Estaba en Asheville pero todavía no sabía cómo encontrar lo que busco, quizá debí preguntárselo al brujo, quizá no debí irme así de rápido, eso fue grosero. Pero tengo prisa, mientras más me tarde, Cristina puede estar sufriendo más por mi tardanza, por mi lentitud.
Me senté frustrada en un banco ¿Cómo la encuentro? No tenía ninguna pista, ni una señal, no tenía nada, eso me frustraba como no tienes ni idea.
Reprimí un grito de frustración y molestia.
¿Cómo llegue hasta aquí? Hace unos meses estaba quejándome de mi miserable vida como humana y problemas humanos y ¿ahora? Estaba buscando a una gemela que no sabía que tenía, estaba en manos de un sicópata brujo poderoso que amenazaba a todas las personas que estuvieran cerca o que yo quisiese, ah y la ñapa, soy hibrida, mitad vampiro y mitad bruja ¿Cómo mi vida pudo enredarse tanto en unos meses?
Unos zapatos golpeaban fuertemente el asfalto, su respiración era agitada igual que su corazón palpitaba muy rápido, estaba corriendo. Levante la vista en dirección a donde mis oídos escuchaban la agitación del cuerpo, por curiosidad.
La chica tenía una maraña de pelo color castaño claro. Su piel era blanca, no era muy alta. Su nariz era perfilada y sus labios rellenos. Mi boca cayó abierta, ella ya casi estaba frente de mí.
Me levante abruptamente y me interpuse en su camino, no es que fuera una de mis mejores ideas, claro esta. Las dos caímos al piso, ella sobre mí, maldije por eso, la tipa pesaba.
Ella gruño se levanto, molesta.
— ¿De dónde mierda saliste? ¿Eres loca, o qué? —dijo disgustada. Su voz era parecida a la mía, solo que la de ella es un poco más aguda y la mía era más gruesa o ¿así sonaba mi voz?
—Aquí estas.
—Si aquí estoy, y tu estas allí —dijo sarcástica. Mierda, es igual que yo. Ahora ¿Cómo me la llevo? ¿La puedo persuadir? No quiero entrar en polémica en medio de la calle. La mire a los ojos y susurre: Harás todo lo que te diga. Ella pestañeo.
—Vamos a dar un paseíto —le propuse, ella sonrió.
—Claro, vamos —la guie hasta los arboles y luego la monte sobre mi hombro y corrí vampíricamente con ella encima. Ella no chillaba, ni protestaba, perfecto.
A mitad de camino por el bosque la chica comenzó a protestar, a gritar y golpearme. Me estaba golpeando la espalda con sus manos y el pecho y la cara con sus pies, me arte y la deje caer con un golpe sordo. Ella chillo y se levanto rápidamente mirándome con cautela, luego sus ojos se abrieron como platos.
—T…Tú…tú… eres igual a mí.
— ¿No te diste cuenta antes? —Ella negó con su cabeza —lenta—murmure.
— ¿Disculpa, que dijiste?
—Hello, hermanita —sonreí de lado. Ella frunció el ceño y luego balbuceo algo que no entendí.
— ¿Hermana?
—Gemelas. Corrección.
—Yo no tengo una gemela.
— ¿Y que soy yo? ¿Una papa frita?
—Mi madre nunca me dijo que tenía una gemela.
—Mi madre nunca me dijo que mi gemela no era mi gemela si no que tenía otra.
— ¿Ah?
—Vez, es tan complicado.
—Explícate —gruño.
—Tenia, tengo aunque no sea de sangre, una Gemela, que ahora sería mi hermana porque la Gemela eres tú.
— ¿Tenias a la Gemela equivocada?
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Delirio [SIN CORREGIR]
ParanormalDespués de que su mejor amiga la convenciera de ir a una fiesta, la vida de Clara Lorgirteh pudo ser todo menos normal. Kler Hustom tiene unas oscuras intenciones sobre ella, el paso años buscándola. Cuando Kler encuentra a Clara, su vida da un giro...