120 días.

Día 27

Decidí no deprimirme. Decidí intentar ser feliz, necesito serlo. Necesito dejar toda esa mierda atrás y comenzar de nuevo. Olvidarlo todo y ser feliz. Recordar me hace muy mal, por eso no pensaré más en el pasado. Tengo que pensar en mi presente y futuro, porque serán fabulosos. Tengo que creer eso, porque así será. Tengo a mucha gente que me quiere y confío en ellas, debo ser feliz con eso. Ellas me hacen los días más dulces, me hace bien estar con ellas, yo las quiero y valoro mucho, solo que a veces no se los demuestro como me gustaría.
Estoy triste, pero eso no impedirá que tenga todas las ganas para cambiar eso.
Nunca creí que valoraría tanto a algunas personas, ellas son muy valiosas y no quiero perderlas. Y sé que no les gusta cuando estoy triste, pero algunas veces es inevitable.
Pero, decidí que intentaría ser feliz, en el fondo sé que tengo muchos motivos para serlo, no quiero sentirme mal todo el tiempo, por eso tengo que ser aún más fuerte y enfrentar las cosas que me hacen daño.
Pero a veces esto me supera.
Yo deseo mucho ser feliz, y ni siquiera quiero estar feliz a cada momento, tal vez desearía no deprimirme tanto. Y ni siquiera por mí, sino que por la gente que me rodea, la gente que quiero, ellas merecen lo mejor, intento estar mejor por ellas.
Esto realmente no es fácil, mi humor empeora cada vez, me irrito más fácil, y ni siquiera sé el motivo, sinceramente espero que esto ya acabe pronto, quiero por fin sentirme bien sin el miedo de pensar que mañana tal vez quiera morir. Pero esto lo voy a superar, como sea, intentaré dar lo mejor de mí para que todo pase y podamos estar todas felices.