subieron a una ambulancia junto a mi y nos llevaron al hospital,tomé su mano hasta que me detuvieron en una puerta.
-Señor no puede pasar-me dijo un médico.
-Porfavor es mi hermano-lloré intentando entrar.
-Espere afuera-entró dejandome afuera.
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DON'T CRY(Gay)#GanadoraPremiosPlumaLGBTarcoiris2017
Romance-Ganadora en Premios Pluma Arcoiris Mi padre me decía de pequeño NO LLORES Nunca le hice caso, creía que eso era una estupidez ¿Porqué no podiá llorar si tenia motivos? Hasta que lo comprobé, tuve un motivo real, recordaba su palabras una y otra vez...
